Dreams In korea

Capítulo-35

Al abrir mis ojos estos fueron golpeados por los rayos del sol que entraban  través de la ventana, volteé mi cuerpo y cubrí mi rostro con la manta – Definitivamente necesito comprar unas cortinas – Dije en un susurro. 

La claridad del día no me dejó quedarme por más tiempo en la cama.

Fui directamente al baño, lavé mi rostro y traté de acomodar el desastre que se me veía en el cabello. Volví a la cama y busqué mi cepillo de dientes, pues la comida instantánea por más sabrosa que fuera tendía a darme un mal sabor en la boca cada vez que la comía, me pregunto ¿Qué horas serán?, espere a que mi móvil encendiera y luego fui a lavar mis dientes.

Cuando volví tenía una que otra notificación, faltaban quince minutos para las ocho a.m. – Con razón siento un poco de hambre – Revisé mis notificaciones y nada era de importancia excepto los mensajes del grupo.

- Bien ¿y tu?

- ¿Por qué enviaste un mensaje a esa hora?

- Estaba dormida 

- [¿Por qué enviaste un mensaje a esa hora?] Aquí era temprano y olvidé los horarios.

-Umm, ya veo ¿Cómo has estado?

- No muy bien, necesito contarles muchas cosas que me han pasado últimamente.

- Pero les haré una llamada hoy por la noche para que hablemos ¿está bien?

- ¿Y ustedes como están?

- Si por supuesto, nosotras también tenemos mucho para contarte.

- [¿Y ustedes cómo están?] Estamos muy bien, aunque nos haces mucha falta.

- Rose está ha de estar desconectada por eso no ha visto tus mensajes.

- Me alegro. Yo también las extraño.

- Te dejaré dormir y luego te llamo, para que tengamos una de buena charla.

Finalice la conversación y salí de la habitación, mis ojos se sentían aún pesados, di un largo bostezo y camine por el pasillo hasta llegar a la cocina. Aún estaban las bolsas que había traído anoche sobre la encimera.

Me quedé por unos segundos mirando hacia el frente sin un punto fijo, sin pensar en nada. Luego de unos segundos mi cerebro volvió a procesar y voltee a mi alrededor. El lugar estaba exactamente al igual que ayer, lo último que recuerdo fue haberme quedado dormida en el piso y luego ser despertada por Tae-Hyung.

¿Qué habrá pasado?

Ayer por la noche estaba más dormida que despierta, tanto que me importó muy poco lo que el hubiese pensado de mi, en ese momento.

Nota mental: Siempre ir a dormir a la habitación sin importar si el lugar está delicioso o no.

Ahora la pregunta más importante es ¿Qué voy a desayunar?

A estas horas de la mañana Tae ha de estar en su quinto sueño y no debe tener planeado despertar antes de las diez u once de la mañana. Además según tengo entendido la mayoría de coreanos no desayunan y yo no tengo nada de ganas de esperar hasta el almuerzo. Rara vez me saltó el desayuno y si lo hago es porque tengo alguna preocupación o talvez me sienta enferma, pero ni aún así siempre trato de tener algo en el estómago.

¿La razón de eso? Temo que si no tengo algo en el estómago me pueda desmayar en cualquier momento. Desde pequeña mi madre me dijo que si no desayunaba me desmayaría en pleno colegio. Me pregunto si habrán más niños creciendo con el mismo temor a causa de esto.

Recorrí nuevamente las misma calles por las que había pasado la noche anterior hasta llegar nuevamente a la tienda de conveniencia. Ya era tarde así que la chica ARMY ya no estaba de turno. Busque un paquetito de café instantáneo y lo tome, pero de inmediato lo devolví a su lugar cuando mis ojos se percataron de que en la nevera había jugo de naranja el cual era mejor que la cafeína, nuevamente me aseguré de comprar lo necesario para dos personas.

Cancelé en la caja, la cual era ocupada ahora por un hombre mayor, le saludé amablemente y me despedí agradeciéndole su servicio.

Al volver al departamento guarde el jugo en la nevera y saqué la bolsa de pan para luego colocarlos en la tostadora.

Luego de unos minutos mi desayuno estaba listo. Pan tostado cubierto de crema, del cual me tuve que hacer unos cinco para poder sentirme satisfecha y un delicioso jugo de naranja.

Eran casi las diez de la mañana y como sospeché Tae aún no despertaba. No tenía nada que hacer y no podía encender la TV porque haría demasiado ruido y podría despertarlo, así que fui a mi habitación a tomar un baño.

Después de tomar una ducha me cambié con la ropa que había traído el día anterior y salí en busca del cargador de mi móvil. 

Probablemente se encuentra en la sala, porque ayer solo llevé a la habitación mi móvil.

Me acerqué al conector y el cargador no se encontraba, revise rápidamente con la mirada los lugares cercanos y no se encontraba ¿Dónde lo puede haber dejado? 

– ¿Que buscas? – Escuche la voz tras de mí.

Di un pequeño respingo del susto y luego me giré para encontrarme con sus ojos cafés lo cuales me veían fijamente. Traía su cabello desordenado y su rostro se veía adormilado pero aún así se veía lindo. Vestía una pijama de color azul y sostenía en su mano una botella de agua.

El aún me miraba esperando una respuesta a su pregunta - ¡Ohh! Mi cargador – Respondí luego de haber guardado silencio y procesado su pregunta, eleve mi móvil y el pareció entender de lo que le hablaba. 

– Esta en aquel mueble – Me señalo un mueble caoba que se encontraba cerca del sofá.

Asentí y me dirigí a tomarlo. Mis hojas y mi cuaderno de dibujos se encontraba a un lado junto con mis plumas y pinceles. No recuerdo haberlos dejado ahí, así que el debió levantarlos del piso y dejarlos ahí. Tome todas mis cosas y me dirigí a mi habitación. 

– Gracias – Dije al pasar junto a el.

Me prometí actuar normal, pero esto será una tarea difícil, con solo ver su rostro los recuerdos venían a mí y no solo eso sino también un extraño sentimiento de incomodidad acompañado de un poco de timidez.



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En el texto hay: taehyung, bts, btsfanfic

Editado: 19.03.2021

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