Capítulo 9

Sus brazos me sostuvieron cuando me derrumbe, me envolvieron en un fuerte abrazo, estaba petrificada, alguien quería matarme y aunque él no lo dijo era la respuesta más obvia, asesinaron a mi padre, mi familia me odiaba y me consideraban su enemiga, pude recuperar un poco de movimiento en mis brazos para responderle, su mano acaricio mi cabello

—Lo siento mucho, me gustaría que las cosas fueran de diferente manera

—Yo...

—Shh, está bien, no tienes por qué decir nada

—Gracias

—No comprendo ¿Porque?

—Por ser sincero conmigo, eres el primero en decirme lo que ocurrió y por tratarme como si nada de esto hubiera pasado

—No puedo mentirte, no a ti, no importa que pase, así sea el mismo fin de la humanidad siempre estaré contigo, ayudándote — No pude evitar que las lágrimas comenzaran a aparecer, con cuidado las limpio de mis mejillas, sonreí un poco, estaba agradecida por su amabilidad, su forma de tratarme — Lamento comportarme como una tonta contigo, no te lo mereces — No respondió, solo me observo así que decidí continuar —Estoy segura que papá te adoraba, eres una persona que...

—Claro que me adoraba, vamos, soy perfecto —Dijo en tono cómico, reí

—Y sobre todo modesto

—Oye, no es mi culpa, solo soy realista... mira, tu padre te amaba más que a nada, tu madre y hermano igual, eran capaces de morir por ti, ellos odiarían verte así al igual que lo hago ahora yo, te diré lo mismo que a mi madre, las lágrimas si no son de felicidad no sirven de nada, lo hecho, hecho esta, no puedes dar marcha atrás, solo puedes levantarte y seguir adelante

— ¿Quién lo asesino?

— No tiene sentido que te lo diga, la persona ya está lejos de nuestras vidas y no sirve de nada que intentes buscarla, no te daremos esa información, ahora vamos, te ves cansada y si necesitas descansar, vendrán días más complicados

— ¿Me ayudaras? Quiero decir... Esto es tan confuso, quiero ayuda

—Por supuesto

—Antes que nada quiero decirte que no estoy buscando nada en especial y, bueno... Edwin también me ayudara a recordar quien soy

—Eso pensé, no se separara de ti

—No lo hace con esa intensión, solo quiere ayudar, por favor, te lo dije, no quiero otra cosa que no sea ayuda, la mayor posible y eso incluye conocer la verdad sobre ambos, sus discusiones y sobre todo que tengo que ver en ellas, esto no se trata de quien tiene la razón ¿Acaso no dices que quieres ayudarme? Bueno, es la mejor manera o al menos la que conozco

Su rostro no mostraba emoción, parecía estar pensando sobre mi propuesta, podía negarse y eso lo llevaría a alejarme más o ignorar a su hermano y en verdad mostrar que se preocupaba por mí, que quería ayudarme a toda costa, sin importar nada, así fue Edwin

—Comienzo a preguntarme si de algún modo recuerdas que eres mi debilidad y que no puedo decirte que no jamás — Soltó una bocanada de aire —Está bien, me quedare contigo así él esté con nosotros, te ayudare en todo lo que me sea posible, incluso si no lo es ya veré el modo de que sea así

—No tienes idea de lo mucho que significa para mí, sobre todo en la situación en que me encuentro ahora

—Claro, te entiendo

—Tengo otra duda... ¿Dónde están mis padres? ¿Qué paso con sus cuerpos?

—Están en Lupus y como debes suponer no puedes regresar ahí jamás — Me desilusione — Pero tengo un video en realidad virtual donde podrás ver sus tumbas y tocarlas, no es igual que la vida real pero creo que te ayudara

—Me encantaría ir pero tengo que dormir—Una lápida no me daría la información que necesitaba, tendría que buscar otra manera — Pero iremos en cuanto tenga un tiempo libre

Vi la decepción en su rostro, sabía que quería pasar más tiempo conmigo pero yo estaba agotada, la muerte de mi familia no era una decisión para tomarse a ligera, estaba metida en problemas hasta el cuello y tenía que reunirme con Edwin para hablar sobre el problema que ocurría con su hermano

Orión me acompaño a mi habitación, me pareció extraño que Edwin no estuviera esperando por mí, dijo que regresaría pronto y ya habían pasado varias horas, pensé que había regresado antes que yo y prefirió irse a dormir y lo comprendía habían sido días agotadores, Orión se despidió de mí y se fue, entendiendo la situación, no me toco, no fue más lejos de una simple platica, todo en el castillo era silencio, debía ser tarde, pensé en las palabras de Orión, mi familia estaba destruida, no tenía a nadie, excepto a… a ambos hermanos y Europa y Rigel, se habían mostrado fieles aun a pesar de la molestia de Edwin seguía ayudándome y siempre intentando protegerme, me dispuse a irme a la cama aun con todos esos pensamientos rondando en mi cabeza, aun con toda la angustia de no saber que me deparaban los próximos días, el sueño me venció.