Sencillamente la primavera hermosea los cantos audaces de los pajaritos, mientras juntando las piedritas dulces del invierno voy dejando hoy los miedos.
Un frío Sol y una cálida Luna brindan por los deseos por cumplir.
Porque no todo es como se supone que sea, y la vida nos trae sorpresas.
Lo aparente es falso, y las verdades no se ocultan por mucho.
Entrando en esa incertidumbre de sensaciones, es que yo me voy moviendo sin causa ni veneno, porque grandes flores han de nacer y dar vida a dichosas sonrisas de pureza, liberando así espectros gélidos del pasado, transmutándolos en diminutos cuarzos destellantes.