Capítulo 7

Imperio de Prestia cinco años más tarde...

La emperatriz se encontraba en sus aposentos mirando por la ventana mientras escuchaba a sus hijos parlotear en su habitación. Los cuatro se encontraban allí con su madre.

—¿Cuándo veremos a Weilar? La extraño, ya han pasado cinco años, ¿Qué le toma tanto tiempo?—habló Sora, la hija adoptiva de Erency, hija despreciada de la concubina Asteria.
—Se está preparando para tomar el trono de dos imperios importantes, no es sencillo Sora—dijo Darek a su hermana.

—Y si padre lo aprueba, el abuelo quiere que sea la emperatriz de Prestia también—habló Tarek.

—Shh. Nadie lo sabe aún.—dijo el más joven de los príncipes, también adoptado, Liam, hijo de la difunta concubina Zenna.

—Cierto.

—Niños. Su padre aún está dialogando con el consejo, lo más probable es que acepten la propuesta de su padre, de todos modos no les queda otra opción. Y hablando de otro tema, su hermana nos invita a su coronación en el imperio Ohr, así que viajaremos.—dijo con una sonrisa Erency a sus hijos.

—La hermana es genial. Tiene un gran futuro por delante.—dijo Sora con una sonrisa.

—Así es mi niña, igual tu futuro, será igual de brillante.

—Acompañaré a mi hermana en todo momento. No seré como Rina, ella es despreciable.—dijo con una mueca la joven, a lo que los hermanos se rieron.

Su madre los miró con el ceño fruncido—No los crie de esa forma, es su hermana después de todo.

Los jóvenes bajaron la cabeza y dijeron:—Lo siento.

En ese momento tocan la puerta de los aposentos de la emperatriz.

—Adelante.

—Su Majestad—dijo una doncella haciendo una reverencia apenas entró—Sus Altezas Imperiales. Emperatriz, se la solicita en la sala de reuniones del consejo.

—Muy bien. Enseguida voy, quédate con los niños y llévalos a sus clases.

—Entendido su majestad.—hizo otra reverencia cuando vio que su emperatriz partía.

En lo que salía se le unieron sus escoltas y la acompañaron por el pasillo. Al bajar las escaleras se encontró con la concubina Asteria, quien a regañadientes hizo una reverencia, igual que sus sirvientas.

—Su majestad—dijo esta con una mueca en su rostro—, que grato verla, justo estaba yendo a ver a mi príncipe, mi gran tesoro.

Erency sonrió—Claro. Y yo voy a la reunión del consejo, a dialogar sobre el heredero al trono.

—Hablé con su majestad para que tome en cuenta a mi hijo, después de todo es el mayor de los príncipes.—dijo Asteria con una sonrisa de suficiencia.

La emperatriz pensó para sus adentros -Mi hija es la mayor de todos los hijos del emperador y la luz de sus ojos-

—Tu gran tesoro puede ser mayor, pero jamás llegará al trono, no mientras esté viva, tengo un As bajo la manga. No te preocupes, mi querida Asteria. Saldrás de aquí como llegaste. Con las manos vacías y sin tus hijos.

—Esa niña no la considero mi hija, toda tuya. Debió nacer varón, no una inútil niña. No me sirve.—dijo con desprecio.

—Y por eso el emperador me la dio a mí. Ahora si me disculpas, el consejo me espera.

La emperatriz se fue con la cabeza en alto y dejando a una concubina enfurecida.

—Me las pagará, una por una.

(...)

Una vez llegó a la sala del consejo, la anunciaron para entrar.

—¡ATENCIÓN, SU MAJESTAD, LA EMPERATRIZ!

Todos se levantaron he hicieron una reverencia. El emperador se levantó de su trono para recibirla.

—Mi cielo.—los ojos del emperador delataban cuanto amaba a su emperatriz.

—Su Majestad.—dijo con una enorme sonrisa Erency.

—Llegas justo a tiempo. Toma asiento.

Ambos se sentaron y el emperador dijo:—Comencemos.

—Sus majestades, pido la palabra.—dijo una mujer.

—Adelante.

—El primer tema y el más importante, es sobre el sucesor al trono.

—Ya lo hemos hablado, así como incluimos mujeres en el consejo, con mi padre y mi esposa estamos de acuerdo en que debería ser la princesa Weilar, la heredera al trono, se convertirá en princesa regente de Escoldar a sus 18 y emperatriz a los 21, si no es antes y ni hablar de que ya es la emperatriz del imperio Ohr.

Empezó una conmoción y todos empezaron a murmurar entre ellos.

—¡Silencio!—dijo la emperatriz y todos se calmaron—Mi hija es más capaz que todos sus hermanos y lo ha demostrado desde una edad temprana.

—Es verdad.

—Sí, tiene razón.

—No estoy convencido. El príncipe Sika es el mayor, tiene potencial, bien podrían darle la oportunidad—Dijo el hermano mayor del emperador, Marcus, duque de Gremya.

—En todo caso es el príncipe Darek quien debería asumir el puesto, ya que es el hijo varón más grande legitimo, no como el príncipe Sika, que es hijo de una concubina*. En todo caso, estoy a favor de que la princesa Weilar asuma el puesto de princesa heredera y en un futuro se nuestra emperatriz—dijo el joven Duque de Hasdell, Barak con solo 21 años, ya había asumido el cargo dos años atrás, tras la muerte de su padre.

Luego de ese comentario muchos otros se oyeron de todas partes y con diferentes opiniones.

Pero el segundo comentario más destacado, aparte del Duque, fue el del marques Halt, Omer, hermano menor del emperador.—Mi sobrina es más que apta para el cargo, doy fe de eso. La conozco desde bebé y sé de sus capacidades y se ha estado preparando para esto desde muy pequeña.

—El Duque y el Marques tienen toda la razón.— se escucharon afirmaciones de muchos de los presentes.

—Bien, ahora que lo saben. Quiero saber quienes están a favor. Levanten la mano y digan yo—habló el emperador.

Al menos el 55% de los presentes levantaron la mano y dijeron "YO", ya que había partidarios del príncipe Sika y los neutrales. En ese momento las puertas se abren y entra el ex-emperador Jarlen.

—No me quería perder este momento.

—Padre, ¿has estado escuchando detrás de la puerta todo este tiempo?—dijo el emperador frotándose la sien.