Destino (familia O-R)

Corte y fin

Qué duro es para el corazón saber que no estamos destinados a no ser y que nunca serás el amor de mi vida y que se unan nuestras almas.

-Hey. (Saludo, triste Valeria mientras apoyaba la cabeza en el hombro de Karla al sentarse a su lado)

-¿Qué tan triste? (Pregunta Karla en una voz melosa, acariciando su mejilla)

-Fabio (cruzándose de manos). - No vino al cumpleaños.

-¿Cosas no van bien, a?

-Volvió sé el mismo. Prepotente, antipático, superior, todo lo que odio (la voz de Valeria paso de triste al de mordaz mientras levantó la cabeza). - Ah (exhala el aire) -, si sigue como es voy a cortar con él (del anillo mira a su hermana).

-Te comprendo y no quiero que sufres, por lo tanto, te apoyo.

-Menos a ti te va mejor. (Dice Valeria, buscando el lado positivo)

Haciendo una mueca - No te creas. Tea no paro. Después del discurso que probó vender a Noemia, me hizo un dramón en presencia de cliente y Eduardo dice que a él tampoco deja, lo acosa cada vez que puede con el pasado.

 

 

Desde que volvió a ver a Zita, Eduardo se siente confuso.

-¿Fue raro volver a ver a Zita, que no? (Sonriendo de doble significado, dice Fabio)

-Si, no me lo espere (perdido con la mirada en el recuerdo, contesta Eduardo).

-Se puso más bella de lo que estaba.

-Y como no, creció. Ya no es esa adolescente.

-No.

 

 

-¿A quién tenemos aquí? (Dice Tea, provocante, acercándose a Karla, que se encuentra en la compañía de Octavio).

Karla cansada, sabiendo lo que le espera, suspira, probando reunir fuerzas - Tú no puedes a no molestar, ¿Qué no?

-¿Por qué perder la oportunidad? ¿Nueva víctima? (Apuntando con la cabeza a Octavio)

-Un amigo.

-Octavio Ledesma (ofreciéndole la mano) -, mucho gusto.

Tea lo ignora, sigue cruzada de brazos - Has visto cómo pasó a paso, me acerco a mi propósito. (Le pregunta, en cambio, Karla le responde con asentimiento y un cierre de ojos)

-Karla, ¿No deberíamos irnos? Val nos estará esperando. (Viñedo la hostilidad de la intrusa)

-Sí, vamos. (Aceptando su mano, para que le sea más fácil moverse)

Al alejarse por la calle - Que mujer tan mala, ¿Qué es?

-Tea, la hermana de Fabio que creo conociste y Eduardo, por lo que la tía de esta pobre criatura (llevándose la otra mano al gran vientre).

 

 

Perdido en sus pensamientos, Eduardo oye murmuró de la voz de Karla, incapaz de concentrarse, por lo que en un momento, al darse cuenta de que no la está escuchando, le pregunta - ¿Me estás oyendo?

-Um. Si, no. Perdón estoy cansando (volviendo a la realidad, dice Eduardo).

-¿Las cosas no mejoran con Tea y Fabio, no?

-A medias.

-Bueno no te voy a detener más, vete a casa y descansa (despidiéndolo con un beso, que parece que él apenas regresa).

 

 

 

-Estoy harta, okay. ¡H A R T A! ¡Harta! (La paciencia de Valeria se agotó, por lo que ahora se lo está dejando claro a Fabio)

-¿De qué, exactamente, no te comprendo?

-Si, por supuesto, tú nada comprendes (dejando risas entre palabras).

-¿Me puedes explicar mejor de que se trata? (Confundido por su reacción, pide Fabio)

-Si, te explico (dice asistiendo y con la cabeza). - Esto se acabó, terminamos. Para que te sea más fácil de comprender yo terminé, te dejo, esto ya no puedo. (decidida irse, en medio camino se detiene, para decirle) - Avísame si te es necesario que lo haga en otro idioma. (Abandonando a Fabio en choque, que no comprende cuando todo llegó hasta ese punto)

 

 

-¿Tú sabías que Valeria va a cortar con Fabio? (Pregunta Eduardo con brazos en jarras)

-No sabía que lo hizo. De que me lo platico si, lo estaba considerando.

-Y no me dijiste nada, solo estás ahí parada tranquila.

-Te lo mencioné, pero parece que no me estabas escuchando.

-¿Y por qué lo hizo?

-¿Como por qué? Volvió ser todo lo que Valeria odia, no vas a decir que porque ama a él debe soportar su actitud de egoísta, superioridad y prepotencia. Se volvió tan antipático a ella y ni nombrar que dejó de cumplir sus promesas y la estaba dejando plantada más veces que la había dejado esperarlo.

-Quiero hablar con ella, llámala.

-Eso será imposible...

Antes de que Karla pudo seguir, Eduardo la interrumpe, preguntando - ¿Por qué?

Extrañada por su impaciencia - Porque son horas del trabajo.

-¿Y si son horas de trabajo porque tú no estás trabajando?

Porque voy a la construcción y decidí no pasar primero por oficina. (Exhalando) - ¿Eduardo, te das cuenta de que tú también estás cambiando? (Karla se da cuenta de que no le va a responder porque volvió a perderse en sus pensamientos, por lo que decide salir de la casa)

 

 

-¿Me cuentas por qué no participaste en la reunión? (Entrando detrás del afectado Fabio en la oficina, pregunta Tea)

-No tengo ganas de nada (su voz es quebrada).

-¿Qué pasa, que sucede a mi gran hermanito? (Utilizando la voz lastimera, mientras lo abraza, rodando su cabeza con las manos por estar sentado y apoyándola a su abdomen)

-Valeria me dejó.

-¡¿Qué?! (Más que sorpresa su voz salió alegre de esperanza)

-Se hartó, dice.

-Por supuesto que se hartó cuando solo estaba jugando contigo y tú cómo idiota ibas tras ella en su trampa. Caíste en su telaraña y sabes que hacen las arañas a los que tienen en ella.

-La amo.

-Y no te merece. ¿Tú escucharás a tu hermana, que no?, Y todo va a pasar muy rápido. Ella no vale la pena, recuérdalo (le dice, tomando su rostro entre las manos, en el cual son visibles las lágrimas).

Volviendo abrazo en mismo modo que antes, Tea sonríe triunfal.

 

En soledad, de su oficina, Tea anuncia el siguiente paso - Ahora queda exclusivamente 1 más que resolver. (Agarra el bolso y abandona la oficina, sonriendo)




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.