Dulce atracción

Invitación.

Danilo

Desde la mención de su nombre no he dejado de pensar en ella y en los hermosos momentos a su lado. Quiero decirme a mí mismo y a todos los demás que la he superado pero presiento que no es así.

Ella fue la única niña que ha llegado a mi corazón, suena muy de niña de mi parte, lo sé, pero cada hombre tiene una mujer que lo deja marcado y yo no fui la excepción con semejante belleza, no por su físico sino por su cautivadora personalidad.

Recuerdo sus ojos, sus labios, su olor, todo lo llevo grabado en mi mente como si nunca se hubiese ido, su cabello parecía un torbellino, una maraña de pelo color castaño, su olor a flores exquisito, como me gustaría volver a verla. Agarro uno de los álbumes que ella me regaló y es como si me transportará cinco años atrás.

—Dani eres muy especial para mí, cariño quiero que siempre seas mi amigo, mi confidente, te quiero con todas mis fuerzas y quiero que sepas que me encanta ver cómo te sonrojas al abrazarnos —me quedé hechizado con sus hermosos ojitos grises, su dulce voz; para mí era como una adicción.

Se inclinó un poco hacia mi hasta que se juntaran nuestros labios con dulzura, me impregne de su sabor a chocolate, ella dio un tirón a mi labio inferior. Esa era la primera vez que nos besamos y fue la mejor de mi vida. De nuestras vidas, ese fue nuestro primer y único beso.

—Te quiero Tatiana Reilly, ya no puedo ocultar esto que siento, sé que somos niños pero también sé que nuestro amor es puro y verdadero, te quiero te adoro, eres mi dulce adicción. Me encanta tu piel morenita, tu melena, me encanta todo de mi dulce princesa.

Nos abrazamos como si nunca más nos fuésemos a ver y qué razón teníamos después de ese día cambió todo para nosotros.

No volví a saber nada de ella, como deseo volverla a ver. Inicio sesión en Facebook, busco en el perfil de Aki una foto de Tatiana reciente. Luego de varios segundos localizo una de hace tres meses, que guapa está mi morenita, una sonrisa tonta se dibuja en mi rostro recordando como le decía: mi dulce adicción.

«Princesa como me gustaría volver a verte, saber algo de ti» Pienso para mis adentros.

No sé en qué momento de la noche me quedé dormido, pero me desierto por el estruendo de mi celular, sin revisar quién es contesto.

—Aló —digo más dormido que despierto.

—Danilo, tengo una noticia que sé que te va a gustar o bueno eso creo. Pero primero tienes que prometerme no decirle nada ni a Cassie ni a Akira, si no me van a matar y soy muy joven para morir —Escucho la risa del cabrón al otro lado de la línea. Con laano libre estrujo el ojo izquierdo.

—¿De qué se trata? —pregunto soltando un bostezo.

—Tatiana vuelve a la Marmapolis, anoche hablé con Akira —Eh... Me quedo en blanco, el sueño se me termina de quitar y no sé ni qué responderle a mi amigo—. Despierta hombre, te estoy diciendo que tu chica vuelve a la isla.

—No me lo puedo creer —termino diciendo.

Me lo tenían oculto, entonces cuando escuché el «Tati» no fue mi imaginación. No sé si sentirme feliz o triste. No puedo creer que vuelva a la isla, mi dulce adicción; después de tanto tiempo vuelve. Como extraño su presencia, siento un nudo en la garganta, no sé cómo ella reaccionará a mi presencia ¿me habrá superado? ¿Me olvidó como lo prometimos?

Con miles de preguntas me vuelvo a dormir ansioso por saber más de Tatiana.

 

Cassie Beckham.

Martes, 20 de junio de 2023.

No he querido mencionarle nada a Dani por miedo a como vaya reaccionar. Sé que será todo una sorpresa para él, el primer amor no se olvida así de fácil —o eso dicen mis libros—, el todavía la quiere y ella a él. Desde que Tatiana se fue, Danilo quedó muy deprimido, aunque siempre estuviese como si no pasase nada, pero por dentro tenía una guerra con él mismo.

No estuve de acuerdo con su promesa, pero eso fue lo que ellos decidieron, amo a mi amigo Danilos como se ama a un hermano y me preocupa. Él no ha tenido unas relaciones muy sanas que digamos, pero respeto su vida.

Estoy emocionada por el regreso de Tati, mi vieja amiga. Ambas tenemos algo en común, los libros, somos amantes de ellos, nos fascina sumergirnos en mundos distintos como la ciudad de las bestias, cazadores de sombras, Crepúsculo, prohibido enamorarse de Adam Walker, nos enamora todo eso y por supuesto no podía faltar Harry Potter.

Estoy con Carol en mi habitación, mi hermana camina de un lado para el otro como es de esperarse cuando tiene algo que contar.

—Cas, tengo que decirte algo pero eso sí, que quede entre nosotras —le doy una mirada de pocos amigos, sabe que no diré nada.

—Sí, Carol. ¿qué pasa? ¿Alguna aventura con tu nuevo amiguito?

Mi hermana me mira con mala cara, a lo que yo suelto una carcajada.

—No seas así, yo vivo mi vida a plena libertad, tú te la pasas encerradas en estas cuatro paredes y en tus libros románticos, no es que tenga algo contra ellos, los amo, pero también hay que vivir. Cada cosa debe tener su tiempo.

—Salió tu vena filosófica.

—No es mi vena filosófica, es así —se queda en silencio por varios segundos, pero luego parece recordar algo—. Ajá picarona ayer me di cuenta de ciertas cositas, ¿qué pasa entre tú y el amigo de Dani?




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.