Domingo 20 de febrero, 13:00 PM.
Varios días habían pasado luego de que William fuera llevado al hospital, por mucho que su hermana y su madre fueran a verlo, el se negaba a responder alguna pregunta.
—¿donde está?...¿donde esta William blanc?
En el pasillo había una joven caminando a paso ligero, murmurando la misma frase una y otra vez.
—disculpa, la habitación es la número 142, está al final del pasillo a la derecha.
—gracias, llevo un tiempo buscando.
—¡espera!
—¿mmm?
—¿que relación tienes con él?
—...bueno...podría decirse que soy su novia, aunque estábamos peleados, de repente supe que estaba aquí y vine lo más rápido que pude.
—¿¡w-will tenía una novia!?
—disculpe...¿por que la reacción?, además, ¿lo llamó will?
En medio del pasillo, la joven estaba algo desconcertada, realmente no entendía lo que estaba pasando en ese momento, ¿por que una doctora reaccionaría de esa forma por un paciente?
—b-bueno es que will es mi hermano, hace tiempo que no lo veía y no sabia que salía con alguien.
Valentina se quedó mirandola algo sorprendida, frente a ella, una chica joven de cabello largo con mechones morados, por su apariencia podría decirse que tendría al rededor de 20 años, sus ojos color avellana se verían hermosos si no fuera por las ojeras que se notaban con mucha claridad.
—¿Valentina?, escuché mucho de ti, will de verdad te quiere mucho, solo ha dicho cosas sorprendentes que haz logrado.
—es un poco incómodo, pero gracias, aunque ahora will no quiere hablarme.
—talvez no quiera preocuparte, por favor, déjame intentarlo.
Al pasar unos pocos minutos, la joven obtuvo el permiso e ingreso a la habitación, William desvió la mirada ignorandola totalmente.
—will...aunque no quieras hablar, necesito que al menos me escuches, haz estado muy distante hace tiempo, no se que sucedió luego de tu audición, pero desde entonces siento que ya no eres tú.
William seguía ignorando todo a su alrededor, como si realmente no escuchara absolutamente a nadie, es el mismo comportamiento que tuvo estos 9 días.
—will...se que te esforzaste demasiado, lamento que no hayas pasado la prueba, pero siempre hay una nueva oportunidad para intentarlo de nuevo.
—¡tsk!...¿¡que vas a saber tú!?, ¡lleve mucho tiempo practicando para ese día!
—¿¡...!?
—todo mi esfuerzo, mi emoción y mi futuro como músico...¡todo!...todo se fue a la basura.
Apretando los puños con fuerza, William finalmente dejó salir aquello que estaba guardando para si mismo.
—...hablaste...me alegro mucho, llevo tiempo sin escucharte.
—¿eh?...¡tss!...si viniste solo sólo por eso ya puedes irte.
—esta bien, me iré por ahora, pero recuerda que no estás solo Will, tu madre y tu hermana están muy preocupadas, piensa en como se sienten ellas ahora...yo también estaré siempre contigo, sin importar qué...nos vemos.
Cuando la joven estaba por salir, una voz tranquila la llamó para detenerla.
—...fueron los demás participantes que perdieron la oportunidad.
—¿que quieres decir?
—cuando nos rechazaron, muchos estaban frustrados por el resultado de sus esfuerzos, para no pensar en eso, íbamos a ir a una fiesta...sería algo tranquilo, no se como, no se en que momento, pero todo se volvió un caos, no se si fue uno o si fueron varios, nos dieron esas cosas...yo continué consumiendo, no podía evitarlo, cuando quise dejarlo ya no podía...¿que tan tonto puedo ser?
Poco más de 40 minutos pasaron desde que la chica ingresó a la habitación, hasta el momento nadie había durado tanto sin que lo echaran.
Cuando ella salió, Valentina estaba esperándola a unos metros de la puerta.
—¿como te fue?
—me pidió que no te dijera nada, el mismo se los dirá.
—¿pudiste hablar con él!?...gracias, en verdad te agradezco mucho esto, hasta ahora no hemos podido hacer que diga una palabra...emm...
—perdona, con todo esto nunca dije mi nombre, ¿verdad?...soy ellie lurie.
—gracias por todo,ellie.