¡¡¡VACACIONES!!!

La verdad me sentía demasiado confundido pero ahora estaba feliz, se podría decir que más tranquilo, iría de vacaciones por primera vez, estaba ansioso por llegar y contárselo a mamá, si bien sabía el destino estaba más interesado en quiénes irían, finalmente conocería a la intrigante desconocida de los Montesinos, he llevado un buen tiempo tratando de averiguar tan solo como se llama pero no he conseguido nada.

El viento sopla cálidamente y un sol brillante da la bienvenida al día, todo parece ir de maravilla doy pequeños brincos de alegría maravillado con el viaje, aunque me hacia el difícil y el de no querer viajar, sin embargo el gusto de querer viajar no me dejaba quieto en mi interior sentía unas inmensas ganas de gritar a todo pulmón.

¡¡QUIERO IR!!

—Alex lo grita a todo pulmón dando vueltas y saltos de alegría—.  Enseguida siento varias miradas sobre mí y no puedo evitar reírme nerviosamente y ponerme rojo como un tomate, pego una pequeña carrera para llegar a casa. Fuera de la puerta  de madera negra mi respiración agitada, mi garganta ardiendo y un ligero cosquilleo en mis costillas me invaden, abro la puerta y de primera vista tengo las escaleras de mi casa dando para arriba mostrándome a una adormilada hermanita con los cabellos todos desarreglados como un erizo —Suelta una carcajada y va a abrazarla—. Buenos días amor de mi vida —La levanta en brazos y besa su mejilla—. Siento como los bracitos de mi princesa rodean mi cuello y sonrío sabiendo que acaba de tomar mi espalda como un nuevo mueble para echar la siesta, camino por la planta baja de la casa buscando a mamá hasta que la encuentro en la cocina preparando algo de comer. Hola mamita —Alex se acerca y besa la mejilla de su madre—.

—Hola hijo —Sonríe y le devuelve el beso en la frente—. Viniste bastante rápido, pensé que te quedarías con Clark hasta el almuerzo

—Sonríe, no mamá. Es que fui a su casa a platicar de algo que me propuso Clark y a darle mi respuesta, entonces fui a eso y ya volví, debo pasar el fin de semana con los amores de mi vida

—Hay hijo, sabes que no me molesta si te quedas allá, te mereces un descanso de vez en cuando. Nos merecemos un descanso —Corrige Alex—.  Mamá, la familia de Clark nos han invitado a unas vacaciones con ellos en Miami, y he dicho que sí, con la condición de poder llevar a los dos amores de mi vida y han aceptado

—Espera ¿Qué? —Martha mira a Alex—. ¿Qué has dicho?

—Que iremos de vacaciones mamá, así que hay que preparar maletas porque nos vamos mañana por la mañana

—Hijo, sabes que no puedo ir, tengo que trabajar

—Ya está resuelto eso mamá

— ¿Resuelto? ¿Cómo? —Indaga curiosa—

—Mamá, el señor Rafael es tu jefe, me dijo que había arreglado todo para que viajes conmigo, que tienes ese tiempo libre y pago

—Sabes que no puedo aceptar eso

—Mamá

—No Alex, llamarás y dirás que no viajaré, puedes ir ti si quieres pero yo no puedo ir, no es correcto aprovecharse de las personas, así sean Los Montesinos, además ellos ya han hecho mucho por nosotros al darnos esta casa para vivir, no queda lejos de donde estudias y tampoco de mi trabajo, así que les llamarás, te disculparás y dirás que no puedo ir yo

—Bufa, está bien —Hace puchero—. ¿Puedo llevar a Sofí al menos?

—No Alex, tu hermana es pequeña y no puede viajar sin su madre

— ¿Me dejarás viajar a mí?
— ¿Por cuánto tiempo?

—Emm dos semanas —Susurra—

— ¿Cuánto?

—Dos semanas mamá —Se avergüenza un poco—

—Suspira, está bien, pero con dos condiciones —Lo mira cruzada de brazos y sería—

— ¿Condiciones? —Martha asiente—. Bien dime mamá 

—La primera es que no te iras con lentes menos para allá, tienes lentes de contacto usa esos, no vas a perderlos y luego andas ciego como un topo por allí —Alex se sonroja—.

La segunda condición que me estarás llamando dos veces por día, adicional a eso quiero que me hagas una video llamada una vez al día, y que no te alejes de la familia en ningún momento, Canadá es muy diferente a Estados Unidos ¿Entendiste?

—Alex asiente, fuerte y claro mamá. Te prometo que te estaré llamando constantemente y mandándote fotos de allá —Alex se acerca y la abraza—. Muchas gracias mamá, te traeré algo de allá

—Alex —Lo mira sería—.

— ¡Ya! ¡Ya! —Sonríe de manera socarrona—.

— ¿Comerás algo?

—No mamá, dejaré a Sofí que siga durmiendo e iré a empacar, gracias sonríe y desaparece de la cocina, sube hecho una flecha directo a su habitación a preparar equipaje para el viaje, mira playeras, camisas, pantalones, tratando de decidirme cual será la ropa más adecuada para el viaje, será la primera vez que salga de Canadá y se siente entusiasmado por el viaje.

Horas más tarde Alex tiene preparado una maleta pequeña con varias mudas de ropa e implementos necesarios para el viaje, la maleta está alado de su puerta, para matar el tiempo se tira en su cama y decide entrar un momento a Thought a ver si había algo para él.

THOUGHT

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