Mery
Camine por los pasillos de aquella empresa observándo algunos rostros conocidos por las tantas veces que nos hemos encontrado en este mismo pasillo. Entre en la sala en que esperaba a Esme, me sente en el mismo sillón y observe la pared frente a mi, lo cual me hizo recordar la primera vez que entre a este lugar.
* Flashback *
Era la primera vez que entraba a un edificio tan grande - Pensé.
Me encontraba en un lugar que parecía una sala de espera o recepción, muchas personas hiban y venían y yo solo las observaba.
Esperaba a Esme, la cual me había enviado un mensaje diciendo.
- Bajo en diez minutos,espérame ahí.
- Esta bien, no te preocupes.
Al cabo de unos minutos, la observe que venía en mi dirección, me levante de la silla tomando mis cosas, quería irme de este lugar lo más pronto posible, no era desagradable pero estaba aburrida y mi móvil estaba descargandose por lo que no tenía en que entretenerme.
Esme se acercó a mi y noté que estaba empapada de sudor ¿Porqué no se cambió? Me pregunté y luego observe que no traía consigo sus pertenencias.
- Ya, y ¿tus cosas? - Pregunte
- Todavía no podemos irnos, entrenaremos una o dos horas mas, solo tenemos quince minutos de descanso - Dijo pasándose la mano por su cabello.
- Queee - Exclamé con cansancio - Yo tendré que estar todo este tiempo en este lugar - Dije señalando -. Además debo de estar sola y mi móvil esta descargado.
- No, no estarás aquí, hable con Lee Hyung-Do y dijo que puedes esperar en una sala que nadie usa, seguro que ahí hay conectores para que puedas recargar el móvil.
- Esta bien, cambiando de tema ¿Has comido algo?.
- No, no he tenido tiempo.
Por suerte había comprado unos gimpabs y algunas golosinas.
- No te preocupes, compre algo de comida en el camino.
- De verdad, que bien muero de hambre.
- Yo también, vamos a esa sala y ahí comes algo ¿sí? - Dije sonriendo.
Caminamos por el pasillo y yo observaba cada sitio por si me tocaba volver a este lugar no perderme. Lee Hyung-Do nos esperaba, frente a una puerta blanca, supuse que esta era la sala donde esperaría a Esme.
- Hola Mery como has estado - Me saludo Lee Hyung-Do.
Desde que Esme inició siendo aprendiz en esta agencia, he estado pendiente de ella, así que a veces me comunico con Lee Hyung-Do, el se ha encargado de que ella y las otras chicas se concentren en lo que quieren para su futuro y siempre esta animandolas a que sigan con sus entrenamientos, el era un tipo agradable.
- Hola, bien y tu? -. Pregunte siendo informal, el prefería que lo tratara de tú, ya que según el, no era tan viejo como para que lo tratara de usted.
- Bien - Sonrió -. Puedes quedarte aquí a esperar a Esme cuando los ensayos se alarguen. Este lugar nadie lo ocupa, yo a veces lo utilizo para descansar -. Dijo.
- Esta bien -. Le sonreí en forma de agradecimiento.
Entramos a la sala, la cual estaba pintada de color gris, con algunos cuadros decorando la pared , en el centro había una pequeña mesa junto a un sofá, también se encontraban unas cuantas sillas. Nos sentamos en el sofá y le entregue a Esme un poco de comida, ella la comió rápidamente y luego se despidió ya que debía seguir ensayando.
Nuevamente me encontraba sola, recordé que debía de conectar mi móvil antes de que se descargará completamente y lo conecte en el conector más cercano al sofá.
Espere que se cargará al menos al cincuenta por ciento, para poder ver algún drama mientras esperaba.
Llevaba viendo dos capítulos del drama chino Accidentally in love, el drama era muy bonito y divertido, lo que hacía que a veces no pudiera contener la risa y eso era lo que ocurría en este momento ya mi estómago dolía de tanto reír.
Las risas no pararon, hasta que escuche el sonido de la puerta ser cerrada, alce mi vista hacia la puerta y observe a un chico el cual me vio un poco sorprendido.
- ¿Esta ocupado? -.Dijo
- No está ocupado, Puedes pasar -. Le respondí.
Camino tranquilamente hacia el sofá, sentándose en el otro extremo de donde yo me encontraba.
Sentía un poco de vergüenza al recordar que me había encontrado riendo a carcajadas, pero luego de pensarlo bien ¿porque debía sentirme avergonzada? Ni siquiera le conocía. Volteé mi vista hacia el y no pude notar que era realmente atractivo, su cabello era negro, ojos rasgados de color café oscuro y sus labios eran muy bonitos, hiba vestido con un Jersey, pantalones y botas de color negro, mientras le observaba noté que su mano derecha la tenia tatuada.
El me observo, lo noté algo incómodo, me dedico una pequeña sonrisa amable -. El cual me pareció mucho más lindo sonriendo, al igual que el le mostré una pequeña sonrisa.
Un silencio incómodo invadió la pequeña sala, realmente esto es incómodo - pensé - De pronto el me dirigió la palabra.
- ¿Trabajas aquí?
- No, solamente espero a alguien - Respondí. El solamente asintió.
- ¿Tú... trabajas aquí? -. Pregunte informalmente, el se veía casi de mi edad y todavia algunas veces se me escapaba la informalidad y esta era una de esas veces.
- Si -. Respondió.
- Ahh, ya veo -. Dije recordando que no me había presentado todavía -. Por cierto soy América -. Extendiendo mi mano hacia el.
El abrió sus ojos sorprendido -. Sus ojos eran un poco más grandes ahora.
- Ohh, America de América -. Dijo riendo, esta vez mostrando su dentadura, sus dientes eran grandes y alineados.
Note que cuando su sonrisa se amplía completamente, sus ojos se entre cierran.
Asentí y reí un poco ante su comentario.
- Soy Jung kook -. Dijo el estrechando mi mano.
-América, eres Americana? -. Preguntó y noté que se le dificultaba pronunciar mi nombre.
- No, vengo de latinoamerica y me puedes decir Mery, ya que se te dificulta mi nombre completo.