Dulce atracción

Arpía

Sábado, 8 de julio de 2023.

Dimitri Alves.

—Dim, ¿Te parece si vamos al cine? —bostezo con sueño todavía. Miro a Flora entrecerrando los ojos. ¿Qué hace en mi habitación tan temprano?

Vuelvo a bostezar. Joder, que sueño tengo. La noche anterior me quedé hasta bien entrada la madrugada hablando con mi chica por la Webcam.

—¡Dim!

Recuerdo algo y niego.

—No, Flora. Hoy no puedo —me mira a la espera de una explicación. Pongo los ojos en blanco—. Tengo una cena con la familia de Cassie y después tenemos una fiesta de uno de los compañeros de Dan. Así que no podremos ir, vamos a dejarlo para mañana o el lunes.

Mi prima asiente y sale de mi habitación. Me levanto, voy al baño, lavo mi cara y hago mis necesidades. Bajo a buscar el desayuno. En la cocina me encuentro con mis abuelos y hablamos durante un buen rato. Mi abuelo Arturo se despide porque va al mercado. Veo a la abuela sacar aliños del refri.

—¿Tan temprano vas a comenzar hacer el almuerzo? —le recrimino. No son ni las ocho de la mañana para que esté picando los aliños.

—Mi niño, no te pongas así. Además, tenemos visitas.

—¿Visitas? —le pregunto, confundido. No vi a nadie en la sala.

—Sí, cariño. Tú prima Flora está con Akira en su habitación.

¿Akira?

No pregunto más nada y subo a la habitación de mi prima. ¿Será por eso que estuvo tan temprano en mi habitación?

Llego al piso de arriba, camino hasta su puerta que está entreabierta. La imagen que veo me deja... Anonadado.

Estoy un poco aturdido o vi mal, puedo jurar que vi a Aki muy... ¿cariñosa? Con mi prima Flora. No sé si es mi imaginación, pero entre ellas se nota un acercamiento más que el de una vecina.

Las sigo viendo y me quedo de piedra.

Veo como Flora se inclina para besar a Akira, todavía en mi estupor pienso que va a besarla en la mejilla, pero no... mi sorpresa fue mayúscula al notar donde ha parado ese beso.

Las amigas o vecinas no se besan en las comisuras de los labios. ¿Desde cuándo empezó esto? ¿o desde cuando tienen tanta confianza?

Flora voltea hacia la puerta, notan mi presencia y comienzan a actuar de una manera extraña. En este mismo instante se prende una alerta en mí.

Saludo a Akira con un cabeceo y voy a mí habitación pensando y uniendo el rompecabezas que es la morena. Ahora algunas cosas tienen sentido...

Claro, por eso Akira la he visto cerca de la casa estos dos días... ¿Serán pareja o es sólo para pasar el rato?

¿Desde cuándo son bisexuales? ¿o siempre han sido homosexuales?

¿Es éste el motivo del cambio de Akira?

Tengo tantas preguntas y para ninguna tengo respuestas. Aunque hay algo que no me cuadra, ¿Por qué se los esconde a sus mejores amigos? ¿Akira se avergüenza de si misma? A lo menos es por eso que actúa de esa manera, así tiene un poco más de lógica.

Escucho pasos en el pasillo y salgo. No voy a desaprovechar la oportunidad que hablar con ella, y antes de que la morena se vaya, la invito a dar un paseo por el vecindario, para poder hablar tranquilos. Mi prima me ve un poco recelosa, levanto mis cejas y Flora huye de mi mirada. Cosa que es totalmente anormal en ella.

Ya una vez que empezamos caminar, noto la tensión en su cuerpo, veo que nadie nos siga y no esté al alcance de escuchar lo que tengo que hablar con mi amiga, aunque la conozco de muy poco tiempo, es mi amiga y me tiene acojonado su situación.

—Aki, ahora que estamos solos, ¿me puedes decir que te ocurre? Yo no voy a tildarte ni mucho menos a juzgarte, eres mi amiga y por eso me preocupa tu actitud, y no sólo a mí, sino también a los chicos —la veo fijamente y puedo notar como su labio inferior empieza a temblar—. Sé lo que te sucede, sólo quiero que me lo digas, ¿te avergüenzas de ti? Si es así, ¿por qué? Cada quién es digno de ser quién es sin importar lo que digan los demás. El hecho de que alguien sea homosexual, bisexual o transexual; no los hace ni más ni menos que un heterosexual. ¿Tienes temor de lo que puedan decir? —la cuestiona, sus ojos me dicen todo lo que con palabras no lo hace—. A la mierda la gente que sólo está para juzgarte y criticarte. Lo importante es que tus seres queridos te apoyemos y que siempre te sepamos comprender.

Respira... Respira... Y vuelve hacerlo para finalmente decir:

—Dim es un golpe muy duro para mí, de repente un día me despierto y siento que no sólo me gustan los chicos, sino también las chicas. Y peor aún, esa chica es mi vecina y prima tuya —lágrimas recorren las mejillas de Akira. No me gusta ver a las mujeres llorando, ella no es la excepción. Porque no es la Akira que conocí, de verdad esta situación tiene vulnerable a la morena—. Hoy en día vivimos en una sociedad que por cualquier cosa que hagas te tildan, sin ponerse a pensar el daño que causan a la persona que señalan —Inhala, exhala—. Yo no quiero estar de boca en boca, eso daña mi reputación, la lengua es muy venenosa y hay personas que la tienen picosa.

La estrecho entre mis brazos, para darle brindarle todo mi apoyo, soy una de esas personas que está en contra de la homofobia, eso sí es una enfermedad.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.