Enrique al escuchar las palabras de Silvio, saco fortaleza y valentía para subirse de nuevo aún avión.
Silvio le termina diciendo:
— Cuando estés dentro del avión cierra tus ojos, tranquilízate y cuando veas ya estás en Medellín.
Enrique se despide de Silvio y se sube al avión de la empresa de Avianca, luego de tres minutos de haberse sentado y acomodado, Enrique siente que el avión comienza a moverse en la pista y enseguida. Enrique cierra sus ojos para concentrarse y perder el miedo.
El avión despega de Belo Horizonte. Y Enrique comienza a orar y a decirle a Dios que le de tranquilidad para poder llegar a su destino.
Después de varias horas, el avión aterriza en Medellín. Y Enrique ni siquiera sintió la llegada a su país. Por fin Enrique baja del avión, y dice:
— Gracias señor, por esta nueva oportunidad que me has dado.
De inmediato, Enrique con el poco dinero que le quedaba de lo que le dio Silvio, toma un taxi. Y le dice al taxista que lo lleve a textiles Johan.
Enrique recorre su ciudad, y dice:
— Es una bendición volver a esta bella y hermosa ciudad, no cree eso señor taxista.
Edwar el taxista, le dice:
— Si usted lo dice señor, yo estoy acostumbrado de ver de cinco de la mañana a doce de la noche lo mismo todos los días y me parece normal.
Enrique le dice:
— Pero no todos los días vuelves a nacer, y tener otra vez la oportunidad de disfrutar de la vida que te ha dado Dios.
Edwar le dice:
— Tiene toda la razón señor... al decirme eso, ¿a usted tuvo que pasarle algo fuerte o me estoy equivocando?
— Sí, claro que sí, y todo lo que te puedo decir, es que hace siete días era un hombre diferente a lo que soy ahora, después de pasar lo más fuerte e impresionante de toda mi vida.
Edwar le dice:
— ¿Pero dígame que le sucedió?
— Sobreviví a la caída de un avión, y caí en el Océano Atlántico, solo vía agua y cielo... ¡espera! ¿Te estás pasando de lugar?
Edwar le dice:
— Señor, disculpe no pare el taxi esperando que me diera una indicación.
Enrique le dice:
— Cr 45-s23 ¿Textiles Johan?
Edwar confundido le dice:
— ¿O se pegó muy duro en la cabeza o esta alcoholizado, porque esta empresa se llama textiles Mójame?
Enfurecido, Enrique le paga la carrera a Edwar. Y se dirige con mucha ira hacia su empresa.
En ese momento, Enrique trata de entrar a su empresa. Cuando es detenido por Emiro y Calvo, sus antiguos vigilantes de la empresa.
En ese instante, Calvo y Emiro quedaron estupefactos al mirar el rostro de Enrique de nuevo, tanto se impresionaron que creían ver un fantasma.
Enrique les dice:
— No sean tontos. Soy yo, su jefe, déjenme pasar.
De inmediato, Emiro le dice:
— Señor, ¿pero como es que esta aquí? Si su familia les dijo a todo los trabajadores y periodistas. Que usted había muerto en ese avión.
Enrique muy enojado le responde:
— Emiro, te diré de nuevo, déjame pasar y otra cosa. ¿Quién cambio el letrero de la empresa?
En ese instante, Calvo interviene, diciendo:
— Aquí se dijo que usted había vendido su empresa a un señor llamado Mójame, y ese señor hizo un recorte de personal. Y trajo su propia gente para trabajar aquí, y por último hizo bajar el letrero Textiles Johan y lo quemo por completo...