La culpa

Puedo escuchar la voz de mi Tía a través del teléfono esta bastante irritada hasta parece preocupada por mi ausencia o eso creo hasta que escucho a mi abuela decir que yo no tengo la culpa.

¿La culpa de que?

Que yo sepa lo único malo que he hecho a sido enamorarme de un gilipollas que me a roto él corazón.

Mi abuela le repite varias veces a mi Tía que me quedaré con ella unos días así que mandará a alguien para que recoja algunas de mis cosas.

Por fin después de unos diez minutos mi Tía entra en razón y corta la llamada, le dedico una mirada interrogativa a mi abuela la cual me indica que la siga.

Me lleva hasta el piso de arriba y se para delante de una puerta, abre la puerta y deja ver en su interior una habitación pintada de color fucsia oscuro.

Olivia:quiero que esta sea tu habitación Maddie 

Miro a la emociona mujer que tengo alado y como gesto ya habitual entre nosotras le doy la mano a modo de respuesta.

Yo:¿Abuela de que tengo yo culpa?

Olivia sonríe al escucharme por primera vez llamarle abuela en vez de su nombre, no es algo que haya pensado más bien me a salido del corazón llamarla así aunque la conozco desde hace poco me está demostrando más que personas que conozco desde que era pequeña no hace falta decir el nombre todos sabemos de quien hablo.

Oliva:Charles llegó a casa muy enfadado y empezó a romper todo lo que se le puso por delante según Megan no paraba de gritar tu nombre, estaba completamente fuera de sí 

Las lágrimas empiezan a caer de nuevo y el corazón se me encoge hasta el punto de que me duele el pecho, soy tan estupida que en lo único que pienso es que ojalá esté bien y no se haya hecho daño con algo al romperlo.

Soy tan estupida que después de todo tengo ganas de verlo y asegurarme de que esta bien.

Yo:abuela iré yo a por mis cosas

Olivia:no hace falta mandaré a mi asistente personal 

Yo:quiero hacerlo  *le apretó un poco más la mano*

Olivia:iremos ahora mismo si es lo que quieres

Asiento mientras voy a salón para coger mi móvil que está sobre la mesa de la televisión, me pongo las sandalias que llevaba la noche anterior.

Mi abuela le a dicho a su chofer que no hace falta que nos lleve ya que lo hará ella misma así que ahora estoy subida en un coche blanco familiar en vez de en un coche lujoso que suele llevar el chofer.

Me tiemblan las manos a medida que nos vamos acercando al destino y por no hablar de el nudo que tengo en la garganta que hace que apenas pueda respirar.

Olivia:puedes esperar en el coche y yo recogeré tus cosas

Yo:gracias pero debo hacerlo yo misma

Olivia:Maddie cariño estoy muy orgullosa de ti

Las palabras de mi abuela me dan las agallas suficientes para bajar del coche cuando llegamos a la entrada de la mansión....