"Si quieres dejar de sufrir aprende a ser feliz"
-Adlihj-
De cierta forma me sienta más libre, mi respiración parecía normal después de tanto tiempo, no me sentía bien del todo, pero si más libre tal vez solo necesitaba decir lo que me agobiaba a alguien, ya que era una carga demasiado pesada para mí
-Nadia- es Leo- ¿estas despierta? - ahora mismo lo menos que quiero es hablar con él, lo que me ha hecho no tiene nombre y no quiero escuchar sus escusas, ya estoy harta de eso- bueno mañana hablaremos- al no recibir respuesta se va
Estoy en mi cama, Sol me dejo recostada con la fiel promesa que me ayudará. La habitación tiene olor a flores, por los perfumes que rompí es una fragancia agradable dado que me encantan las flores.
-Buenos días- siento el peso sobre las cobijas- necesito hablar contigo- él está sobre mí, siento que las lágrimas me van a ganar, estoy muy dolida- puedes sentarte- me intenta quitar las cobijas, pero no lo dejo hacerlo
-Está bien, no quiero explicaciones no me las debes- mis palabras suenan como a reproche.
-Te las quiero dar- me quita las sabanas yo me tapo la cara y me hago bolita, en realidad no me siento bien, no lo quiero cerca- vamos levántate- me abraza y me levanta, sin mayor esfuerzo me dejo levantar
-En serio, no tienes por qué explicar nada- el cabello me cubre la cara, sé que mis ojos estarán hinchados y mi cara demacrada
-Debo, tal vez no te importe, pero lo que paso halla no fue mi intención- acerca su mano para quitarme el cabello de la cara yo me alejo- Devora, es una amiga que malinterpreto las cosas y por eso me beso
-Y por eso le correspondiste y no hiciste nada- la sangre me hierve y me siento herida
-No sabía cómo reaccionar, fue mi primer beso y me tomó de sorpresa, aparte que no le correspondí el beso- mueve sus dedos nervioso.
-Tu primer beso- repito- bueno eso es- me tranquiliza es lo que quiero decir, pero me lo quedó para mí, entiendo su reacción, juego con las líneas del colchón mientras ambos permanecemos callados- yo no sabía, pero como te dije no pasa nada- trago saliva- bueno lo siento tal vez te asustaste, yo solo estaba de camino acá no quería interrumpir
-Nadia, yo en la mañana debí aclarar que estamos juntos, aunque tú no sientas nada por mí, no significa que no deba decir que somos pareja para que este tipo de cosas no pasen- no sé exactamente cuál es su expresión, pero debe sentirse decepcionado de mí.
No comparto su idea ya que si él no me ama no tiene por qué aclarar que somos pareja, si el ama a alguien más yo debo entender y si yo amo a alguien también debo entender ese hecho, ninguno de los dos estuvo de acuerdo con casarnos y sentimientos de alguno de los dos jamás estuvieron de por medio así que no tenemos que dar ese tipo de explicaciones a terceros porque no las merecen.
-Leo- me acerco a el- yo no debo mentirte- tomó sus manos- solo te quería alejado de mi por miedo- su rostro esta triste, levanta una de sus manos y retira el cabello que tengo en mi cara
- ¿Por qué?...
- No quería conocer a nuevas personas, solo quería ser yo, una vez me enamore y cuando decidí quedarme sola lo aleje con una mentira y años más tarde me di cuenta que no valía nada, solo pensé en ti como algo que necesitaba por un momento y que luego lo dejaría ir eres como la pequeña esperanza que encontré para mí, pero, sin darme cuenta deje que esa necesidad se convirtiera en algo más y ahora me siento presa por eso, simplemente no quiero aceptarlo, pero, tampoco quiero perderte- a pesar de las ganas que tengo de llorar no lo hago, suficientes lagrimas he derramado y no lo quiero hacer más, sé que no sabe que decir esta confuso al igual que yo y no entiende exactamente mis palabras.
- ¿Por eso lloraste?
-Sí, es patético, pero sentí que me traicionaste, y más cuando en la mañana mencionaste que solo éramos prometidos, - la luz es tan baja en la habitación que casi no nos podemos ver bien, aún ni siquiera el sol a salido y él está aquí conmigo- es estúpido, pero sentí tantos celos y tanta traición que era inevitable no ponerme así.
Ambos dejamos de hablar, fue un momento para reflexionar lo que acababa de pasar, no podía no decirle esto, si quiero ayuda debo aprender a aceptarla, si quiero amor debo aprender a aceptarlo también.
No sé cuánto tiempo pasa, pero la luz del sol ya entra por la ventana aún es muy baja pero suficiente para iluminar la oscura habitación
-Esto es algo incómodo- lo digo como para que la conversación vuelva a fluir
-Lo siento, pero me has tomado por sorpresa, soy nuevo en esto y no sé qué hacer después…- está algo sonrojado- y tampoco entiendo bien que quieres decir- agacha la cabeza
-Si te pido algo ¿lo harías por mí? - levanta su mirada y asiente- me das un abrazo- me mira sorprendido, pero sin pensarlo tanto me abraza.
Siento esa calidez que desconocía de él, el perfume que lo caracteriza y la protección que deseaba tanto, levanto mis manos y lo abrazo igual, pegó mi cabeza a su hombro el hace lo mismo, y aun siento como su cuerpo tiembla así que lo abrazo con más fuerza; en realidad necesitaba esto hace tiempo, necesitaba que alguien me abrace y me haga sentir bien; permanecemos mucho más tiempo abrazados de lo que imagine.
-Señorita buenos días- Sol entra sin tocar la puerta y se queda parada en la puerta sorprendida, Leo se asusta y se separa de mí, su cara es todo un tomate, Sol no sabe qué hacer y piensa muy bien antes de decir algo- lo...lo siento- tartamudea
-Hola Sol- sonrió- pasa- me levanto de la cama y habré la cortina el sol está más brillante e ilumina perfecto la habitación
-Le preparare su baño su ropa ya está lista, deja la ropa colgada en mi armario y se va al baño, luego de la misma forma sale del baño y se va, Leo está en la cama tapado con las sabanas