Dulce perfección

CAPÍTULO 10

BEN

 

Enero, 2016

 

Desperté en medio de la noche. El sudor recorría mi frente y un escalofrío vagaba por todo mi cuerpo, me había quedado dormido en el sofá cuando intentaba escribir una canción, he tenido pesadillas de nuevo, tal vez venir a este lugar sigue siendo una mala idea. No podía evitar pensar en Katherine estando aquí. Había sido este lugar en dónde pasamos los últimos momentos, antes de que decidiera ir a Henderson.

 

—¿De nuevo hundido en la depresión?

—No. —Mantengo mí vista en mis pies, los cuales están cubiertos por un par de coloridos calcetines que me regaló Anna la navidad pasada—. Estaba teniendo un mal sueño. ¿Qué haces aquí Sam?

—Pensaba dormir aquí, en el sofá. 

 

Finalmente dirijo la vista hacia mi hermano. Él tenía unas cuantas heridas en el rostro, supongo que estaba lleno de laceraciones por todo el cuerpo por su forma de mantenerse en pie. Llevaba la camiseta blanca manchada con su propia sangre, o por lo menos, eso quería suponer.

 

—¿De nuevo te peleaste? —Cuestiono—. Mamá te va a matar.

—No me peleé y no es necesario que me recuerdes porque me quiero esconder aquí. Tuve un accidente en la motocicleta, los frenos fallaron. —Explica sin entrar en detalles, sentándose por fin en el último peldaño de la escalera—. Si mi mamá o Anna me ven así, me obligarán a deshacerme de la moto y eso es algo que no quiero hacer.

—¿Qué piensas hacer? Cualquiera de las dos va a estar al pendiente de lo que pase contigo, ¿acaso no te han llamado para saber en dónde estás?

—Si. Les he dicho que me he quedado en el trabajo porque tenía que revisar parte del inventario. Pero no pueden verme así, así que pienso quedarme aquí hasta que ambas se vayan a trabajar, me reportaré como enfermo al trabajo y a ti más te vale que no vayas con Anna a decir que está pasando conmigo.

 

Prometí no decir nada. Fui a la habitación a buscar un par de cobijas para Samuel intentando mantenerme cauteloso para no despertar a ninguna de las dos. El sótano sólo era visitado por mí y por mis amigos, tal vez por eso mi hermano buscó escondite en ese lugar. La razón por la que decidí ayudarlo se resume en que él me cubrió muchas veces cuando me peleaba en algunos pubs estando bajo los efectos del alcohol, gracias a él pasaba desapercibido con mamá y con Anna, se lo debía.

Así que por la mañana cuando mamá preguntó por él, le dije que había llegado tarde y que se había levantado temprano porque surgieron problemas en la tienda. Lo había cubierto. Ahora, él tenía que buscar la forma de deshacerse de sus múltiples rasguños, por lo menos los de su rostro y no levantar sospecha alguna con mi hermana especialmente.

 

—Ben, ¿ya pensaste en lo que te propuse? —Anna llama mi atención durante el desayuno—. ¿Hablaste con tus amigos?

—Travis dice que nuestra música no es apropiada para un hospital. No queremos que tengas algún tipo de sanción por ello.

—Van a tocar para personas que en su mayoría son jóvenes, no les van a provocar un paro cardiaco o algo, exagerados. Piensa en lo mucho que a papá y a Kat les gustaría que realizaras este tipo de acciones.

 

A veces odiaba que Anna me conociera tan bien como para que me comprara diciendo eso, ahora necesitaba convencer a mis amigos de tocar en el hospital como le prometí a Anna que  lo haríamos. Así que traje de nuevo ese tema de conversación cuando ensayamos en el sótano.

 

—Así que, ¿están conmigo en esto?

—¿Sobre tocar en el hospital? ¿No crees que es demasiado? Digo, el tipo de música que tocamos no es... apropiado. Ellos esperan una boyband como One Direction, y no somos como ellos. —Luke dice, recostado sobre el sofá con el bajo sobre su pecho.

—¡Vamos! Ya le dije que sí lo vamos a hacer.

—Siempre haces conciertos como solista en el hospital, ¿por qué no lo haces solo otra vez? —Alex comenta.

—Porque Anna solicitó a The Last Train, con sus cuatro integrantes. Y... Nos van a pagar.

—De acuerdo, estoy contigo. ¿Ustedes no? —Travis alza la mano, Luke y Alex imitan su acción, todo esto del pago es una mentira en la que me acabo de meter.

 

Los chicos finalmente aceptaron, practicamos una hora más y después ellos se fueron, ahora tengo que ver cómo voy a pagarles por tocar conmigo.

 

Los chicos finalmente aceptaron, practicamos una hora más y después ellos se fueron, ahora tengo que ver cómo voy a pagarles por tocar conmigo        




Cuando el día llegó, armamos nuestro setlist unos cuantos minutos antes de que comenzara el concierto. Me preocupa un poco que no hayamos hablando de las canciones que vamos a tocar ayer, ¿por qué siempre dejamos el setlist al último?

 



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En el texto hay: musica, ballet, romance

Editado: 21.10.2020

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