Dinastia Uni-Tomo 2

38-El Sitio p.2

-Mantenga su distancia, general-Koguchi salió y cerró la puerta tras él.

-¿Qué sucede con Kouro?, ¿enfermo de nuevo?

-Me parece que usted sabe la respuesta a eso.

-¿Me estas acusando de algo?

-Solo dos personas sabíamos lo que la retirada de Sheng le haría a mi maestro, usted y yo, ¿Qué sugiere eso?

-Que Lady Sheng es mucho más lista de lo que pensamos-de repente Koguchi tomo su espada y le apunto al cuello.

-Ahora escúcheme bien-dijo-tres cosas definen mi existencia, la segunda más importante es velar por la seguridad de mi maestro y me enfrentare a cualquiera que ponga su vida en riesgo.

-Ojala supieras lo que estás diciendo-le dio la espalda y se alejo.

-¡Queda advertido, general!, ¡No dejare que se le acerque!... ¡Y más le vale hacer algo para que esta guerra progrese o también le quitare el cargo, tengo ese poder!

 

Hakai se detuvo en seco dos segundos antes de marcharse, Koguchi no bromeaba, como aprendiz de Kouro su rango era de hecho mayor al suyo y con su ceguera a la realidad era capaz de hacer cualquier cosa, si lo despojaba de su rol en la ciudadela luego podía hasta encerrarlo, entonces ya no podría enviar informes a Sheng y mucho menos ser capaz de obtener la llave para liberar a Rina.

 

Tras reflexionar por horas llego a una conclusión terminante y esa noche escribió una carta, la ultima, la arrojo por una ventana trasera y regreso a su cuarto donde aun tenia tarea por hacer; destruir todas las notas que hasta entonces hubiera recibido…por si acaso.

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Lady Sheng recibió la carta y la leyó dos veces, una en voz alta para los presentes y otra en voz baja para sí, solo en caso de que algún detalle se le escapara.

 

-¿No vamos a hacerle caso o sí?-pregunto Aochi-¡Nos está pidiendo que lo abandonemos!

-Nos pide que confiemos y le demos la oportunidad de salvar a la mujer que ama.

-Si fuera solo eso…pero quiere cortar la comunicación, ¿Cómo planear nuestros movimientos si saber que pasa allá dentro?

-Con astucia-dijo ella-has sido muy valiente, hijo, pero la presión ahora viene de otro lado, no esperaba que ese chico resultara un inconveniente tan grande.

-Koguchi, vaya idiota.

-¡Oye!-exclamaron Kiori y Okata a la vez-¡Mi hermano no sabe lo que está haciendo!

-Pues ya va siendo hora de que alguien se lo diga.

-Es inútil-dijo Tara, hablando por primera vez-trate con convertidos la vida entera, no se puede razonar con ellos.

-¿Y entonces qué hacemos?-curiosamente su prima tenia la virtud de calmarlo.

-Prepararnos-dijo Sheng-según Hakai está obligado a lanzar un ataque, su meta es obligarnos a avanzar y tomar prisioneros cuya magia reponga la de Kouro-se levanto y fue hacia la salida-debemos proteger nuestra posición a toda costa y darle el tiempo suficiente para que pueda actuar desde adentro.

 

Salió de la tienda seguida por todos y dio una mirada a su alrededor, al campamento que comandaba y a la animosa muralla cuyas terrezuelas se alcanzaban a ver más allá.

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Allí comenzó la verdadera guerra, durante cinco semanas el ejercito Uni realizo decenas de pequeñas incursiones a la zona enemiga pero estos, en lugar de defenderse y avanzar, se mantenían en su sitio, incluso retrocedían, y los beneficios de tan inusual plan de batalla se hacían patentes al ver que los Uni tenían cada vez menos fuerza y convicción; las pocas capturas que hicieron no resultaban suficientes y llegados a un punto fue la propia Sheng quien ordeno comenzar a retener a los Uni, rediciendo así las ya exiguas reservas de magia de Kouro.

 

Koguchi sobrellevaba la situación con una sensación creciente de desamparo, improviso una silla de ruedas para poder tener siempre cerca a su maestro pero no podía hacer mucho más por él, día a día lo veía más encorvado y ausente, y se daba cuenta de que el imperio luchaba una batalla perdida, y no por falta de medios o porque el enemigo fuera superior sino porque su líder, quien debía ser guía e inspiración, hacia ya rato que se había dado por vencido.

 

-¿Puedo hacerle una pregunta, maestro?-le pregunto un día que le pareció estaba más despierto-¿Quién era yo?, me refiero a antes…cuando aún era humano.



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En el texto hay: demonios, japon, magia

Editado: 11.08.2018

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