Doble cara, doble visión y doble voz

Prólogo

El iniciar a estudiar una carrera es un sentimiento tan bonito, sobre todo cuando es exactamente lo que has elegido. No me es posible describir la emoción que se siente al saber que estás a una de las rectas finales para poder cumplir tus sueños; o lo que causa que conocerás nuevas personas, gente que tiene objetivos parecidos a los tuyos, gente que también quiere ir a triunfar. Todo era tan indescriptible, tan maravilloso y tan hermoso.
Me encontraba a punto de iniciar con esa etapa en mi vida, estudiando en la Escuela de Educación en la Universidad de Michigan. Prácticamente estaba cumpliendo todo lo que había anhelado. No podía creer en el momento que estaba viviendo, además, había escuchado maravillas sobre el grupo del que formaría parte. Habíamos tomado un pequeño curso sin la necesidad de vernos, pero para mí era suficiente, creía que eran personas tan fantásticas y con una vibra bonita, o al menos eso parecía. 
Oh, gran señor, me hubieras mandado un mensaje para entender que ese sería el comienzo, el comienzo para mí mayor tormento. Me hubiera gustado saber que ninguno era lo que aparentaba, que tenían más caras que huesos y que nada estaría bien, al menos no para mí. Pero, ¿Quien tenía más tormento, yo o ellos? 
 



#2485 en Joven Adulto

En el texto hay: amor, amistad, hipocresía

Editado: 26.07.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.