Dos almas, un solo corazón

Lily Miller

Ahora mismo estoy delante del estupido vestidor intentado buscar algo decente para ir a la estupida cena que se a empeñado en organizar mi Tía Megan dice que es mi primera cena en Los Ángeles y por eso tiene que se algo especial, a dejado caer que será en un restaurante de etiqueta así que estoy decidiendo en su ponerme un vestido rosa palo o uno color salmón.... Jajajaa ¿os lo habíais creído?  En la vida me pondré un vestido de ese color así que opto por una falda negra acompañada de un top del mismo color y como no unos tacones....os e vuelto a vacilar yo soy más de zapatillas.

Me ato el pelo en una coleta alta y para cambiar un poco me delineo los ojos, mi madre solía decir que hacia destacar el verde de estos 

Megan:Madison llegamos tarde!!!

Uffff odio que me llame Madison solo mi profesora me llamaba así o bueno también mamá cuando me portaba mal que solía ser casi siempre, salgo de mi habitación y me dirijo hacia el pasillo que lleva hacia la salida pero antes me paro a mirar una habitación que tiene la puerta entre abierta, es la biblioteca y como fan de los libros no puedo evitar la curiosidad así que entro la gran mayoría son de una tal Lily Miller se ve que a Ben le gusta mucho esa escritora justo cuando voy a mirar la foto de la escritora la voz de mi Tía vuelve a sonar desde el salón así que me apresuro en llegar cuanto antes, no os lo voy a negar puede que por el camino me despistara con algún cuadro o retrato familiar 

Ben:la última vez que espero a esta niña 

Dice mientras sale de la casa y va dirección al coche el cual me fijo que solo tiene dos asientos 

Megan:Maddie cariño tú irás con tu primo

Maldigo mi suerte mientras espero que el engreído de "mi primo" abra las puertas de su espantoso deportivo rojo.

Una vez dentro Charles me dedica una sonrisa burlona mientras enciende la radio del coche

Chuck:muchas matarían por estar en ese asiento *dice vacilon*

Yo:yo mataría por no estar en el

Después de esa breve conversación me giro hacia la ventanilla y no vuelvo a dirigirle la palabra a Chuck en todo el camino calculo que an sido los quince minutos más incómodos de mi vida, imaginaros por un momento estar en el coche de un completo extraño el cual te cae fatal y a más te an obligado a ser "su prima"  ¿Ahora me entendéis?

Cuando llegamos al restaurante antes de que pueda abrir la puerta del coche un apuesto camarero lo hace por mi 

Camarero:Señorita me permite *dice tendiéndome la mano*

Aceptó la mano del rubio camarero sin levantar la mirada del suelo no estoy acostumbrada a tantas atenciones hace unos meses el sitio más lujoso donde iba a comer era el bar de abajo de mi casa que daba menús por diez libras como echo de menos las patatas fritas de Londres.....




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