¿Y cómo te puedo decir adiós? Si te has metido hasta el fondo de mi alma. ¿Cómo me puedo despedir de ti? Si nunca estuve preparada para tu primer saludo. ¿Cuánto más me faltará para dejarte de extrañas? No creo que me basten doce vidas. ¿Cómo te puedo dejar ir? Si en seis años todavía sigues aquí.
Dieciocho “adiós” no son suficientes para separarme de ti.