Tú y yo

¡Lo imposible solo tarda un poco más!!!

-¿Dónde está la foto que estaba en la mesa de noche? 

-¿Cuál mesa? 

-Derecha, la izquierda sigue ahí. 

-Aaaa, Luciana se las dio a Karla. 

-¿A Karla? ¿Qué tiene que hacer Karla con fotos de nuestros padres? 

-La engaño, me robo el celular y se las pidió a Luciana para ponerlos en el cuarto. 

-¿En qué cuarto? 

-Si hubieras ido a la casa del lago, hubieras visto. Lo hice todo sola, yo ni siquiera no le dije que queremos un cuarto para ellos. 

¿Y por qué? ¿Qué hay de mal poner el cuarto? 

-No pude, ni me sentí capas de decirle de cuarto. 

-¿No veo porque? Si es su trabajo. 

-Estaba construyendo la casa que tiene que ver y con su pasado si lo has olvidado. No quise pasar por ese inconveniente y más... (Cortando a sí mismo Eduardo abandona la sala de TV antes de que habla de más, a Fabio no le queda otra que mirarlo irse) 

-¿Vamos fuera hoy? 

-¿Para qué? 

-¿Y qué tienes algo más inteligente que hacer? Como sea tomamos el día libre del trabajo, te llamo para que vayamos hasta la casa no quieres, ahora no quieres ni salir a tomar. ¿Qué te pasa? 

-No me pasa nada. ¿Pero dime qué haremos bebiendo? 

-¿Qué haremos encerados? 

-¿Qué estás buscando la reina del aeropuerto? (Pregunta Eduardo, provocando) 

-¿De dónde te has recordado ahora de ella? No la vi en ningún lado. No hables estupidez, ¿entonces vamos? 

-Está bien. (viendo que no tiene otra, Eduardo acepta) 

-¿Qué pasa con ustedes 2? (Pregunta Luciana al ver en la mesa a ambos de mal humor) 

-No pasa nada. (contesta Eduardo) 

-No te preocupes, Luciana solo estamos hartos de la monotonía. (agrega Fabio) 

No es muy divertido cuando la vida te es nada más el trabajo. (dice Eduardo, a lo que Luciana comienza reír) 

-¿Cómo que yo no lo sé? ¿Qué creen ustedes que yo hago toda la vida? 

-Perdón, Luci. (le dice Eduardo, teniendo como respuesta a Luciana quien niega con la cabeza con una pequeña sonrisa „tan grandes y siguen comportándose como unos niños”) 

-Lo que ustedes necesitan es una novia cada 1 para que les traiga un poco de color en su vida. (con eso Luciana deja el comedor, mientras ambos en silencio y perdidos en sus pensamientos)