Cap 90 en busca de un aliado

Luis Mejía 

Cap 90 en busca de un aliado 

--- En casa Alexandra ya sabía de su llegada y los estaba esperando había escuchado de las enfermeras que Fran no estaba bien que aquel viaje lo había agotado más de la cuenta, por eso estaba angustiada además: porque el día por fin había llegado, la presentación de María José. 
--- Por otro lado , Elifonzo llego nueva mente a la compañía ludinski esta vez acompañado de su esposa e hija quienes fueron anunciados por la re sección a Sandra quien de inmediato corrió a la oficina de Alejandro quien estaba con Javier repasando todo lo sucedido y preparándose para lo peor había sido informado por Alexandra que María José y Fran regresaban de la casa de campo, revelando que ya lo savia todo, no había nada que ocultar, al final nada resulto como ellos lo tenían planeado, la mujer había salido muy lista y descubrió la verdad por sí sola, solo hubo que confirmar sus sospechar y aclara algunos puntos para poder dar por terminado el asunto. 
--- Alejandro sostenía su cabeza con sus manos estaba desesperado termina que la mujer que en un principio detestaba; pero de la cual se había enamorado, con el trato, la manera de reaccionar por sus peticiones, amenazas, las cuales le divertían hasta que cedió cuenta que todas esa diversión se convirtió en amor sus gestos, expresiones y miedos lo enamoraron, ahora solo temía una cosa perderle. 
--- Mientras estaba ablando y pensando que hacer fue informado que la familia Villamizar estaba en la compañía, en busca de reunirse con él; ofuscado estuvo a punto de pedir que los echaran pero decidió escuchar lo que tenían que decir, por otro lado pensaba advertirles que si no podía quedarse al lado de su esposa la pagarían por lo que Raquel había hecho. 
--- Minutos más tarde la familia ingreso por la puerta de la oficina, lo primero que escucho cuando ingresaron fue “lo siento mucho Alejandro”. Nunca pensé que mis acciones fueran a causarte tantos problemas, salir de la boca de Raquel quien estaba parada al lado de su padre: prosiguió, sé que esto no resarcirá lo sucedido, pero, quiero que sepas que no estoy de acuerdo con lo que hizo no sé lo que paso, porque tomo esa decisión, tampoco vengó a rogar por nosotros, si este es el castigo que tenemos que afrontar por lo que Raquel hizo lo acepto, pero antes de cualquier cosa que suceda quiero que sepas que sin importar la que agás estoy decidido a pedir perdón a tu esposa por lo sucedido, de ser posible hablare en tu favor, no por tu perdón ni para que te compadezca de nosotros; lo are porque es lo correcto tú, al igual que ella fueron una víctima de las malas decisiones de mi hija. 
--- En la noche María José y Fran habían llegado, el hombre fue llevado de in mediato a su habitación, estaba cansado a pesar que demostraba que se encontraba bien. Alexandra mejor que nadie sabía que estaba fingiendo, casi no pudo contener las lágrimas por verlo sufrir, pero se con tumbo al ver la mirada de súplica en sus ojos pidiendo de manera silenciosa que se contuviera por el bien de la muchacha a su lado. 
--- María José subía a su habitación. después de acomodar sus cosa y darse un confortante baño salió de casa sin decir nada a nadie pero como era esperado, nunca la dejarían sola además no sabía conducir por lo que dependía del chófer o de un taxi para poder salir de casa, mientras se dirigía al gran portón, Susana quien era su guarda espalda asignada la alcanzó en uno de los coches, seguida por dos más que la escoltarían señora suba por favor, es tarde ¡la llevaré adonde desee!, pero siguió caminando como si nada, quería estar sola que nadie la molestara así que fijo su mirada al frente ignorando la solicitud de la mujer quien solo la miraba y suspiro con resignación por lo terca que era, será mejor que ingrese señora de todas formas la seguiremos adonde valla sabe que desde que se casó con el joven Alejandro, su vida cambio ya no puede estar sola, debe estar acompañada en todo momento, con solo mencionar el nombre de su esposo. su cuerpo sintió un escalofrió; se detuvo de repente mirando a la mujer que la seguía de cerca rujió ¡si me vas a seguir no quiero que vuelvas mencionar ese nombre! lo cual la sorprendió “algo debió pasar entre los dos” pensó, seguido de esas palabras no volvió a hablar por el contrario se dedicó a seguirla, sabia lo terca que era, que tratar con ella por las malas no era una opción: después de haber caminado por unos minutos y llegar al gran portón un taxi la esperaba, el cual al ver el lugar tan lujoso, quedó estupefacto, nunca había ido a recoger a ninguna persona por la zona, se suponían que todos eran ricos y tenían autos propios, se sintió inquieto por saber a qué clase de persona recogería, lo que lo dejo con suma admiración, era a la hermosa dama que salía seguida de 3 autos negros lo que lo puso nervioso, una vez ingreso al auto, fuera de la mansión ordeno arranque. El pobre hombre estaba tan asustado que no se atrevió a conducir, en cambio trago saliva 
--- ¿está segura, que no pasara nada en cuanto arranque el motor? preg mirándola por el retrovisor de in mediato entendió a lo que se refería el hombre, volvió su mirada para mirar a los tres autos justo detrás de ella, no pasa nada solo siga su camino; el chófer ante la declaración de la mujer hizo lo ordenado comenzó a conducir por la vía sin una dirección después de haber estado dando vueltas mientras miraba a la mujer con los ojos serrado carraspeo suave mente, para preguntar ¿adónde se dirige? ¡solo siga conduciendo el hombre cero la boca, media hora más tarde con voz tímida, Señora, como comprenderá tenemos rato de estar dando vueltas sin rumbo si no tiene inconveniente buscare una estación de gasolina para llenar el tanque del auto dijo; “está bien” resp, aun así el hombre no estaba seguro, durante todo el trayecto recorrido, estaba siendo seguido por los tres autos sin perder lo de vista; al ver el nerviosismo del conductor María respiro resignada, ordenando “detenga el auto” al escucharlo el chófer busco una parada después de detenerse preg ¿cuánto le debo? nervios el hombre pronuncio una cifra la cual canceló acto seguido salió del vehículo al mismo tiempo que Susana hacia lo mismo y el resto de los escoltas antes de irse agacho la mirada vio al chófer lamento mucho haberlo molestado no era mi intención solo quería estar sola y pensar puedes marcharte no te preocupes por ellos, no te aran nada, solo están aquí por mi luego giro su cuerpo y dirigiéndose a Susana preg ¿estás aquí para asegurarte que no me pase nada cierto? A lo cual la mujer asintió en respuesta afirmativa. 
--- ¡Quiero estar sola! ¡Que nadie me moleste! diles a los demás que no avisen a nadie de mi paradero, si puedes hacer eso me subiere al auto de lo contrario seguiré caminando. 
--- ¡Está bien señora, puede confiar en mí, no les diré dónde está, pero, cuestiono¡ ¡Tengo que informa que se encuentra con migo! 
--- Resignada de saber que era imposible que se tomara la libertad de desaparecer sin avisar, no tuvo más remedio que aceptar que informara que estarían juntas: asintió y camino al auto. Al ver que la mujer no se había negado aquí avisara que estarían junta y que regresarían cuando esta quisiera, suspiro de alivio camino a su lado ante la mirada de los transeúntes quienes solo quedaron admirados por lo sucedido.