Destino (familia O-R)

Familia

Perdón por aprender a quererte tanto en tan poco tiempo, pero es que eres aquello que nunca busqué, pero siempre necesité.

Fabio sigue despierto a pesar de la oscuridad de su habitación. Con ojos abiertos, mirada al techo, oscuridad alrededor y mente que no deja de repasar todo. 

-¿Te has calmado? (Pregunta Luciana entrando en la habitación a la mañana siguiente) 

Fabio pasó toda la noche despierto a penas mueve la cabeza para verla - Toda la noche no me dejó dormir ¿Tú qué crees? 

-Eduardo se fue, si es eso lo que te hace quedar en la cama. 

Enojado contesta - No quiero ni verlo. 

-Hablamos cuando te fuiste. Me contó todo lo que pasó y como. 

-No me interesa. (sin fuerza en la voz y cansado) 

 

 

 

-¿Cómo está, Fabio? (Pregunta Karla apoyada sobre Eduardo)

-Igual. Ya toda la semana paso que no lo vi, por eso espero que esto ayuda (levantando el CD).

-Valeria también está enojada, solo que con ella no hay esperanza de que unos latidos la hagan cambiar de idea. 

-¿Y qué le pasa? (Dirigiendo le la mirada) 

-Tiene miedo. Por mí. Ella no olvida pasado tan fácilmente, una vez papá me dijo que mis actos la marcaron demasiado. 

-¿Cómo tus actos pudieron hacerle daño a ella, que le hiciste? 

-Lo que no debí. Cada mi dolor lo consolaba con ella. Podemos decir que cada mi falla y no fueron pocos en ella también dejaron una cicatriz de aprendizaje. E, debes saber salgo de mí (dice alejándose de él). - Soy muy mala en el amor, nunca nada tuvo final feliz. (Eduardo nada más la abraza) 

-¿Supongo que ni tus papás no están mejor? 

-¿Sobre mis decisiones? Ya aprendieron que no pueden nada, también lo pasan difícil, pero no tan dramático como mi hermanita.

-¿No crees que vino tiempo de que los conozca? Bueno decir ni a Valeria no conocí, esa vez cuando nos vimos quedó en tal choque que nunca... 

-No lo sé. 

 

 

-¿Lu, puedes por favor llevar esto a Fabio y lo pones reproducir? Lo miran juntos (súplica Eduardo entregándole el CD).

-¿Qué es? (Dudosa pregunta) 

-Ultrasonido.

-¿Eduardo, de verdad piensas que es buena idea? 

-Debo probar, es la última oportunidad. Si ver y escuchar este pequeño no lo blanda, yo no sé qué va. 

-Bueno lo haré. A mí sí me interesa ver ese diablito.

-Garcías (con una sonrisa le manda un beso).

 

 

 

-Fabio, por favor acompáñame. Si, lo sé, estás en contra, solamente una cena. Una cena para conocernos. Anda no me vas a dejar ir solo. Ellos estarán todos y yo. (parado frente la puerta de su recámara sin ningún éxito) - Mira, llevo y Luciana ¿si quieres? 

-A mí no me metes (en voz baja lo advierte Luciana). 

Con los ojos Eduardo la pide. - ¿Sabes que difícil fue convencer a Karla de aceptar? Fue mi idea y a ella no le gusta mucho.

-Hm (dejando un bufido) -, me preguntó por qué. 

-¡Estás vivo!, menos algo. (exclama alegre Eduardo) 

-¿Me dejas si voy? (Con el dedo en frente pregunta advirtió Fabio al abrir la puerta) 

-Si hagas esto por mí, sí. Y míralo así por fin sabremos como es su familia y tendremos nuevas informaciones... 

-Ni te atrevas decir que personas cambian porque yo sé unas que no lo hacen (poniendo sé una camisa).

 

Fabio se encuentra parado en la sala junto Eduardo en la casa de los Rana, mirando la decoración cuando Karla vuela pasando frente ellos - Ahora vengó (alegre contesta para desaparecer en otro lado de la casa).

Por las escaleras baja Valeria que al verlos exclama - Ay, no. (molesta para dirigirse en la misma dirección donde se fue Karla) 

-¿Qué es ella? 

-¿Quién, la chica de buen humor? Valeria, la hermana de Karla.

-¡No! (Exclama Fabio a pesar de que logra controlar su expresión la recuerda muy bien) 

Su exclamó queda en el olvido por los murmullos de la escalera, llevando a ambos hermanos levantar la vista para ver arriba en el pasamano de la escalera a Marin decir - Ven aquí (acercando a Malú). 

-No podemos, las niñas están por aquí.

Echando una mirada rápida que no viene hacia Eduardo y Fabio, dice - No están aquí. (para sucumbirse en un beso) 

 

-¿Por qué está aquí? (En la cocina Valeria enojada pregunta a Karla que está mirando si todo está listo) 

-Les había dicho que vendrá. 

-¿No me digas que ese junto él es su hermano? 

-Si, ¿Qué tiene? 

-Únicamente eso me faltaba. (comentario que Karla ignora por decir algo a la sirvienta sobre la comida) 

Al ver que la ignora, Valeria abandona la cocina con la mirada arriba viendo sus padres todavía en su beso, enojada por todo, los ataca - ¿Cuándo se acabará ese su amor que a veces están insoportables? (Atrayendo la atención de los 4) 

-Nunca, mi vida y lo sabes muy bien. (le contesta el padre para bajar con su esposa tomado de la mano) 

-Ihh (un exclamó que expresa el cansancio y enojo).

Al llegar frente ella Marin toma su rostro en las manos para besarle la frente. En ese momento de la cocina vine Karla - Bueno, somos todos (dirigiendo la mirada a todos se acerca a los invitados para llamarlos a unirse a los suyo). 

-Mientras esperamos que sirven la mesa sentemos aquí (dice referendo sé a los sofás). - Mis padres y mi hermana (dice hacia Fabio y Eduardo que se sentaron en la opuesta de los presentados). - Y bueno como ya saben Eduardo y Fabio. (la incomodidad es notable hasta en la voz de Karla) 

Al ofertarle la mano Marin y Malú se presentan - Bienvenidos, soy Marin, el atormentado de esta casa. 

-No lo escuchen, no le falta nada. Nos da gusto recibirlos, me llamo Malú.

-De mí no esperen que me presenté. (cursada de brazos advierte Valeria, enojadísima) 

-¡Valeria! (Reprendiéndola dice Malú para volver sonreír incómoda a los invitados junto con Marin) 

-Nuestra princesa es así, en su gana. (informa Marin) 




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