Dulce Obsesión: Entre Sombras y Destellos

Capítulo 10: La Máscara se Desmorona

Cuando Zack se acercó al grupo donde Ethan estaba conversando, pudo sentir inmediatamente un cambio en la energía. Las sonrisas parecían más forzadas, las risas más cargadas de algo que no terminaba de identificar.

"Ahí estás," dijo Ethan, acercándose a él con lo que parecía alivio genuino. "¿Dónde te habías metido? ¿Estás bien?"

"Sí, estoy bien," respondió Zack, aunque la interacción con Mark lo había dejado más desestabilizado de lo que quería admitir. "Solo necesitaba algo de beber."

"Perfecto." Ethan le puso una mano en la parte baja de la espalda, un gesto protector que inmediatamente hizo que Zack se sintiera más centrado. "Déjame presentarte apropiadamente."

Se volvió hacia el grupo: tres chicos y dos chicas que irradiaban ese tipo de confianza casual que venía de nunca haber cuestionado su lugar en la jerarquía social.

"Chicos, este es Zack," anunció Ethan. "Zack, estos son Connor, Madison, Tyler, Ashley y Ben."

Un coro de "mucho gusto" y sonrisas que no llegaban completamente a los ojos siguió a las presentaciones.

"¿Es tu primera fiesta con nosotros?" preguntó Madison, una chica rubia que parecía evaluar a Zack como si fuera un espécimen interesante en un laboratorio.

"Sí," admitió Zack, sintiéndose repentinamente expuesto. "Gracias por permitirme ser parte de su grupo."

El silencio que siguió fue extraño, cargado de algo que Zack no pudo identificar inmediatamente. Entonces Tyler comenzó a reír, seguido por los otros hasta que todo el grupo estaba riéndose de una manera que definitivamente no se sentía amigable.

"Dios, qué gracioso," dijo Ashley, limpiándose una lágrima imaginaria del ojo. "¿Acaso no te has dado cuenta, o finges no notarlo?"

Zack sintió como si el suelo se moviera bajo sus pies. "¿Darme cuenta de qué?"

Ethan intervino rápidamente, su expresión volviéndose tensa. "Chicos, ya basta"

"Ya deberías decirle", interrumpió Connor, con una sonrisa que era pura crueldad. "Se le está subiendo que puede ser uno de nosotros."

"¿De qué están hablando?" La voz de Zack salió más pequeña de lo que había pretendido.

Ethan cerró los ojos por un momento, y cuando los abrió, Zack pudo ver algo que parecía genuino arrepentimiento.

"La verdad es que... no pensé que esto llegaría tan lejos."

"¿Por qué no le dices que todo fue un reto?" preguntó Ben, cruzando los brazos con evidente diversión.

Las palabras golpearon a Zack como un puñetazo físico. "¿Un... reto?"

El mundo se inclinó peligrosamente. Todo el oxígeno parecía haber sido succionado del aire, dejándolo luchar por respirar mientras procesaba las implicaciones de lo que había escuchado.

"¿En verdad creías que un chico como Ethan se fijaría en alguien como tú?" Madison se rio, un sonido que cortó a través del alma de Zack como cristal roto. "Dios, qué patético."

Zack se quedó paralizado, mirando entre las caras que lo rodeaban, buscando desesperadamente alguna señal de que esto era una broma cruel, que alguien iba a empezar a reír y decir que solo estaban jugando.

Pero cuando miró a Ethan, vio solo culpa escrita en cada línea de su rostro.

"Zack, yo—" comenzó Ethan, extendiendo una mano hacia él.

"¿Todo fue mentira?" Las palabras salieron como un susurro roto.

Ethan no respondió, pero su silencio fue respuesta suficiente.

"Muy bien, lindo. Tú ganas."

La voz vino de detrás del grupo, y todos se giraron para ver a Mark acercándose con una expresión que Zack nunca había visto antes: frialdad pura y calculada.

"Los engañaste a todos," continuó Mark, dirigiéndose directamente a Zack con una sonrisa que parecía completamente genuina.

"¿Mark?" Ethan se tensó inmediatamente. "¿Qué haces aquí? ¿De qué estás hablando?"

Mark se encogió de hombros casualmente. "Habíamos hecho una apuesta, Zack y yo. Le dije que podría hacer creer a Ethan que le interesaba, solo para volverse popular." Se volvió hacia Ethan con una sonrisa que no llegaba a sus ojos. "Y funcionó perfectamente."

"¿Qué?" La voz de Ethan salió estrangulada.

Zack, que había estado perdido en un torbellino de dolor y humillación, de repente escuchó las palabras de Mark como si fueran un salvavidas lanzado en medio de una tormenta. Sin comprender completamente lo que estaba haciendo, asintió.

"Exacto," murmuró, su voz apenas audible. "Todo era... todo era mentira."

Mark añadió con satisfacción aparente: "Y lo logró. Completamente."

Ethan le dirigió una mirada desafiante a Mark, pero había algo más que irritación en sus ojos. Había una comprensión, una realización de que había sido superado en su propio juego.

Mark le devolvió la mirada con un gesto que claramente comunicaba: acepta que perdiste.

Pero Zack, procesando la "salvación" que Mark le había ofrecido, se sintió simultáneamente agradecido y más roto que antes. Porque incluso si la historia de Mark era una mentira diseñada para salvar su dignidad, la verdad seguía siendo que tanto Ethan como Mark lo habían visto como algo que podía ser usado.

"Me voy," anunció de repente, su voz más firme de lo que se sentía.

Se dirigió hacia la salida sin mirar atrás, dejando atrás un silencio tenso y un grupo de personas que de repente se daban cuenta de que habían sido testigos de algo mucho más complejo de lo que habían planeado.

Mark se volvió hacia el grupo, pero especialmente hacia Ethan, y su expresión se enfrió hasta convertirse en algo genuinamente aterrador.

"Si alguna vez," dijo con una voz que era silencio peligroso, "vuelven a lastimarlo, los haré arrepentirse por el resto de sus vidas."

Sus ojos se movieron por cada rostro, memorizando cada detalle.

"Y saben que puedo hacerlo."

Se dio la vuelta para irse, pero sintió una mano en su hombro.

"Oye," la voz de Ethan lo detuvo.

Mark se giró lentamente, y la expresión en su rostro habría hecho que una persona más inteligente retirara la mano inmediatamente.




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