Capítulo: 15

Soy medio huérfano, mi padre no se hizo cargo de mí, pero sí de mi media hermana. Soy producto de una infidelidad, mi madre me contó todo excepto el nombre de mi padre, pero sé que tengo sus ojos, azules. Mi progenitor, el que dio su esperma para mi creación, fue abandonado por su esposa al enterarse de mi existencia. Una mala mujer, abandono también a su hija de apenas meses. Según sé yo soy tres meses más o menos mayor que ella. De todas maneras jamás entenderé porqué mi padre no fue parte de mi vida, se encontraban solos. Podríamos haber sido una familia, pero no sé si mi madre lo hubiese aceptado, nunca pregunté. El punto es que tengo una media hermana suelta por ahí...

He tenido momentos de pánico absoluto pero como el que estoy sufriendo en este momento, jamás. No sé por qué mi novia no me dice que está embarazada ¿acaso no lo sabe? Me preocupa muchísimo...pasa el tiempo y eso incluye más días sin atención médica para mi chiquito. Me hace feliz ser padre, pero tengo miedo que mi muñeca decida deshacerse de él, ella me dijo no estar lista para un bebé... Y yo la cagué.

En éste momento me encuentro pensando si tomarle más selfie raras a mi mejor amigo o no...Traje cotillón. Ya tengo fotos de Nazareno con lentes rosados, con bigotes, con corpiño...en fin, es divertido que siga dormido ¡Qué gran susto me dio el idiota!

Hace días, discutimos muy fuerte...me dijo cosas del idiota de Hache que no quise creer. Me sentí el peor amigo del mundo al ver a Hans aquí en la clínica, sonriéndole coquetamente a Deyamira...tenía ganas de ahorcarlo. Y luego con las cosas que me dijo solo comprobé que Nazareno siempre tuvo razón.

Me equivoqué, una vez más. Encima ese mismo día que me peleé con mi amigo, el 26 de abril, me enteré de mi paternidad. Me río al recordarlo.

ías antes...

─Bien, debemos saber cómo funciona ésta cosa... ─me dijo mi amigo leyendo las instrucciones del test de embarazo casero.

Ambos estábamos en mi departamento, llevábamos horas tratando de pensar como saber si Rosy está o no embarazada, queríamos saber la verdad verdadera. Ya había pasado un mes desde que cometí el error de no usar preservativo.

La incertidumbre nos estaba matando lentamente. Y mi novia se comportaba extraña, como evitándome, pero no me decía nada de nada ¡desesperante!

─ ¿Cómo haremos qué orine en esto? Es imposible que no lo note... ─ aseguré, minutos después, mostrando el recipiente donde va la tira reactiva.

─Oh eso, lo tengo todo resuelto, pondremos un recipiente en tu inodoro, cuando despierte para ir al baño no lo notará, luego lo hechas en el recipiente del test y listo...sabremos si hay o no hay bebé... ─me sonreía con suficiencia como si fuese un plan maestro.

Tenía su lógica... Mi novia es muy despistada.

─Ves, soy un genio... ─ambos estamos de pie mirando el recipiente en el inodoro. Si, debíamos ver si el transparente recipiente para ensaladas funcionaba bien y se "camuflaba".

─La idea de cortar el agua y vaciar la mochila del inodoro fue mía... ─le recrimino.

Si, por qué la muestra de orina no debía tener agua, ni ningún elemento externo que pueda alterar el resultado. Leímos varias veces las instrucciones.

─Si Thiago Thiaguin, tú también colaboraste... ─apretó burlonamente mi cachete. Nos dirigimos a la puerta─ El plan funcionará... ─ aseguró el creído.

─Bueno, pero si lo nota te mato...estate atento al móvil, te llamaré de inmediato ─dicho esto nos despedimos y Naza se fue al café ese donde hay una chica que le encanta, solo va ahí y la mira como acosador, no sé cómo es que ella no lo nota, ha de ser ciega quizás...

Esa noche Ro dormiría conmigo y si todo sale bien ejecutaría el plan.

Pero como nada en mi vida puede salir según el plan, recibí un mensaje que cambio todo.

Amor! No podré quedarme, la enfermera se va a medianoche, cenaré contigo y me iré. Lo siento bombón :(

Por alguna razón mi móvil no tenía señal e inmediatamente llego otro mensaje de mi novia.

En 5 minutos llegó :)

Ambos mensajes fueron enviados hace rato ¡estúpido celular!

Escondí a toda prisa el test y sus elementos, carajo ni me he bañado. Puse a hervir el agua para los fideos caseros, que si había hecho con ayuda de mi amigo.

Mi muñe llegó y todo fue común, normal...cenamos, nos mimamos, conversamos de nuestro día, de cómo va el tratamiento de su madre, entre otras cosas.

─Amor, ya me voy, el taxi ya está aquí abajo... ─me dijo Ro mientras se levantaba del sofá donde estábamos tumbados. No quería que se vaya, pero ya casi era medianoche... ─Pero primero voy al baño... ─ la vi mover ese hermoso cuerpo suyo, con esa colorada cabellera que enloquece, es fuego vivo...esperen ¡va al baño!

Me puse de pie rápidamente y corrí para evitarlo pero ella ya estaba dentro, esperé en la puerta, no sabía qué hacer, con mi amigo pusimos el recipiente a modo de prueba y lo olvide ¿qué le diría cuando salga y pregunte? Que idiota soy...sentí hasta ganas de vomitar por los nervios de la situación.