Me fui de casa de Aiden unas horas después. Él había hecho palomitas de maíz y nos habíamos sentado en el sofá viendo películas y bebiendo Coronas, sin más nada interesante que hacer, cómodos con la compañía del otro.
Nancy y Bodric estaban sentados en la mesa de la cocina, bebiendo vino y conversando muy íntimamente. Era algo obvio que estaba interrumpiendo su momento a solas pero no esperaba que estuvieran ahí.
― No sabía que estaban aquí ― dije en modo de disculpa, entrando a la casa.
Nancy sonrió hacia mí, en sus ojos había un deje de cansancio. ― Llegamos hace unos minutos. ¿Estabas con Aiden?
Asentí caminando hacia la mesa para sentarme
― Bien, me reconforta saber que al menos tienes a alguien con quien pasar el tiempo. Disculpa por haber estado algo ausente estos últimos días.
― No tienes por qué disculparte. ¿Cómo va el libro?
― Mañana es la fiesta de lanzamiento ― dijo Bodric viéndose aliviado ― y estaremos libres para ti otra vez.
― Oh por mí no se preocupen. Yo estoy bien
Nancy entrecerró los ojos examinándome ― Aiden te tiene muy bien cuidada
Bodric sacudió la cabeza sonriendo como si supiera algo que yo no.
Me encogí de hombros
― Él es un muy buen amigo. ―no sé por qué sentí la necesidad de hacer énfasis en amigo― Estoy cansada, voy a dormir. Nos vemos después. ―me levante dándole un abrazo de buenas noches a los dos― y suerte mañana en el lanzamiento del libro
Me fui a mi cuarto dejándolos solos para que siguieran en su momento de intimidad. Seguro Bodric se quedaba a dormir esta noche acá, a veces lo hacía aunque no tan frecuentemente como estoy segura que a ellos les gustaría por respeto a mí. En realidad no me importaba que pasara la noche acá siempre y cuando no llegaran extraños ruidos a mi habitación, eso sería bastante incómodo. Por lo general, Nancy era la que se quedaba al menos una vez a la semana en el apartamento de Bodric.
Me puse el pijama acostándome en la cama, sin nada de sueño y agarré mi celular para escribirle a Melissa, no había hablado con ella en todo el día y esperaba que estuviera despierta.
Estúpida diferencia horaria
Yo: ¿Despierta?
Melissa Velásquez: que milagro, te acordaste de que tu MEJOR amiga seguía viva.
Yo: ¿por qué dices eso? Si eres boba.
Melissa Velásquez: ¿yo soy la boba? Si no fuera por mí que te escribo todo el tiempo, tú ni enterada de mi existencia
Yo: eso es mentira, siempre te escribo
Melissa Velásquez: no, YO siempre te escribo y tú respondes
Yo: ¿cuál es la diferencia?
Melissa Velásquez: ... solo que me preguntes eso me duele
Yo: jajajaja exagerada
Melissa Velásquez: no soy exagerada, claro como no tengo pene, ni ojos verdes, ni soy pelirroja o mido más de 1.90 ya no existo
Yo: ¿estás hablando de Aiden?
Melissa Velásquez: ¿acaso hay otro pelirrojo, alto, ojos verdes, sexy, por el que me hayas cambiado?
Yo: tengo que decirle a Aiden que crees que es sexy
Melissa Velásquez: ¿Aiden sabe de mí?
Yo: obviamente, eres mi mejor amiga. Y no tienes por qué estar celosa de él
Melissa Velásquez: bueno, no tengo ningún problema en compartirte con él siempre y cuando sepa quién es la más importante en esta relación. Y si estoy celosa de él y celosa de ti también. Los odio a los dos
Yo: ¿celosa de mí?
Melissa Velásquez: ¡Sí! Por tener a alguien como Aiden respirando encima de ti y cumpliendo cada capricho tuyo mientras yo estoy aquí, sola y abandonada. Te odio
Yo: Aiden no está respirando encima de mí, se ha convertido en mi mejor amigo
Melissa Velásquez: YO soy tu mejor amiga y no ando comprándote helados y haciéndote merengadas cada que se te antoje
Yo: bueno, deberías hacerlo. Aiden está ganando más puntos que tú
Melissa Velásquez: no, tú deberías hacerlo. Estas perdiendo bastantes puntos conmigo
Yo: lo siento, te prometo que cuando regrese pasare una semana entera en tu casa
Melissa Velásquez: no te quiero en mi casa, estoy feliz por este respiro de ti. Lo necesitaba, Aiden puede quedarse contigo
Yo: sé que me extrañas. Yo también te extraño
Melissa Velásquez: las reuniones con el grupo no son lo mismo sin ti. Me haces falta