Dulce Cuento Princesa

Capitulo 5- Cabello Dorado

Narracion°

Alysa trenzaba con cuidado su cabello de una joven parecida a ella, cabello y ojos plateados, la cual fue vestida con mucho cuidado.

La joven se inclinó ante Alysa, que tomo una tiara que la sirvienta sostenía, poniéndolo en la cabeza de la joven.

-Segunda Princesa Agatha Del Reino Athanatos hoy celebramos su debut, y nombramiento de Gran Archi Duquesa.

Alysa vio como Agatha, su hermana, se retiraba junto a su tía Cristel, para poco después cerrarse las puertas.

Era tarde en la noche cuando la puerta se abrió.

-Princesa Benazir- dijo Alysa a una niña de cabello y ojos plateados.

-Hermana- Alysa estaba parada viendo la ventana con un vestido grisáceo de bordado plateado y elegante.

-¿No fuiste a la fiesta?- Pregunto Alysa.

-Estaba ahí, pero pero , Jack

-¿El príncipe de Heraldi?

-Me dijo que... me dijo que... no se bailar

-Bailaste con el- dijo Alysa.

-Siii aunque practique mucho con la Condesa Ebano, lo pise...- dijo Benazir.

-¿Entonces quieres bailar conmigo Princesa Benazir?- pregunto Alysa.

-Siii

Sin música, y con la risa de la princesa Benazir bailaron.

Más tarde en la noche, Benazir fue preparada para dormir.

-Puedes contarme un cuento- pregunto Benazir.

Aunque Benazir cumpliría 10 años, venía con sus hermanos a Alysa con la excusa de acompañarlos a escuchar sus historias.

-Te contaré del "Cabello Dorado"

Alisa se sentó al borde de la cama.

-Érase una vez...

 

Un leñador que vivía con su única hija en lo profundo del bosque.

Su hija trabajaba con las mujeres con el hollín.

Su cabello y cara estaban llenos de hollín.

Su padre enterado de la fiesta que se celebraría en la casa del Señor, pensó en enviar a su hija.

Del cajón que perteneció a su difunta mujer saco un precioso y antiguo vestido.

La hija del leñador, sorprendida, coció el vestido para que se ajustara a su cuerpo.

Las compañeras de trabajo le enseñaron a Bailar, varias de ellas asistirían a la fiesta.

Noche tras noche, cosía el vestido.

El día de la fiesta, se lavó el hollín y la suciedad.

Dejando ver su cabello dorado.

Su padre, el leñador al verla, vio a su esposa en ella.

Subieron a su vieja carreta hacia el castillo.

Ambos entraron, se presentaron ante los señores del castillo, todos estaban deslumbrados por la belleza de la joven.

Un hombre joven se le acercó y la invito a bailar.

Después de bailar, ambos jóvenes se despidieron.

Desde entonces el hombre joven todos los días visitaba a la joven en la fábrica de hollín, acompañándola a casa.

Un día vino a pedir la mano de la joven.

El leñador corto gran cantidad de árboles para la boda.

La fiesta se hizo a lo grande en esas tierras.

Ambos jóvenes bailaron toda la noche, donde el Leñador no dejaba de derramar lágrimas al ver a su querida hija feliz.

 

Alysa se calló después de contar la historia.

-Entonces como acabaría la historia hermana- pregunto Benazir.

-¿No lo dije?

-No, no de esa forma- volvió a insistir Benazir.

Alisa se quedó pensando un momento.

-Entonces… ambos vivieron felices por siempre- concluyo Alysa.

Benazir sonrió para después dormir.

Alysa se acercó a la gran ventana.

Miro al horizonte y dijo extendiendo su mano en la fría ventana.

-¿Entonces vivieron felices por siempre?

 

 

GRACIAS POR LEER

NOS VEMOS PRONTO




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