Prologo

Tal vez, mi mundo no sea visto por algún otro ser humano que no sea hada o silfo, nosotros estamos ocultos de ellos, creando la magia que muchos conocen como las estaciones del año. Muchas hadas nacimos con un propósito en este mundo, y el de nosotros es ayudar a que la primavera florezca, que el verano de muchas tardes de diversión, que el otoño pueda maravillar con sus colores anaranjados los bosques y el invierno dar unas maravillosas noches familiares.

Ojala pudiera contemplar alguna vez la nieve caer en mi ventana o crear montañas de hojas caídas en los árboles, pero me era prohibido contemplar más allá de mis limites, primavera y verano eran mis únicos "paraísos" que pudiese contemplar, aqui en mi mundo, hay una pequeña isla para cada estación con cada reino en ella y un muro mágico que dividía cada una con un hechizo de protección ante enemigos, a enemigos me refiero que no pudiese cruzar alguien de una estación que no pertenezca a su dúo de alianza (Primavera-Verano, Otoño-Invierno), aun así, aun se seguía con los comercios de bienes y hiervas curativas

Pero antes de todo esto, existía una armonía entre todos las estaciones, para comenzar las cuatro islas estaban juntas y se dividían con fronteras que daban el comienzo al territorio y en el centro se encontraba el castillo de los reyes que gobernaban y mantenían la paz total, pero ellos no se encontraban solos, también eran acompañados de líderes que guiaban a las hadas y silfos al mundo humano a formar la estación, y de nuestras diosas de los elementos (Tierra, Aire, Fuego y Agua), quienes fueron las responsables de crear nuestro mundo oculto y de nuestra existencia, todo sería paz y hermandad hasta que un día todo lo arruino

Un príncipe heredero había nacido con odio y prepotencia, creyéndose superior a sus padres, queriéndolo todo lo que le gustara, incluso a la chica que había elegido su esposa, una campesina del lado del invierno quien se había enamorado por su belleza física, pero esta se negaba profundamente, el príncipe pensaba que el pensamiento se le iría con el paso del tiempo, pero no fue así, cansado la declaro como una mujer terca y desobediente que se atrevía a enfrentar al supuesto "rey", esto formo un enojo grande a las estaciones primavera y verano que le eran fieles sirvientes y sin piedad alguna entregaron a la chica al rey y la encerraron en los aposentos del príncipe condenándola a vivir bajo las ordenes de él, pero apenas iba ser la primera noche y los líderes del otoño y el invierno ayudaron a la chica a escapar de aquel lugar, el príncipe no se quedó con los manos cruzados y mando a atacar a las otras estaciones, se hizo una guerra durante días y noches hasta que se declaró un empate y la diosa de la tierra y el agua dividieron al pequeño reino en islas diferentes y coronaron a los líderes como los nuevos reyes, el príncipe había muerto.

Hasta la fecha, ninguno de los reyes enemigos se ha mostrado en hablar con el otro, las estaciones frías tenían miedo a hacerle algún daño a su reino y los de las cálidas a perder su trono, y, ¿Cómo pasaría eso?, sencillo, desde aquella separación las diosas de los elementos han dicho tener una visión, dos hadas hibridas, hijas de un padre de estación fría y de una madre de la estación cálida, darían el fin de las guerras, dando justicia a los buenos y castigo a los malos.

Por esas razones, los híbridos que eran fruto de un amor prohibido eran condenados a morir, y aunque el otoño y el invierno trataban de impedir eso, le eran imposible, pero ellos no perderán la esperanza de ver a las niñas crecer, ni a mí.