Diario de una lesbiana adolescente [sin Corregir] ©

Capítulo 10 "Sorpresa"

Un día me quede sentada en el portal de mi edificio, y una chica, que tenia un poco pinta de “poligonera”, por lo general los “poligoneros” o “fiesteros de discotecas del poligono” tiene algo de fama de intolerantes con ciertas cosas. Me pregunto si me pasaba algo, yo le  conteste “que no”, no muy bordemente, tampoco era plan.  Ella se sentó a mi lado y me empezó a decir “venga, dímelo, sé, que no nos conocemos mucho pero vivimos en el mismo edificio y te veo continuamente”.

Esa frase me dio un poco de miedo, ¿me espiaba? , no creo, yo la conteste, tras una larga bocanada de aire, que estaba sola, que mi novia me había dejado y mis amigos pasaban de mi. La verdad, casi ni pensé en como lo decía y tras terminar la frase me quede pensando en que había dicho “novia” .

“No te preocupes, esas cosas pasan” dijo como muy comprensiva.

“Ya, es fácil decirlo cuando al menos tienes amigos, pero yo…”

“Mira hacemos una cosa, te vienes conmigo a tomar algo y me lo cuentas todo”

Y aunque parezca mentira accedí, la verdad es que jamás pensé que una poligonera de mi barrio, y de mi propio edificio fuese tan maja, la verdad es que me lo pase muy bien con ella, si no hubiera aparecido, no sé qué hubiera hecho.

Me habría quedado sola, en el portal llorando, o quien sabe, no se me da muy bien hacer amigos, quizás si me meto en algún foro de internet de algún hobbie que me guste, o me apunto a clases gratuitas en el centro cívico de mi comunidad,  como he dicho, no se me da bien hacer amigos, y no es la primera vez que me veo sola, no porque sea mala persona, generalmente como tiendo a ser demasiado sincera, algunos lo denominan borde suelo no tener grandes amistades, y muchas veces son amigos con los que vas perdiendo el contacto, o amigos de tu pareja.

La chica fue majísima y fuimos quedando, resulta que no era tan intolerante como le afamaba su vestuario, además vivía en mi mismo piso por lo que era fácil quedar con ella.

La verdad es que mi relación con mi “ex” son de esas relaciones que prefieres olvidar y que mueran en el pasado mientras tu intentas seguir con tu vida lo más dignamente que puedas.

Antes de despedirme os voy a recomendar varias cosas, si has roto con tu pareja no te desesperes y sigue con tu vida, no vuelvas nunca con una ex pareja, porque tu cerebro tiende a dejar las cosas buenas y luego cuando estés con él o ella tu cerebro irá recordando lo malo, y nunca será lo mismo, nunca te quedes solo, busca hobbies, sitios para salir y conocer gente.

Son cosas que se van aprendiendo a lo largo de la vida y que muchas veces se nos olvidan.

La vida da muchas vueltas, y nunca podremos saber cual sera el amor de nuestra vida, aunque el primero parece el más importante es solo el comienzo, y deprimirnos por ello no merece la pena, hay cosas más importantes en las que pensar.  Como mi gran duda de salir o no del armario, que lo concluiría así;

Yo, seré yo misma, no me preocupare de prejuicios ni estupideces de nadie, me preocupare de mi misma, de ser feliz, de divertirme, dejaré de preocuparme por si salgo o no del armario,  no a todo el mundo tiene por qué interesarle mi orientación sexual, y no tengo porque preocuparme de que pensaran si se enteran, ya que yo, soy solo yo, e independientemente de lo que me guste o me deje de gustar, soy una persona, con sus sentimientos, opciones y opiniones, a la que le gusta ser así.

FIN

 



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En el texto hay: reflexion, adolescente, lesbiana

Editado: 31.10.2019

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