Luis Mejía
Cap 107 Una hermana acongojada
--- ¿En qué piensas?, preg María José. En lo diferente que hubiera sido nuestras vidas si Alejandro, su familia y todos los que estuvieron involucrados en este engaño no hubieran aparecidos jamás en nuestro camino.
--- Con esa declaración, María comprendió que su hermana no estaba feliz con el resultado final: no tiene caso pensar en eso, las cosa fueron así y ya, no las podemos cambiar además no todo fue malo mírame aun después de todo lo que sucedió soy feliz al lado de… “interacción” ¡quieres decir que ya no te importa lo que paso!, ¡que pudiste olvidar todo lo que tuvimos que pasar por su culpa!; con tristeza se alejó de ella acercándose a la gran ventana, una vez estando frente a ella, continuo. Sé, que lo que piense no importa, lo que real mente importa es tu felicidad, si él te hace feliz no me opondré; pero nunca lo perdonare siempre será el responsable de nuestras desgracias.
--- Soltando lágrimas, dio la vuelta, se acercó a sus sobrinas, con cara feliz les hablaba: ¡quiénes son la más hermosa de todas las sobrinas!, llevando su cabello detrás de la oreja continuo jugando y riendo mientras era observada por su hermana luego de un tiempo volvió a fijarse en su hermana; diciendo ¡no te juzgare ni te are las cosas difíciles!, dijo estando sentada en la cama sosteniendo sus manos. Es tu vida, puedes vivir la como lo desees; además, ¡yo también encontré la felicidad! exclamo alegremente con una sonrisa María José la incito a que continuara; ¡estas saliendo con el hombre, con el que llegaste! “si” respondió Marcela, ¿desde cuándo?, continuo interrogando.
--- Después de marche de la ciudad, él y su padre me acogieron en su casa. También me dieron trabajó en su empresa. A partir de ese momento estoy trabajando con ellos, una cosa llevo a la otra; hasta que decidimos salir, después de meses de estar trabajando juntos; esto, aun no se lo he dicho a mi padre. Nicolás vino con migo para pedir mi mano que exclamo emocionada.
--- ¡Hermana te casaras! ¿Cuándo? muy pronto si todo sale bien.
--- la conversación se alargó durante 3 horas en donde Alejandro estaba sentado en la sala de espera con Nicolás, cuando escucharon los gritos de María José sabían que algo estaba pasando en la habitación, sin la intención de interrumpirlas, decidieron dejarlas.
--- Alejandro savia que si algo malo sucediera, Marcela sería la primera en pedir ayuda. Mientras esperaba no pudo contener más la preg que tanto quería hacer en su interior, apretando los puños por saber quién era el hombre que tenía justo a su lado, soltó ¿estuviste manteniendo encubierta a Marcela durante todo este tiempo?
--- Nicolás no resp con palabras, solo asintió con la cabeza para aceptar lo dicho anterior mente con esa confirmación, mirándose a los ojos el uno al otro, Alejandro entendió que no le diría nada acerca del asunto, con eso solo decidió hacerle una advertencia, ¡no trates de jugar con ella, puede que no lo demuestre pero te aseguro que Marcela es diferente de su hermana, nunca perdonara una traición! lo digo por experiencia, ella, jamás me perdonara que allá lastimado a su familia me considera el resp de todo lo malo por lo que tuvieron que pasar así que te aconsejo que no dejes que se entere; “que tú”, ¡fuiste el responsable de drogar a María José en la discoteca aquella noche de lo contrario será el fin de todo lo que has vivido azulado!.
--- Con la advertencia hecha Alejandro se marchó a la empresa tenía cosas que atender, ya llevaba dos días sin asistir y la conversación con Marcela no terminaría pronto.
--- Nicolás quedo en el hospital esperando, que las dos hermanas terminaran su conversación la cual estaba bastante animada; llevando sus manos a su cabeza sabía, lo que sucedería si lo dicho anteriormente llegara a pasar; en un principio, no sentía ningún tipo de interés por Marcela; pero, la cosas cambiaron con el pasar de los días y el trato, mientras ella, se ocupaba de su trabajo, la cercanía que se generó para discutir temas importante fueron ocasionando que Nicolás viera en ella cosas que antes no había visto hasta que un día se percató que la necesitaba cerca para ser feliz fue en ese momento que se prometió que no la perdería por nada, desde ese momento se dedicó a cortejarla hasta que ella acepto salir con él para luego establecer una relación estable con sus condiciones una de ellas no decir nada al público ni a su familia; bajo esos términos estuvieron juntos hasta que por fin ella acepto casar con él.
--- El día culmino con una visita llena de emociones para las dos hermanas, al salir Marcela vio al hombre que la esperaba con una sonrisa en el rostro; al verla se levantó, acercándose la tomo por la cintura y la beso con ternura cosa que avergonzó a Marcela, al separarse miro en todas las direcciones para percatarse que nadie de su familia la estuviera observando.
--- Pronto pasaron dos meses desde que las niñas ludinski nacieron, María José, una semana después del parto, fue dada de alta y luego llevada a casa; donde, paso sus días de reposo al lado de su esposo bajo los cuidados de Ana y Susana quienes se convirtieron en las ayudantes durante su proceso de recuperación junto a su herma quien las visitaba de vez en cuando.
--- En la actualidad ya podía valerse por sí misma, paseaba con sus hijas y hermana por los jardines de la mansión, mientras su esposo se hacía cargo de las empresas a su cargo, y Nicolás por su parte se en foco en los negocios que había adquirido mientras vigilaba a María José, una vez completamente recuperada María José, Nicolás realizo una gran recepción en uno de los hoteles más exclusivo de la ciudad donde estuvieron invitados los miembros de su familia la familia ludinski y empresarios del país y de su país natal, en dicha recepción se sintió la ausencia de Alexandra a quien, se le invito; pero, la rechazo. esa fue la noche donde el heredero de la familia Gutiérrez, pidió la mano de Marcela, en matrimonio, la noche trascurrió en medio de conversaciones risas y buenos deseos hacia la pareja quien no se le podía negar su lo felices que eran todo termino con la satisfacción de la gran boda que se celebraría muy pronto.
--- El tiempo corrió con rapidez la familia no paraba de pasar por momentos emotivos María José, una vez estuvo en condiciones de viajar con sus hijas, o dudo ni un segundo en tomar un viaje para visitar a Alexandra, a quien no había visto, después de la muerte de Fran Wiht, ese día la mujer y sus hijas llegaron al lugar don la mujer que durante meses controlo su vida como si fuera un títere sin voluntad.