Es cierto que todo tiene su límite, que llega el momento donde uno piensa que ha perdido, que se cansa de buscar un resultado que sea de su agrado y empiece a olvidar.
Recordaba las palabras de diana cuando decía que no podría escribir mis propios poemas, que no podía nada solo.
Porque incluso el primer verso que jamás fue escrito, fue con ayuda de Anthony, así con esa meta, empecé a leer una infinidad de libros empecé a crear un mundo imaginario, uno que todo poeta romántico tendría.
Al principio era versos recortados y unidos, pero recuerdo que mi primer poema fueron palabras, palabras que saque de distintos lugares y sobre todo palabras que se relacionaran con ella, así durante unos días, me las pasaba resolviendo un enigma, la mejor manera para que esas palabras fueran versos y obtuvieran un significado.
Me ayudaron algunas personas y antes de planear de dárselo a Jazmín, la profesora reviso mi poema, ella rio y me dijo que estaba bonito para ser mi primer poema.