꧁dipsomanía꧂

Capítulo 34

𝓒𝓪𝓹í𝓽𝓾𝓵𝓸 34

ℋ𝑒𝒹𝑜𝓇 𝒶 𝑒𝓈𝓅𝑒𝓇𝒶𝓃𝓏𝒶𝓈 𝒹𝑒𝓈𝓉𝓇𝓊𝒾𝒹𝒶𝓈

__________! Gal ¡___________

 

Yo debí ser el de la foto. Yo debí haber ido con ella al parque de atracciones. Porque de esa manera, podría tener un recuerdo compartido en el que me hubiera divertido al tomarme una foto tan simple como ella la había hecho con Cock.

 Hoy llovería. Llovería excesivamente. Miré las nubes grises amenazantes de una tempestad. Me sostenía en el pasamanos del balcón de mi estudio. No hacía mucho viento, pero fue lo suficientemente fuerte para poder despeinarme un poco. El corazón me latía en los oídos, estaba herido, en pecho yacían los pedazos que una vez estuvieron en una pieza completa, haciéndome pensar que lo tenía todo.

–Que hermoso es el cielo…– 

Regresé la vista a la chica de cabello cortos en el balcón junto al mío. Miraba al cielo con tanta fascinación, como la que acostumbraba desbordar inexpresivamente

 –Está gris…– refuté

–De todas menaras es hermoso– continuó– después de todo el cielo es cielo, y lo seguirá siendo sin importar como se vea ahora– 

–Lloverá– me limité a decir

–Ambiente perfecto para un café cargado…– chocamos miradas por unos segundos

Estábamos a unos cuantos metros de distancia, pero la sentía tan cerca, juraría que podía oler su aroma a cereza, se había apoderado de mi casa. De mi vida. De mis pensamientos. Y si mi garganta tuviera el suficiente coraje le gritaría eso.

Vi como inclinó su cuerpo un poco, respiró hondo hasta que empezaron a caer pequeñas gotas del cielo, pero se quedó ahí inmóvil. Como si le gustara que la lluvia le empapara la cara y el cabello.

Le di una calada el cigarrillo que mis labios sostenían descaradamente, a ella no le importaba verme fumar, de hecho, creo que no le importo en general.

–Rose se veía preciosa en ese vestido ayer…– su voz tenía un tono bajo y neutral

–Si… es muy bonita– no le di importancia

Se quedó en silencio. No me respondió y eso me dolió aun más. Ella tenía brillo en el rostro, sin que se dé cuenta irradia tantas cosas que me abruma en no poder tenerlas todas, que no todas estén dirigidas a mí. Por eso, ella es hermosa

Rose y yo habíamos ido a una reunión ayer, salí muy temprano porque no quería ver a CC. No quería verla vestida de esa manera tan linda, con la emoción encabezando el día, sabía que le pediría que se quedara así que me ahorré el agobio

No habían pasado demasiadas cosas ayer, cerramos un contrato relevante y fuimos a almorzar en un restaurante elegante, Rose era muy tímida, por lo que constantemente debía continuar la conversación durante la comida, no me molestaba, ya me había acostumbrado por el tiempo que lleva trabajando para mí. Pero solo era eso, una admiración que me tenía y espero que no malinterpretara nada que saliera de mí.

–Hoy iremos a ver a tu amiga– confirmé 

No respondió 

–¿Aún quieres ir? – la miré con el rabillo del ojo

–Si– respondió con una voz algo quebrada 

–Pues creo que deberíamos ir ya– enderecé mi cuerpo

–Supongo– 

No sé qué le había pasado, hace un momento estaba normal pero ahora sonaba seca, fría y desinteresada. Talvez solo esta triste porque en unas semanas su amiga ya se iría.

Pero ella también se irá 

No quiero pensar en eso ahora.

 

 

La chica con tacones altos y mucho maquillaje entró al auto por la puerta trasera mientras bufaba de disgusto

–Detesto la lluvia CC, es un asco– se revolvió el cabello

–No es tan mala, no exageres– frunció las cejas 

–Eso lo dices tú, porque hace mucho que no salías a las calles– se recargó en el asiento y mi miró por el espejo retrovisor– ¿Qué tal ancestro? – me saludó 

–Hola mocosa– respondí 

–Wow, cada vez estás mas viejo– bromeó soltando una carcajada 

–Amber! – se quejó CC

Me viré en mi asiento para mirarla con disgusto. Ella me miró de arriba abajo y se cruzó de brazos

–Estás muy viejo. CC, ¿Aun se le para? – regresó a ver a la chica a su lado 

–NO SEAS TARADA– le golpeó en el hombro con un poco de fuerza

–Ya, ya. Perdón– hizo una mueca sacando la lengua

–Como sea…– continuó la de cabellos cortos– ¿Qué tal está 66? – 

–Le pegó una infección muy fuerte como te conté la otra vez, pero ahora que Dust dejó de ir a la casa se le ha pasado– contestó con entusiasmo 

 

Hablaron por mucho tiempo, lo que me inquietaba saber era: ¿A que se refería con que CC hace mucho que no salía a las calles? Es decir que ¿antes de venir conmigo no salía? Ese joven Rick al momento de escogerla dijo “Ella es mi líder” ¿CC era la que reclutaba a todas estas niñas? ¿Estará conflictuada por eso?

–Oye! ¡Ancestro! – la voz molesta se hizo presente en mi oído

–¿Qué quieres? – 

–CC te dijo que quería salir de auto para ver el burdel por fuera– 

La regresé a mirar y ella asintió. Quité el seguro de la puerta, ella bajó con cuidado de no resbalarse en los charcos de la acera y se dirigió al local.

–¿Hace cuanto conoces a CC? – pregunté rápidamente

–¿Para que quieres saber eso? – respondió con molestia. No respondí– ¿Qué acaso te gusta? –

Amber miró como mi cara se sonrojó y aparté la mirada

–Oh mierda…SI TE GUSTA– se acercó a mi

–No respondiste a mi pregunta– 

–Bueno, hace unos ocho meses que fui a pedir trabajo al burdel…la conozco desde entonces– apoyó la cara en su mano– pero CC estaba desde hace mucho antes…– 

–¿En verdad? – ella asintió

–Si, verás viejito, te voy a contar…porque no me conoces y después de que CC venga con nosotros no te voy a volver a ver– respondió con emoción– resulta que nosotras nunca hablamos de nuestro pasado, como si lo hubiéramos olvidado, pero estoy segura de que no es así–



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En el texto hay: millonario, vida dura, burdel

Editado: 19.05.2024

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