¿diosa o Adolescente? [2.1]

Capítulo 32| Verdades

C O L Í N🐍🐍🐍

C O L Í N
🐍🐍🐍


Estábamos uno frente al otro. Luego de nuestro beso no habíamos hablado ni nos habíamos visto hasta ahora. Mar tenia una mano vendada y cargaba su mochila con su otro brazo. Detrás suyo casi que empujándola hacia mi salió Sam con el pómulo hinchado.

– Gracias primo por llevarme mi paquete – sin darnos tiempo a nada Sam salió corriendo dejándonos solos. Note la incomodidad de Mar y por la manera en que se alejo de mi supe que estaba pensando en la ultima vez que nos vimos.

– Debemos hablar sobre…

– No hace falta que lo menciones – me interrumpió levantando su mano sana – Vamos a las gradas de la cancha allí las paredes no tienen oídos y un celular para capturar fotos – entendía sus palabras, dentro del liceo había comenzado a circular una pagina anónima de chismes. Cualquiera podía mandar una foto con un mensaje de lo que escucho y el administrador de la pagina se hacia cargo de publicar el chisme sin incriminar a la persona que lo inicio.

Fuimos en silencio hasta la cancha que estaba vacía, todos estaban en sus clases y podíamos charlar tranquilos. El problema surgió cuando no supe como iniciar la conversación. No tenia planeado hablar con Mar hoy pero cuando llegue lo primero que escuche por los pasillos es que Mar tuvo una pelea con una chica. Ignorándolo todo fui directo a la dirección esperando a que la rubia saliera y estuviera bien.

– Entonces… ¿quieres hablar de…? – mire a la rubia que jugaba con las correas de su mochila sin querer mirarme a los ojos.

– Lo que paso en el callejón me hizo pensar mucho acerca de mi relación con Calíope. Yo estoy confundido Mar y… termine con Calí porque creo que siento cosas por ti. – desvíe mi mirada a un punto lejos de la cancha, no queria su rechazo directamente.

– ¿Ter… Terminaste con Calí? – sentí sus penetrantes ojos viéndome – Esto no tenía que ser así – me gire a verla por las palabras que había utilizado. ¿A que se refiere con eso? – Colín tengo que decirte la verdad y estoy segura que te enfadaras conmigo pero no era mi intensión lastimar a nadie. Andrew no es amigo de mi tío Tadeus ni tampoco es una persona real, él es Anteros. – como si tuviera un resorte debajo de mi asiento me levante despedido de la bancas. Todo lo de Andrew fue una sucia estrategia para que yo me ponga celoso.

– ¿Por qué montar todo ese teatro Mar? – mire a la rubia que se veía estaba a punto de llorar pero no me importo. Por ella…, por Mar fue que yo deje a Calí.

– No es ningún teatro Colín. Es que yo al verte con Calí tan juntos y saber que eran pareja despertó algo en mi que yo pensé había muerto. Col llevo enamorada de ti desde que tenemos cinco años y me dolió verte con Calí. Anteros me vino a ayudar a “vengarme” por que mi amor no fue correspondido – hablo haciendo comillas con sus dedos y se puso de pie acercándose a mi. – Lo siento. De veras lo siento. Yo solo estaba dolida y pensé que estaba haciendo lo correcto pero me equivoque – Mar intento alejarse pero yo la tome de su mano sana.

De un tirón la pegue a mi cuerpo y la abrace. Ella de manera algo lenta me fue rodeando con sus brazos y aflojo la tensión que había en su cuerpo. Mi corazón estaba acelerado y me daba algo de vergüenza porque Mar tenia la cabeza apoyada en ni pecho, justo en mi corazón.

– Te cuento un secreto – ella no dijo nada pero asintió con su cabeza – Yo también siento cosas por ti desde que éramos niños – la opresión en mi pecho desapareció y me sentí bien. Por primera vez en años siento que voy a estar bien.

– Colín es mejor que no apresuremos esto – ella se alejo de mi apoyando su mano sana sobre mi pecho y la otra solo la acerco. – Es mejor que primero arregles tu confusión emocional y si de verdad sientes lo mismo que yo podemos intentarlo – sus ojos azules se elevaron viéndome con una tranquilidad que me hizo sentir bien.

– Te are caso pero te pido a cambio que dejes de evitarme como si trajera la peste – liberándola de mis brazos la escucho reír, sus ojos se achican y la comisura de sus labios forman arruguitas y hoyuelos se alojan en sus mejillas. Fue en ese instante en que me di cuenta de cuanto extraña escuchar su risa.

– De acuerdo y por favor deja de asustarme con tus apariciones sorpresivas, ya bastantes mini infartos me ocasiona Melione como para que tu quieras hacerle competencia – con su mano sana la apoyo en su cadera enfatizando su enojo que la hacia verse tierna.

– ¿QUE HACEN? DEBERIAN ESTAR EN SUS CLASES ADOLESCENTES DEL DEMONIO – el grito del viejo conserje del liceo nos saco de nuestra conversación. Tomamos nuestras cosas para irnos huyendo porque si nos pilla ese hombre estaremos en detención por dos semanas.

Huimos del hombre entrando al liceo y corriendo por los pasillos tratando de no hacer mucho ruido pero es imposible que no se nos escapen algunas risas. Cuando nos encontramos sin salida le extiendo mi mano a Mar y ella la acepta sin dudar. Nos voy guiando al lugar que descubrí el año pasado y donde sabia que el conserje no nos encontraría. Por una salida de emergencia terminamos en el área donde vienen los profesores a fumar y a charlar durante la hora del almuerzo.

Nos sentamos en un banco de madera a esperar que el siguiente timbre suene habíamos perdido las dos primeras horas de clase. A mi me traían sin cuidado mis dos primeras horas eran de francés y Zeus sabe cuando odio a la materia y a la profesora que da las clases.

– Fue divertido – murmuro la rubia entre risas – ¿Por qué nos alejamos tanto? – cuestiona ella viéndome con una sonrisa y curiosidad en su mirada.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.