Diario de un Idiota Enamorado

PÁGINA I: PASADO Y AMOR

Hoy me declaré a la chica que me gusta.

Pese a haber muchas personas en esa casa, nosotros estábamos tan alejados que no podíamos escuchar sus gritos y festejos. Situados a mitad de la calle, bajo un atardecer tan hermoso que parece haber sido pintado por Rembrandt y una fluidez en nuestra conversación que solo puede ser conseguida en un libro.

Ella y yo nos llevamos bien desde que tenemos once años; probablemente nos habremos encontrado antes, pero no podría recordar eso. Supongo que comencé a notarla cuando por fin me enamoré.

No sé ni por qué me llegó a gustar si somos polos opuestos: ella es alegre, brillante, amable, social, tiene muchos amigos, es elocuente… Todo lo que yo no soy y jamás llegaré a ser. Por mi parte, puedo decir que soy demasiado perfeccionista y eso ha hecho que la gente se aparte de mí.

Recuerdo perfectamente nuestra primera conversación; fue algo tan rápido como un “¿me prestas un lápiz?”. Hasta ahora agradezco el hecho de haberle robado un lápiz a mi amigo de al lado.

Luego de eso, nos topamos varias veces en el salón de clases. Como dije, teníamos once años y al parecer éramos buenos amigos. Podíamos hablar como personas normales e intercambiar respuestas en un examen. Está más que claro que a esa edad yo no pensaba en romances ni nada por el estilo; tengo muchas referencias malas acerca de ese tema…

Ahora que hago memoria, creo que todo comenzó con ese proyecto que propuso el área de Tutoría, en el que debíamos formar familias con hijos y todo y calcular gastos estimados de una familia real. Oh, sorpresa, ella y yo éramos los padres.

Quiero creer que no soy solo yo, pero a los once años, casi ni quería relacionarme con las niñas de mi salón porque no confiaba en ellas. Era un poco raro… Para resumir lo que pasó, nos divorciamos a los dos días del proyecto.

Seguimos creciendo y conociéndonos el uno al otro y comenzamos la secundaria. Ambos con catorce años, era el inicio de una trágica y desgraciada historia de amor.

Dicen que cuando no eres el protagonista de una historia, puedes ser el villano, pero yo no lo veo así, porque lo que está por ser revelado en este diario, es la muestra más grande de que puedes ser el personaje principal y el antagonista al mismo tiempo.

Regresando al tiempo actual; hace unos momentos me declaré a la chica que me gusta… Y me dio su respuesta.

¿Me aceptó? ¿Me rechazó? Como sea, no me esperaba esta contestación. Su respuesta fue…

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¿Qué? ¿En serio esperaban que les dijera lo que pasó? Esto es un diario; tenemos que ir en orden para saber cómo mierda terminaron así las cosas. Así que acomódense en su asiento, tomen algo de comer y beber, pongan a sonar su playlist favorita de The Weekend, y traigan un poco de vaselina, porque a partir de este punto, todo será un intenso dolor de culo.

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Primera Entrada: martes 20 de junio de 2017

Creo que el año escolar acaba este viernes. Bueno, tenemos exámenes finales y todo habrá terminado. Hoy, como otros días, no pasó nada relevante. Mis amigos siguen obsesionados con un juego de celular al cual yo no puedo acceder porque mi celular es de la era de los dinosaurios; las clases están igual de fáciles ya que los maestros ni se molestan en enseñar; solo dan un poco de temas para prepararnos para el examen y nos dejan hacer lo que queramos.

Estamos haciendo planes con mi grupo de amigos para ir a casa de Nico el último día de clases. También hablamos sobre ir al cine y pasar el rato por el centro comercial. Hacemos esto muy seguido, por lo que casi estaba confirmado. A mi me gustan este tipo de cosas; pasar tiempo con mis amigos y que nada ni nadie nos moleste, pero ellos tienen una idea diferente para el plan del fin de semana: quieren invitar a varias chicas también.

No tengo nada en contra de eso, pero el problema comienza con mi poca capacidad de relacionarme con las chicas. Pienso que solo sería incómodo que alguna de ellas hablara conmigo y yo me pongo modo idiota como cuando estoy con mi grupo. No quiero ni pensar en la vergüenza que pasaría.

A todo esto de chicas, Miranda estuvo más melosa hoy que de costumbre. Sé que es cariñosa y que reparte abrazos como bonos en festivales de caridad, pero la noté muy rara. Continuaba pidiendo que la abrazara y no quería dejarme ir a comprar algo en la tienda. Soy de los que no se molestan por esas cosas pero… Me incomodaba bastante.

¡Hablando del rey de Roma! Miranda acaba de mandarme un mensaje. Nos escribimos con frecuencia, pero no es nada importante. Pensé que querría ayuda para estudiar o que le prestara un examen en el que haya sacado mejor nota que ella, así que de inmediato busqué mi maleta y puse cerca de mí cualquier documento indispensable.

La gran sorpresa que me llevé cuando me comienza a preguntar quién me gusta. Escribió, y cito: “¿qué tal de amores?”. Y ahora yo tengo una pregunta: ¿cómo se responde a eso?

Acabé por decirle que no hay nadie porque nadie es de mi tipo y cosas así, lo normal para un chico. Esperaba que dejase el tema y terminara la conversación, pero siguió insistiendo en cuál era mi tipo y comparándose a sí misma con cada cosa que yo decía.

No daré detalles porque me parece muy vergonzoso, pero diré que trató de encajar en cada punto que le comenté. ¿Qué se trae tan de repente?



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En el texto hay: romance

Editado: 22.01.2022

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