Este corto relato está dedicado a esas 16 personitas que agregaron estos humildes escritos a su biblioteca. En estos tiempos difíciles, les deseo con todas las buenas energías que todos estén bien, que sigan las precauciones de sus gobiernos, incluso más, la prevención nunca es poca.
Díganme ¿en qué se equivoca una mujer? Una mujer que solo desea ser amada, que la quieran bonito, con el corazón lleno.
Hay mujeres con mucha suerte en el amor, que lograron encontrar felicidad, que las quisieran realmente, a pesar de las diferencias, del carácter, de la edad, de la raza, de la nacionalidad, a pesar de todo y me siento feliz por ellos, que lograron lo que todos desearían, pero pocos tienen.
Pero aun así pienso que el amor no está hecho para todos, como hay hombres desgraciados, también hay mujeres, que lo tienen todo y lo derrochan como si fuera algo insignificante, tienen hombres enamorados, fieles, detallistas, obviamente con sus defectos igual que cualquier ser humano, pero los dejan ir, se arrepientan después o quizás no.
Pero hay mujeres demasiado rotas, demasiado dañadas, que aún creen en el amor, tienen una pequeña pizca de esperanza, a pesar de que crean que es mucho pedir, pero desean ser amadas que aunque no dure para siempre deje recuerdos hermosos, dejen una hermosa huella tatuada en la piel, pero para esas mujeres pareciera que no existiera ese hombre, ese hombre que sea capaz de ser un compañero, un aliado, que la ayude a sanar, que la haga muy feliz pero sobre todo que la haga sentir la mujer más importante del mundo.
Esas mujeres no buscan lo material, solo desean ser amadas por un hombre correcto, alguien que no juegue, que no quiebre, que no juzgue, porque el pasado de una mujer rota no es bonito, por eso está rota, porque ya la quebraron una y otra vez a pesar de quererse levantar sola, llegó ese hombre que la endulzo en palabras pero que no tenía alma, que la dejaba caer a un precipicio con palabras hirientes y hechos graves, que no era aporte sino destrucción.
¿Qué hace una mujer? Cuando a pesar del tiempo, de que la vida sigue, tiene ese pequeño agujero en su alma, esa parte incompleta, esa duda de ¿Por qué no a mí? Después de todo ¿Por qué esa mujer no tuvo la oportunidad de ser amada?
Esa mujer rota intenta poner todo de su parte, pasando a ser una oruga que piensa en ser mariposa, suelta las cadenas, libera las amarras de las malas energías, deja los diretes de lado, surge, renace, pero queda esa pequeña espina de que no cumplió su sueño más oculto.