Capitulo 6

Damir

Definitivamente, Turquía deja sus huellas en todos los que vienen aquí. Llevo muy poco tiempo en este país, pero ya me siento aborigen a la mitad. De lo contrario, ¿cómo explicar que los niños pequeños dejaron de molestarme? Como si fuera poco, incluso empiezo a disfrutar de la comunicación con ellos.

Bueno, para ser justos, debo decir que tengo en cuenta a un solo niño. A la hija de mi Yasia, a quien me propuse conquistar de nuevo.

Supongamos que veo en la niña una forma de lograr un objetivo y, por lo tanto, desactivo todas las emociones negativas con ella. Siempre lo hago así, en esto soy un profesional hace mucho tiempo. Eso fue exactamente lo que hice una vez con su madre.

Pero Yasmina era una chica adulta e independiente, no tuve que entretenerla y llevarla de la mano. Pero Lale es muy pequeña todavía. Y en las dos horas que estuvo sentada en mi despacho, se las arregló para pedir tres veces ir al baño, dos veces comer y cinco veces beber.

Marina la acompañó al baño, porque como quiera que sea, eso es lo que requiere la decencia. Yo podría habérmelas arreglado con el bebé por mi cuenta. Y yo mismo la llevé a la cafetería a comer pasteles. Y a la tercera vez, comencé a sospechar que a la chica simplemente le gustaba pasear de la mano conmigo por la oficina para que todo el mundo la mirara y chasqueara la lengua:

— ¡Oh, qué maravillosa princesa es nuestra Lale! ¡Miren a esa hermosa flor!

Lale a su vez, caminaba a mi lado, mirándome desde abajo y brillaba de felicidad. Así que yo mismo al mirarla, todo el tiempo quería sonreír.

Y ahí está el kid de la cuestión.

Los métodos de lograr los objetivos no pueden traer alegría y sentimientos de felicidad completa. O sosiego total. O provocar enternecimiento. Si apagas las emociones, se apagan absolutamente.

Tuve una única excepción: Yasmina. Hasta que no la perdí no me di cuenta del espacio que ella había ocupado en mi vida. Entonces, ¿su hija heredó esa capacidad de influir en mí?

Es muy interesante. ¿Significa esto que la pequeña Lale se convertirá en una necesidad para mí como su madre?

Sigo experimentando. Yasmina y Damla llevan tres horas escogiendo las telas con los proveedores. Tuve una reunión operativa por la mañana, mis directores y gerentes han recibido sus tareas de gestión y ahora su director general durante más de dos horas se ocupa de todo tipo de tonterías.

Lale y yo vimos dibujos animados y leímos un cuento de hadas. Leí, por supuesto, yo, y ella escuchaba, aunque no me sorprendería si esta asombrosa niña comenzara a leer ella misma.

Después la niña me ofreció jugar al escondite, y honestamente, ya estaba casi listo para hacerlo. Nos detuvo el hecho de que la oficina de la fábrica es muy elegante y moderna. Es evidente que Kaan tiene buen gusto. Mi despacho de director general está hecho a medias de vidrio, por lo que no hay absolutamente ningún lugar para esconderse aquí.

Lale se entristeció, pero lo resolví de manera fácil y simple, prometiendo a la niña invitarla a visitarme. Por supuesto, no sola, sino con su mamá.

En un apartamento de casi ciento cincuenta metros cuadrados, hay muchos lugares donde una niña pequeña puede esconderse. Y yo haré todo lo posible para que ella se sienta triunfadora.

¡Ahí está! ¡Lo tengo!

Quiero que ella sonría. Y que brille de felicidad, como hoy, cuando la llevaba de la mano a comer pasteles.

Bueno, ¿y qué importa que esta es la segunda vez en mi vida que veo a esta niña? Ella es la hija de Yasmina, lo que significa que esta habilidad se le transmitió genéticamente al 100%.

Miro a la niña que está sentada en mi butaca con pies y todo y, sacando la punta de la lengua, dibuja diligentemente mi retrato justo en mi agenda de trabajo. Porque ella tiene un cómodo cartón grueso y el papel de impresión es demasiado delgado. De este papel yo hacía aviones para Lale.

Yo mismo estoy sentado de lado en una silla con el monitor girado hacia mí.

También queríamos jugar al caballo. Creo que no vale la pena especificar a quién de nosotros se le asignó el papel de caballo. Fui el primero en entrar en razón, como quiera que sea, sólo llevo dos días dirigiendo la fábrica. No sería muy correcto si alguien de los empleados entrara en la oficina y viera al director general galopando en cuatro patas. Eso no va a fortalecer mi autoridad, incluso si es Lale quien está sentada en mi espalda.

Pero, por otro lado, ya sé lo que haré cuando Yasia se vaya de vacaciones con su niña. Iré tras ellas y haré todo lo necesario para que estas vacaciones se conviertan en un cuento de hadas para ellas.

Ese es también un objetivo. Y si me pongo un objetivo, lo lograré, cueste lo que cueste.

— Damil Bey, ¿te palece bien? — la voz de Lale me saca de un estado de ensueño.

Miro mi agenda. Hay dibujado un tipo larguirucho en pantalones y con una cabeza grande. Sostiene la mano de una persona con un vestido triangular de lunares. Esa persona tiene espirales que salen de la cabeza en diferentes direcciones, por lo que llego a la conclusión de que es Lale. Por otro lado, una persona delgada y larga también con una figura triangular en lunares la sostiene de la mano, de lo que queda claro que es Yasmina.