Después de que escapara Doraemon del campo de batalla, Nobita se preparo en posición de ataque y de las primeras hormigas que le atacarían, el se subió encima de ella, teniendo el control de sus movimientos y derribando a las demás con sus colmillos y garras, para después matar a la misma con un puñetazo letal en la cabeza de la hormiga.
Pronto comenzarían a venir mas en oleadas, dejando a Nobita mas entusiasmado y recordando le que seria un entrenamiento inolvidable, empezaron a aparecer 5 hormigas mas en la zona donde estaba Nobita, para responderlas a todas esas hormigas el cogió y arranco una hoja aleatoria y empezó a darles a todas con ella, haciendo que vuelen debido a la corriente que genera la hoja y el peso de las hormigas, al acabar con las 5 y en un despiste de Nobita, una hormiga se le adelanto por detrás y le dio con la pata en todo el costado a Nobita, haciendo que este salga volando debido al impacto del golpe, dejándolo aplastado en una de las hojas de la zona, pero este se recupero rápidamente y volando a toda velocidad hacia la hormiga le acertó un golpe en todos los ojos que tenia.
Uff, estas oleadas son muy difíciles... Me pregunto a donde ira a parar Doraemon para que no quiera entrenar con todas estas hormigas... -decía Nobita mientras se quitaba la camiseta del colegio-
Mientras tanto, Doraemon se encontraba peleando con una mariquita que se le había cruzado la cual venció en un abrir y cerrar de ojos, donde había ido a parar el estaba repleto de barro y lleno de muchos bichos enanos similares a un saltamontes, aunque no hubiera ninguna amenaza cerca, podía escuchar muy a lo lejos una voz que provenía mas adentro de los hierbajos de la montaña.
Con total inseguridad de lo que podría ser, Doraemon entro rápidamente entre aquellos hierbajos para poder ver si era un humano o algún tipo de insecto o otra entidad que pudiera comunicarse con el.
¡Quien esta hay y porque puede hablar en nuestro idioma!... Pero que cojones... -decía Doraemon mientras se acercaba a la entidad-
Dentro de aquellos hierbajos se encontraba una entidad similar a una flor pero con apariencia humana y de color carne, lo que le resultaba raro a Doraemon ya que dentro de su base de datos no tenia registro de algún ser vivo como ese, y menos en esa época.
¡Ay no me hagas nada por favor te lo pido!... -gritaba aquella flor mientras se tapaba la cabeza con sus hojas en forma de brazos-
No te preocupes entidad desconocida soy un robot proveniente del futuro y estoy aquí para proteger a los mas indefensos... No te haré daño solo quiero saber la razón de porque hablas el idioma de los humanos y porque estabas gritando por ayuda. -explicaba Doraemon mientras sacaba algo de su bolsillo mágico-
Mira aquí traigo un kit de primeros auxilios, por si tienes alguna herida... -decía Doraemon mientras observaba el cuerpo de aquella entidad-
Doraemon pudo analizar y apreciar de que en una de sus hojas con forma de brazo tenia una herida, como si de un insecto le hubiera picado en el antebrazo de la hoja. No lo pensó mas y le curo la herida para que aquella entidad con forma humanoide pudiera ver que el no es una mala persona a pesar de su apariencia.
Ya esta como nuevo tu... ¿brazo o hoja?. -decía Doraemon extrañado-
A si veras soy como un humano solamente que un malvado hombre que habita en uno de esos arboles me transformo en un híbrido de humano y flor, y todo para abusar sexualmente de mi sin mi consentimiento... Conseguí escapar de el pero en el intento, una de sus garras se me clavo en mi brazo y ya me sentía indefensa... -explicaba calmada la flor humana-
Entiendo... Con que antes eras humana pero ahora eres como un híbrido entre una flor y humano... ¿no es así?. -preguntaba Doraemon intentando entenderlo-
Si es asi... ¿Y tu que eres un mapache o algo?. -preguntaba confusa la flor-
A ver cuantas veces lo tendré que decir... Soy un gato solamente que se comieron mis orejas y por eso tengo esta apariencia. -explicaba Doraemon-
Al terminar de explicar, un insecto se aproximaba a los dos y Doraemon tuvo que empezar a prepararse en posición de defensa, y de entre los hierbajos salio una mantis religiosa, uno de los insectos mas poderoso por sus afiladas puntas que aportaba en sus patas. Doraemon empezó a temer un poco por su vida ya que el sabia que era bastante poderoso pero no al punto de poder ser inmortal delante de aquel monstruo.
Joder este es de los fuertes... Quédate hay resguardada y ahora escaparemos de aquí como sea... -le decía Doraemon a la flor-
Por alguna razón la mantis estaba como intentando comunicarse con Doraemon, pero el no lo entendía así que fue el primero en atacarle, de su bolsillo mágico saco una especie de cuchillo de carnicero con un filo bastante poderoso y de un esprint se cargo las 4 patas de aquella mantis dejándola indefensa al no poder defenderse.
Buff, ya no podre usar mas de dos veces este cuchillo por culpa de este insecto... -decía lamentado Doraemon-
La mantis ya sin poder defenderse empezó como a intentar sacar lagrimas, a pesar de no poder albergar agua dentro de su cuerpo las saco y eso se le hizo bastante extraño a Doraemon, con lo que saco su gelatina traductora para poder ver que quería contarle a el.
Que quieres contarme que estas llorando por haberte cortado las patas, habla ahora o muere para siempre... -decía Doraemon mientras masticaba la gelatina-
Yo no quería mataros o haceros daño simplemente venia a notificar de una amenaza... Pero ya me quedan pocos segundos de vida no creo poder contarlo. -decía la mantis mientras seguía llorando-
Cuéntalo todavía estas a tiempo, normalmente las cortaduras no hacen efecto en el ser vivo hasta unos 2 o 3 minutos y tan solo ha pasado medio minuto... -explicaba Doraemon mientras guardaba el cuchillo-
No lo se si se lo comentaron a ustedes, pero aquí en el bosque hay un ente maligno que esta esclavizando a todas las hormigas obreras para que les hagan un trabajo en especial que por ahora desconozco... Y lo se porque yo antes era el protector de aquel árbol y yo tenia mi casa allí, pero ahora me arrebataron todo y ya no tengo en donde vivir... -dijo aquella mantis entristecida por lo que ocurrió en el pasado-