Dios Es Amor

EL BIENESTAR DE DOS FAMILIAS

 En la mañana siguiente. Enrique y su padre se preparan para llevar a Laura al centro de rehabilitación.

En ese momento, Julia llega a la casa y les ayuda con Laura. Cuando les dice:

— No hubo la necesidad todavía. De molestar con dinero a los demás integrantes de la familia. Yo tengo lo del primer mes de ella.

De inmediato, Enrique y Armando quedaron estupefactos al escuchar esas palabras, no podían creer que una mujer tan tacaña como Julia iba hacer eso.

Enrique le dice a Julia:

— Gracias tía, estas demostrando con esto que de verdad estas comprometida con la recuperación de Laura.

— Bueno sobrino, no más charla y arregla a Johan para irnos ya.

— Bueno sobrino, no más charla y arregla a Johan para irnos ya

 

Después de tres horas, Laura fue ingresada al centro de rehabilitación sin que ella chisteara ni una palabra. 

En la salida de ese lugar, Enrique se queda un poco preocupado por el nuevo comportamiento de Laura.

En ese instante, todos se encuentran en el paradero. Cuando Armando le dice a Enrique:

— ¿Ahora qué vas hacer hijo?, puedes vivir nuevamente en mi casa.

Enrique le pone la mano en el hombro derecho de su padre, y le dice:

— Gracias papá, pero Johan y yo nos vamos para Cali. En esa ciudad me he reencontrado a mí mismo y para mi suerte, he encontrado una mujer maravillosa que cambio definitivamente todo de mí, algún día te la presentaré.

Julia le dice a Enrique:

— ¿Ya tienes una nueva familia sobrino?, ¿cómo se llama la mujer que te tiene así de enamorado?

— Se llama Milenna. Y vive en Cali junto a su hija y su madre.

En ese momento, sin que Enrique le digiera nada, Julia saca ochenta mil pesos y se los da, para que se reencuentre con su nueva familia.

Enrique abismado le dice:

— Pero tía, no te gastes tu dinero. Yo tengo algo para viajar con mi hijo.

— Ese algo que dices, no puede alcanzar para nada si se presenta algún percance en el camino.

Enrique termina aceptando el dinero de su tía. Y de inmediato se despide de su padre y de ella también.

Enrique toma un taxi y se dirige al terminal de Medellín, en el camino Johan se duerme en los brazos de su padre.

Después de dos horas de viaje, Enrique vuelve a despertar a su hijo para mostrarle los bonitos paisajes y árboles que hay en los alrededores del viaje hacia Cali

Después de dos horas de viaje, Enrique vuelve a despertar a su hijo para mostrarle los bonitos paisajes y árboles que hay en los alrededores del viaje hacia Cali.

En ese momento, Johan le dice a su papá:

— Es muy bonito, ¿para dónde vamos?

— Vamos a un lugar que se llama Cali.

— ¿Y mi mamá porque no viene con nosotros?

— Bueno... tu mamá se quedó recuperándose. Porque esta enfermita, pero te prometo que cuando estemos nuevamente en Medellín, vamos a pasear con ella.

Johan le dice:

— ¿A dónde vamos también hay parques de diversiones?

— Claro que si, además vas a conocer a Melissa.

En ese instante, Johan mira muchas vacas y comienza a decirle a Enrique:

— Quiero bajar a mirarlas...
 

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.