IRINA
Febrero, 2017
Cumplí mi primer mes en la compañía y durante este tiempo todo había sido una completa locura. No sabía que me encontraría bajo tanta presión, vivía una relación combinada entre la pasión que tengo por la danza y el estrés que produce estar en las grandes ligas, pero lo seguía disfrutando tanto como el primer día.
Era una experiencia única, conocer a tantas chicas que venían de otros estados y países a formar parte del mismo sueño que tenía era simplemente increíble.
—¿Tienes tiempo? —Cuestiona Marcus interceptándome en el corredor—. Tengo ganas de salir a cenar pero no tengo con quien ir.
—Conmigo no será, mi papá llegó ayer y al parecer quiere que pasemos tiempo juntos.
—¿No crees que tu papá ya está viniendo más seguido?
—Sí, porque quiere pasar tiempo conmigo. —Aseguro—. Debe ser eso.
Marcus me sonríe pícaramente, ya me había comentado que tal vez mi papá estaba aquí por una razón que lleva por nombre Lisa Martin.
—¡Te juro que no están juntos! Sólo, son más amigables por mí. Apoyan mi carrera y eso es genial.
—De acuerdo, no diré nada más.
—Bien, te veo después.
Me despedí de Marcus y abandoné el edificio, dispuesta a ir a casa. Quería aprovechar que hoy salimos temprano para descansar un poco, las piernas me dolían y quería remojar mis pies en agua helada, mi cuerpo comenzaba a resentir las arduas horas de trabajo a las que no estaba acostumbrada del todo. Sin embargo, mis ganas de estar ahí pueden más que el cansancio que sentía cada que abandonaba el estudio.
[...]
—Lo lamento Ben, estaba en el estudio. ¿Ocurre algo?
—No simplemente… Quería escuchar tu voz.
—¿Cómo has estado? Lamento no haber llamado anoche, llegué muy cansada y me dormí en cuanto puse un pie en mi habitación.
—¿Todo bien en la compañía?
—Sí, pero dejemos de hablar de mí. ¿Cómo te fue en el estudio de grabación?
Entré al edificio sosteniendo aún el teléfono, saludando a un par de vecinos que me encontré en la entrada y fui directo hacia las escaleras, escuchando la historia de Ben.
—Fue muy divertido y muy tenso a la vez. Dylan nos acompañó, dice que ahora se convertirá en nuestro representante. —Ríe a través del teléfono—. Nos mantuvieron en una sala de espera hasta que conocimos al productor que trabajaría con nosotros, platicamos acerca de lo que queríamos y entonces nos dejaron ensayar la canción una vez. Escogimos Often, después entramos a la cabina y lo hicimos tres veces. La primera vez Alex entró tarde, en la segunda Luke falló la nota y la tercera fue la única vez que nos salió bien. Supongo que eran los nervios.
—¿Cuándo podré escucharla?
—No lo sé, espero que sea pronto. En verdad quiero que la escuches, después grabaremos Breathe me… Y serás una de las personas que aparezcan en los agradecimientos del EP, dalo por seguro.
Abrí la puerta del apartamento, y me encontré con una escena que no esperaba. Mi padre se encontraba en el sofá mirando una vieja fotografía mía, de hecho había un álbum completo de viejas fotos encima de la mesa de la sala de estar, tampoco pude ignorar el hecho de que dos copas y una botella de vino descansaban a un lado de otro álbum fotográfico que contenía los recuerdos de la juventud de mi madre.
—Ben, te llamo después.
Cerré la puerta y dejé mi teléfono a un lado, ambos miraron en mi dirección, mi mamá comenzaba a jugar con su collar y eso era señal de que claramente se encontraba nerviosa.