Dulce perfección

CAPÍTULO 6

BEN

 

Enero, 2015

 

Katherine se fue. No he podido dormir desde ese día, todas las noches me quedo despierto solo pensando en la noche del accidente y cómo todo fue sucedió en cuestión de segundos. ¡Se ha ido, maldita sea! Un minuto estaba aquí con nosotros, en mi casa, escuchando su canción y al otro...

Alex sabía que algo malo iba a pasar y todo esa noche fue tan diferente de lo normal. Incluso el ambiente se sentía insoportablemente serio, tal vez porque sabíamos que la dejamos ir sola conduciendo a Henderson. Se suponía que ese concierto en Blackout iba a ser especial, íbamos a interpretar nuestra canción original por primera vez para un público considerable.

 

—Hey, hola a todos. Somos The Last Train y vamos a presentar esta nueva canción titulada Nevada girl, dedicada a mi dulce novia Katherine. Espero que la disfruten.

 

Travis marcó la entrada golpeando sus baquetas. Ensayamos la canción un par de veces antes de presentar pero ahora, sabiendo que Katherine está yendo a ver a su abuela, acordarme de la letra y notas de una canción totalmente nueva para nosotros está siendo más complicado de lo normal. Sin embargo, lo estábamos logrando. Cantaba y de vez en cuando echaba un vistazo a mis manos en las cuerdas, siguiendo el riff que establecí para esta canción mismo que se acompañaba de la guitarra de Alex, a quien dejé de escuchar de un momento a otro. Su sonido desapareció así como él lo había hecho del escenario.

Volteé a ver a Luke y con la mirada me dio a entender que él intentaría salvar todo con un poco de improvisación que pasó desapercibida entre el público hasta que terminó la canción.

En medio de aplausos y unos cuantos gritos y silbidos, no pude evitar sonreír. Todo había salido como lo esperaba, la canción pudo salir casi perfecta de no ser porque Alex arruinó su parte. Ya ni siquiera regresó al escenario con nosotros, ahora está tras bambalinas sosteniendo su celular. Quería saber de qué mierda se trataba, él no suele abandonar el escenario de esa forma y mucho menos a mitad de una canción.

Me volví hacia Luke, tal vez él sabía algo pero estaba tan desconcertado como Travis. Cuando estuvimos dispuestos a abandonar el escenario como él, Dylan interrumpió nuestros planes, me tomó por el hombro y se acercó al micrófono.

 

—¡The Last Train! ¿Les gustó?

 

Un gran conjunto de personas afirmó su gusto por la presentación mediante gritos y gestos, por supuesto que les gustó.

 

—Ben, hay una petición. —Susurra Dylan—. Quieren que toques una canción especial.

—¿Cuál?

Good Riddance. Ya sabes, Green Day. Él quiere que lo hagas solo. Lo manda pedir Jason para Molly.

 

No tuve otra opción, no pude moverme de ahí, Dylan me llevó una guitarra acústica que pertenecía al club, diciéndome que ya estaba afinada y que lo único que tenía que hacer era poner básicamente era mi presencia para darle vida a esa canción y así fue. No tenía idea quien era Jason y mucho menos Molly, tampoco conocía la razón por la cual eligió precisamente esta canción. Por lo que una vez leí, no se trata de despedidas en graduaciones, ¿quizás Molly pensaba en mudarse? Como la ex novia del front-man de Green Day y tal vez por eso le dedicaba esta canción. Aunque a lo mejor no era lo que imaginaba, quería figurar una situación en la cual Good Riddance encajara aun sabiendo que mis teorías podrían ser un 80% erróneas.

 

—Espero que hayan disfrutado de esta asombrosa canción de Green Day, The Last Train vuelve en un momento. —Anuncio antes de que Dylan cambie mis planes—. Disfruten de Tommy.

 

Salgo del escenario y me deshago de la guitarra, la dejo justo a un lado del amplificador que recién había llegado a Blackout y voy hacia mis amigos. Alex estaba sentado en una caja, sus ojos marrones estaban empañados por las lágrimas, no lo entiendo, ¿qué diablos pasó? Y cuando Luke me vio, puso su brazo alrededor de mis hombros y trató de llevarme lo más lejos posible del escenario. Por alguna extraña razón, desde que comencé a tocar Good Riddance sentí muy dentro de mí que algo andaba mal y ahora sé que me están ocultando algo por la forma en que me miran.

¿Sera qué...?

 

—Ben, tienes que tomar esto con calma. —Travis fue el único que tuvo valor suficiente para decirme lo que estaba pasando—. Tenemos que ir al hospital, Kat Kat tuvo un accidente. La están trasladando al hospital más cercano en Yermo.

—¡¿Está muerta?!

—No, no lo está. —Responde Alex, con la voz glacial—. Por lo menos eso es lo que yo sé.

—¡Tenemos que ir a Yermo ahora!

—Ya llamé a mi padre. —Luke intenta tranquilizarme, es imposible—. Pero estaremos en Yermo en dos horas si no hay tráfico.

—¡Maldita sea! ¿Y tuvieron que esperar hasta ahora para decirme?

 

Sin importarme absolutamente nada, salí del establecimiento. Me sentía impotente, ¡maldita sea! ¿Por qué justamente a Katherine? ¿Por qué habiendo tantas personas en el maldito mundo tuvo que ser ella? ¡¿Por qué?! Si tan solo hubiera ido con ella quizás las cosas hubieran sido diferentes.



#413 en Joven Adulto
#5091 en Novela romántica

En el texto hay: musica, ballet, romance

Editado: 21.10.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.