Diario de las Pesadillas Vol. 2

La demonio de dos caras

¿Como saber si me encuentro en una pesadilla o si esta se ha vuelto realidad?
Caminar en la lluvia era lo único que me purificaba de aquellos instintos oscuros que amenazaban con hacerme perder el control.
Aquella noche tormentosa me encontré con un hombre que ofreció resguardarme del agua y tontamente acepte su invitación.
Una vez dentro de la casa, al llegar a la sala aquel sujeto se me lanzo y en un ataque de frenesí me manoseaba mientras intentaba arrancarme mis ropas .
En un inútil intento por liberarme lo golpeaba con mis manos y pateaba con toda la fuerza que me era posible.
Mientras él se excitaba con semejante salvajismo, algo muy dentro de mi mente hizo explosión.
Mi cuerpo se tenso y de alguna manera entre tanto movimiento tome un vaso de cristal que yacía en el descansa brazos del sofá principal y lo estrelle con fuerza en su cabeza.
Aturdido por el golpe sus manos me dejaron en libertad para detenerse el sangrado me aleje de él y tome uno de los miles de pedazos de cristal que yacían en todo el tapete de la sala.
Llena de furia de un solo corte hice sangrar su mano.
Mientras el me maldecía e intentaba incorporarse corrí a la cocina destartalada que estaba en la habitación contigua.
¡Ahí estaba la salida¡
-Maldita desgraciada¡. Exclamaba el herido mientras se acercaba tambaleante y furioso hacia la cocina.
¿Que le pasaba a mi cuerpo? ¿porque no se movía hacia la única linea de escape que yacía frente a mi?
De repente la mano sangrante me hizo girar sobre mi propio eje.
-Te enseñare a respetarme¡
Sorprendente mente cuando dijo eso su cara se torno dolorosa e impresionada.
Lentamente sus ojos se posaron hacia abajo. ¡Le había clavado un cuchillo en su estomago¡ ¿pero como fue eso posible? ¿en que momento lo tome?.
Antes de poder responderme esas interrogantes me di cuenta que mi atacante yacía inerte sangrante y con sus viseras dispersadas por el suelo.
Saque el cuchillo de su frente y con temblor en mi cuerpo me dirigí hacia el baño para limpiarme la sangre.
Luego de encender la luz y abrir el grifo del lavabo escuche una carcajada detrás de mi
-Oh mi niña tienes talento natural¡
-¿quien es?¡ Pregunte temerosa con arma en mano
-Que mala eres¡ ¿como puedes preguntarme quien soy...si siempre estoy contigo?
-¿siempre?
Me volví hacia el espejo y todo lo que vi fue a mi...al demonio de las dos caras...



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En el texto hay: suspenso, pesadillas, bizarro

Editado: 30.05.2020

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