Ocho:
28 de febrero del 2003
Mi luz está completamente alegre con sus regalos, la he visto sonreír sin parar estos días y eso me alegra mucho, creo que es bueno para que me acepte poco a poco.
Decidí dar otro paso hoy y la seguí a su casa luego de la escuela ahí me di cuenta de que hay más problemas en su casa de los que imaginé… ¡Ay mi amor, me duele mucho verte así!
Pero cuando seamos mayores la ayudaré. Seremos felices juntos.