Distrito 13

Lo recuerdas...

Mateo, quebrado, comenzó a experimentar con sus propios sueños.
Se indujo al sueño lúcido. Grabó su actividad cerebral.
Y entonces lo vio.

La figura.
Alta.
Envuelta en vendas negras.
Sin rostro.
Sin pasos.
Solo aparecía.

Mateo logró mantener la conciencia dentro del sueño.
Sabía que estaba soñando.
Sabía que no debía hablar.
Pero la figura no necesitaba palabras.

Tú también has soñado con la muerte ¿La recuerdas?

Mateo, aterrado, intentó despertar. Se concentró. Forzó su mente a salir.
¡Funcionó! Despertó empapado en sudor, con el corazón a punto de estallar.
Pero en su brazo… había una quemadura.

Una línea negra, como si una venda caliente lo hubiera marcado.




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