Capítulo 11. Un recital muy especial. Parte 1.

Taehyung.

–Disculpen, ¿puedo dar un aviso? –preguntó Rosie de manera tímida.

Todos giramos a verla con atención. Aun estábamos en el día de campo que habíamos organizado para ella, Mery y Any, y era un éxito porque las tres estaban de mejor animo a como habían legado, sobre todo Any, que ha estado envuelta en esos problemas con su papá con lo de la pensión de sus hermanos.

–Claro, pequeña, todos te escuchamos –le dijo Namjoon.

Rosie se levantó en su asiento con ayuda de Jimin, que coloco su mano en su cintura para evitar que cayera o algo así. Sacudió su suéter verde y comenzó a jugar con un mechón de su cabello.

–Pasado mañana tengo una presentación de ballet en la academia, seré parte de un grupo y también haré un solo... y... y me gustaría mucho que fueran... –dijo ella sonrojada.

Mire a esa dulzura de niña con ternura, ¿Quién podría resistirse a semejantes encantos? Su inocencia, timidez y aura angelical hacía que mi corazón se derritiera de amor, y creo que los demás también piensan lo mismo.

–Oh, Rosie, muchas gracias por invitarnos, haremos todo lo posible por ir –dijo Jimin acercándola más a él.

–Si no pueden hacerlo no hay problema, solo quería hacerles la invitación, porque los quiero mucho –dijo con una pequeña sonrisa.

Hobi se levantó de su asiento, tomó a la niña en sus brazos y la hizo reír mientras picaba su estómago.

–Eres muy tierna Rosie, demasiado encantadora para mi corazón –dijo él dando vueltas con ella, haciéndola chillar de la emoción.

– ¿Dónde será el evento? – pregunto Jin a Mery que estaba a mi lado mientras Rosie jugaba y corría con Jimin y Hobi.

–En la misma academia, tienen un pequeño teatro para estos eventos –le respondió ella.

–Cuenta con nosotros, iremos un poco disfrazados para que nuestra presencia no incomode a nadie –dijo Yoongi.

–Claro, siempre y cuando eso no interfiera con sus planes

–No lo hace, aún tenemos días de descanso –dijo JungKook despreocupado.

–Yo si tengo que checar mi agenda, ese día hay que hacer un montón de papeleo y me han pedido ayuda para las correcciones y traducciones del mismo –dijo Anya.

–Revísalo y avísanos, tal vez luego del evento podamos ir a algún lugar a festejar –sugirió Namjoon.

–Podemos hacerle una pequeña fiesta a Rosie, le gustará mucho que festejemos ese logro en ella –propuse de pronto.

–Es una excelente idea Tae, incluso podemos invitar a la dulce de Farijh –dijo Anya.

–No veo porque no, ella es muy amable y linda –dijo JungKook apoyándola.

–Pongamos manos a la obra, solo tenemos un día para organizarnos –dijo Jin levantándose con entusiasmo.

Anya igual se levantó a contestar una llamada mientras los demás ayudaban a Jin a recoger las cosas del día de campo, dejándome solo con Mer.

–¿Siempre son así de organizados? –me preguntó Mery curiosa.

–Sí, siempre hemos sido así, creo que es una vieja costumbre que tenemos.

–Fue una linda idea lo de la fiesta para Rosie –dijo dándome un ligero empujón.

–Es que de verdad me gusta hacer feliz a Rosie, me gusta mucho consentirla.

–No puedo culparte, es imposible no amarla y consentirla.

–Creo que es parte del efecto Rosie –dije pensativo, haciendo reír a Mery.

–Si, así es.

–¿Te gustó este día de campo?

–Si, muchísimo. Gracias por habernos invitado.

–No es nada, me gusta mucho hacerte sonreír –solté de pronto. Tapé mi boca con una mano al darme cuenta de que fui muy hablador.

–Lo lamento... quiero decir...

–Tranquilo, se lo que quieres decir.

–¿En serio?

–Bueno, eso creo –dijo sonriendo avergonzada, creo que era la primera vez que la veía sonreír así.

››Oye, ¿puedo hacerte una pregunta?

–Claro.

–¿Es verdad que Anya y JungKook casi se separan? –preguntó en un susurro.

–¿Cómo sabes eso? –pregunté confundido, nunca se dio a conocer esa información.

–Anya me lo mencionó.

–Oh, ya entiendo –dije tranquilo –. Sí, lo que dijo era cierto.

–No puedo creerlo.

–¿Por qué?

–Es que, se ven tan felices ahora, y solo las personas que se ven así son las que de verdad se aman.

–Es cierto, tienes mucha razón en eso, pero por poco no los vemos así de juntos.

–Anya mencionó algo acerca de ella encontrando una caja debajo de su cama.

–Sí, ya recuerdo eso –dije sonriendo –. Durante cinco días vi a JungKook dar vueltas en su habitación buscando una manera de decirle a Anya que la amaba.

››Al segundo día se le ocurrió hacer una caja con fotos, figurillas de papel, notas y dulces con cada momento que fue importante para ellos. Paso como tres días haciendo eso sin que Anya se diera cuenta, y al final escribió una carta en español expresando sus sentimientos.