Felicidad final

Cuando espires amor y paz es cuando llega la tormenta.

Siendo silenciosa, Valeria está entrando en su habitación, donde encuentra a Karla dormida en su cama. 

-Hola, ¿Dormiste aquí? (Pregunta Valeria en voz baja, acercándose a la cama) 

-Si, te estaba esperando. ¿Cómo salió? (Con voz dormilona, frotándose los ojos, pregunta Karla) 

Con la sonrisa soñadora, Valeria se acuesta en la cama - Perfecto, parafait, perfetto.

Cuando Valeria se da la vuelta, para Karla todas las respuestas están dichas en sus ojos y sonrisa de oreja a oreja - Ahora lo más difícil, decírselo a papás. 

-Af (dice Valeria a su apuración, bajando su torso a la colcha). 

-Valeria, sabes que antes o después les tienes que decir y si lo hacemos ahora, todo se terminará antes. 

-Si, lo sé. Pero dame disfrutar un poquito más. 

-Está bien, te quiero. (le dice, dándole un beso antes de salir de su habitación) 

-Yo quiero que paredes sean azules, Karla. (informa Fabio en frente de Eduardo, Valeria y Karla) 

-¿Qué va a hacer una niña con paredes azules? (Le pregunta Valeria) 

-Estar en las nubes.

-Fabio, nubes son blancas. (le contesta Karla) 

-Todo lo demás va a ser blanco. Y para su información cielo es azul. (termina Fabio la discusión en el cuarto que han escogido para el bebé, abandonándolo) 

-¿Tú estás hablando en serio? (Pregunta con choque Malú) 

-Si (responde con nerviosismo, Valeria agrada de las manos con Karla cómo apoyo, mientras están sentadas en frente de sus padres). 

Mirando a su esposo que guarda silencio, Malú pregunta - ¿Tú no vas a decir nada? ¿Estás segura? (Volteando a ver a su hija) 

-Sí. (Haciendo que Malú vuelva a mirar a Marin, que resignado solo ladea la mano como diciéndole que hay que hacer) 

En la soledad de su habitación, Malú se está frotando las manos con la crema, diciendo - Yo de verdad no sé qué vamos a ser. Ellas 2 como que perdieron la cabeza, después de todo lo sucedido. (Mira a su muy tranquilo marido que está tecleando por la tableta) - ¿Tú no dirás nada? Menos habla conmigo, si te sientes impotente frente ellas. 

-No hay que decir, como siempre solas deciden. ¿Dónde quieres ir? 

-Sé que escogen solas y el sufrimiento si te debo recordar, somos nosotros quiénes las tendrán que consolar. 

-No me voy a meter, ya son grandes para hacer tantas estupideces y yo cansado. ¿Playa? 

-Esto todo es como un sueño muy malo.

-Harto Marin le pone la tableta en las manos - Anda escoge donde nos vamos, que yo me alejo de este torbellino. (dejando perpleja a su esposa) 

-¿Estás seguro de que eso es buena idea? (Pregunta Valeria a Fabio mientras la arrastra por la calle) 

-Sí. Ya han esperado mucho gracias a mí, si no puedo acelerar las cosas menos que entonces bebé nazca con ellos comprometidos (le responde Fabio antes de abrirle las puertas de la joyería). 

Dejando que Valeria busca el anillo para Karla, Fabio le dice al encargado en voz baja - Serán 2, el primero nos llevaremos de inmediato y por el otro vengó después. ¿Cómo va? (Pregunta llegando hacia Valeria que mira y está probando las elecciones) 

-No sé si tenemos la misma talla (probando 1 de plata con una línea de 18 piedras preciosas). 

-No te preocupes, lo más importante es encontrar el perfecto (probando otro de plata con un diamante grande en 2 filas y en longitud).

Probando uno con un diamante grande y solitario, al contemplar el otro, exclama - Este.

-¿Si? (pregunta de confirmar Fabio, positivo) 

-Si, me encanta y sé que a ella también va (le confirma Valeria, mirando una vez más el escogido. Anillo en 2, de diamantes rodeados, con una increíble piedra principal y engastada en un engaste de piedras laterales de micropave, en oro rosa). 

-Junto a ese le va el de nupcias, es este otro (les dice el vendedor, tomando el que acompaña el de gran diamante). 

-No importa, como sea, cuando ya los vamos a comprometer nosotros, que sea con tradiciones extranjeras. (le quita la importancia Valeria, siguiendo contemplado los anillos) 

Fabio se queda contemplando la sonrisa de Valeria mientras mira el anillo que se puso, por lo que sonríe él también y hace seña al vendedor que ese será el otro. Un anillo de plata que en el medio tiene un zafiro de tamaño medio, esmeralda de corte, con 3 diamantes marquesa a lado. 

-Entonces deberíamos buscar 1 para él, ¿No crees? (Pregunta Fabio desde su cuello) 

-Uhm (responde, sumergida Valeria en el anillo). 

-La razón por la que seguro Fabio guiña el ojo al vendedor, apuntando a ella para asegurar que se lo llevará.

Valeria y Fabio están poniendo las últimas decoraciones y quitando las fotos de sus padres, cuando en casa entra apurada Karla - ¿Qué pasa, que es tan urgente? 

Detrás de ella viene Eduardo con la misma expresión de preocupación, mientras Valeria contesta - Nada, solo quisimos darles la sorpresa (levantando las manos). 

-¿Valeria, tú sabes que estábamos al médico? 

-Muy buen, puede ser que por fin nos dices ¿qué es? (Karla solamente exhala el aire) 

-¿Por qué nos llamaron con urgencia? (Pregunta Eduardo) 

-Porrr esto (dice Valeria mientras Fabio les pone en frente la cajita en su palma). 

-¿Y qué es eso? (Pregunta igualmente sorprendida y confundida Karla como Eduardo) 

-Como ustedes nada que actúan, lo decidimos hacer por ustedes (contesta Fabio abriendo la cajita para enseñarles los anillos, mientras Valeria con el dedo apunta a él para dejarles claro que la idea fue de él). - Para romper con todo, el pasado y mi comportamiento. Para qué quede claro esto fue idea de Valeria (dice, enseñando la cinta roja que une las argollas). Aquí tienes (dice Fabio, entrego a su todavía sorprendido hermano el anillo con diamante).