CAPITULO 20

CASSANDRA  
Al llegar al hospital estaba enojada, Sebastian tenia que saberlo y no me dijo nada. Cuando llegue al cuarto de Kyle, una enfermera lo atendía. Pero él dormía. Me indico que saliera y la seguí.  
- ¿Cómo esta? – pregunte preocupada 
- Ahora estable, necesita descansar  
- Voy a cuidar de él – la enfermera me miraba atentamente, algo en su mirada me hizo entender que sabia quien era yo.  
- Ahora solo déjelo descansar – dijo por ultimo marchándose. 
Volví a ingresar a la habitación. Me senté mirándolo fijamente. Cuando lo conocí él pasaba por una etapa muy dura y yo también. Contarle lo que me pasó fue natural. El ayudo a una chica a librarse de su agresor. Lo que me hizo confiar en él. Fue Lucero quien nos presento, fuimos amigos primero, compartíamos el amor por la música. Cuando me pidió salir acepte, era el único que se interesaba en mí. Ser su novia fue un paso natural. Fue fácil decir SI, me comprendió en un principio. Después mientras la relación avanzaba empezaron los problemas, peleábamos más cada día, nos evitábamos, terminábamos y volvíamos más por costumbre que por cariño. A él le enojaba que no superará lo que me pasó, enfurecía y yo corría de su lado. Toxico. En eso se convirtió. Jamás pude darle lo que quería y él jamás me dio lo que yo quería. Ahora comprendía claramente que hacernos novios no habia estado bien. Kyle era él único al que habia dejado acercarse tanto hasta Sebastian. Esta noche la pasaría en el hospital. Sandra estaba enojada. Javier estaba furioso, amenazando con sacarme de aquí. Le grite que no se metiera en mis asuntos, esperaba que me hiciera caso.  
Me quede dormida, cuando desperté, kyle me observaba. 
-hola – dijo, estaba un poco pálido  
- hola – conteste acercándome - ¿Cómo te sientes? 
-mejor Cassie, gracias por venir – dijo sentándose en la cama – quiero salir de aquí. 
- converse con tú doctor, cuando entro a revisarte en la noche, me aconsejo que era mejor que te quedaras un par de días. 
-Este sitio es horrible 
-todos los hospitales lo son. 
Nos interrumpió el doctor, los deje mientras iba por un café. Me encontré con Sebastian en los pasillos. Me quedo mirando mientras avanzaba hasta él. Sabia porque me encontraba aquí y no era por buscarlo a él. 
-es en serio Cassie – dijo  
-¿Qué es en serio? – conteste como sino lo entendiera  
-estas aquí por ese tipo – afirmo irritado  
-Si,  él me necesita, deberías haberme dicho lo que le paso. 
-Ahora no solo tengo que aguantar que te veas con él, sino también informarte su paradero, ¿no quieres también que lo cuide? – pregunto sarcástico.  
-pudo haber muerto, Sebastian. MUERTO. 
- Y si hubiera muerto ¿te hubiera afectado? – dijo – pero que imbécil que soy por supuesto que si, ya que corriste a verlo.  
-estas siendo cruel, mejor me voy 
-bien vete, cuídalo bien – dijo alejándose 
Pase todo el resto de la mañana con Kyle recordando. 
-la pasábamos increíble antes – dijo – fui yo quien lo jodio todo   
-Kyle – lo reprendí 
-solo tenia que ser paciente, con el tiempo hubieras confiado más en mi, pero te amaba Cassie. Lo siento. 
-que no funcionara no fue tú culpa Kyle – dije – ninguno puso de su parte lo suficiente. 
-pero ahora podemos hacerlo – lo mire estupefacta – digo que aun te quiero Cassie, podemos intentarlo nuevamente, se que aun sientes algo por mi. 
- estas equivocado Kyle – dije apartándome cuando tomo mi mano  
- claro que si Cassie, por eso estas aquí, te preocupas por mi – intento nuevamente tomar mi mano así que me aleje al filo de la cama – nadie te va a entender como yo. 
-Kyle .. – me interrumpió. 
- escúchame, podemos intentarlo verdaderamente, ese doctorcito, no creo que llegues a nada con él, son muy diferentes. 
-Kyle … - me interrumpió nuevamente  
-solo piénsalo Cassie  
Salí de la habitación, camine por el hospital sin rumbo. Pensando en Kyle, cuando me lo presento Lucero, me pareció un chico entretenido, su amor por la música fue lo que me cautivo, y el motivo de aceptar su invitación para salir. Lo que me convenció de tener una relación con él fue que compartíamos un vinculo con el dolor. Por casualidad íbamos a la misma terapeuta sin saberlo, cuando nos encontramos cara a cara fuera de la oficina fue chocante. Kyle fue sincero y me conto que por poco le hace daño a su novia estando borracho y que eso lo habia echo reaccionar para buscar ayuda. Cayo en depresión pero trataba de afrontarlo. Sus padres y hermano lo habían alentado a rehabilitación. Después de una franca  conversación le conté sobre mi caso. Me entendió y apoyo en ese momento. Nos unimos dos almas atormentadas pensando que mutuamente nos ayudaríamos. Pero no resulto. ¿Qué lo haría diferente ahora? Nada. Solo nos causaríamos más daño, más dolor. Iba a ayudarlo, pero volver con él no era una opción. No lo era desde que Sebastian entro en mi vida. Tenia que buscarlo y hacerle entender que Kyle no era una amenaza para nuestra relación. Lo encontré conversando con Claudio.  
-Hola – dije saludándolos, me miraron los dos seriamente - ¿interrumpo algo importante?  
-no – dijo Claudio, el siempre estaba serio- interrumpes, yo ya me iba, cuídate Cassandra. 
-Adiós. Podemos conversar en un lugar más privado – dije, observando como algunas enfermeras nos miraban con curiosidad. 
-vamos a mi consultorio – dijo, le seguí el paso, durante el mini corto trayecto no pronuncio palabra. Al llegar se sentó y cruzo los brazos mirándome. 
-te escucho -dijo, el hombre no estaba para sutilezas, tenia que ser clara y precisa. Estaba aprendiendo que aunque era cariñoso y dulce conmigo, si que era intimidante cuando se enojaba.  
-voy a seguir ayudando a Kyle – dije – eso no quiere decir que sienta algo por él. 
-eso ya me lo comunicaste Cassie -dijo levantándose – y yo te dije que no me gusta nada que estés con ese tipo, él sigue enamorado de ti. 
-lo se, me lo dijo – Sebastian suspiro cansadamente – quiere que vuelva con él, pero yo jamás volvería con él porque … porque.. te quiero Sebastian no se en que rayos me estoy metiendo y tengo miedo pero voy a confiar en ti porque te quiero. 
Al ver que Sebastian no decía nada me acerque a él, me puse de puntillas, pase mis brazos por su cuello y le susurre … te quiero. Me miro durante un instante eterno.  
-Te quiero bonita – dijo inclinándose para besarnos largamente, apretó su cuerpo contra mi, sus brazos me aprisionaron contra él. Cuando nos separamos, los dos jadeamos por aire, conectamos nuestras miradas, cada uno pensando en lo significativo del beso.  
- Sebastian – dije rompiendo el silencio – tengo que ayudarlo porque si algo le pasa jamás me podre perdonar a mi misma. No tiene a nadie ahora. Solo hasta que regrese su hermano y se haga cargo de él. 
El suspiro pesadamente aceptando su derrota en este tema. 
-  Confía en mi  
- Confió en ti, pero no me fio de ese idiota – dijo irritado – esta bien Cassie, pero regresa el hermano y después no quiero oír de él, no lo quiero en nuestras vidas. 
Se sentó y me jalo a su regazo para volver a besarme.
-Te sientes tan bien cariño, eres preciosa – dijo susurrándome al oído. Pasamos un buen rato juntos, olvidando a Kyle por completo hasta que lo llamaron. 
- Yo también tengo que irme – dije besándolo por ultima vez – tengo que llevar a Kyle a casa. 
- ¿A su casa? ¿Por qué tienes que llevarlo tú? No puede llamar a un taxi e irse solo – dijo nuevamente irritado.  
- Porque con sus padres se lleva muy mal, su hermano no esta en la ciudad, solo voy a llevarlo, dejarlo en la puerta y adiós.  No te preocupes  
El acepto no muy convencido. 
Salí apresuradamente para no continuar con la conversación. Al llegar por Kyle, lo encontré listo para irse. Enrumbe hasta su departamento, rechace subir, cuando él insistió.  
- Cassie lo que te dije hoy..- fui yo quien ahora no lo dejo terminar. 
- Para Kyle, no voy a regresar contigo, por favor no insistas en esto, te ayudare en lo que pueda, pero no me pidas más. 
- Entiendo Cassie – dijo cabizbajo  
- Nos vemos Kyle- dije despidiéndome.