■■¿■¿■■
¿Qué fue eso?
He quedado congelada en mi sitio. Sus palabras hacen que piense mal de él. No quiero llenarme de expectativas altas para luego caer bien bajo hasta llorar con el corazón herido. Por lo tanto, no aceptaré lo que todos dicen. Por el momento, ignoraré esto absurdo y me enfocaré en traer pruebas físicas de lo que quieren saber del presidente.
Caminamos normal sin estar agarrados de las manos, igual que un par de amigos, compañeros o conocidos. No hay necesidad de tener contacto entre cuerpos.
—¿Puedo saber por qué no te gusta mi cercanía? Sino es porque te caigo mal, ¿por qué es?
¿Tanto le interesa eso?
Si no le digo, será insistiendo y estará preguntando más adelante.
—No estoy acostumbrado al contacto físico de este calibre —confieso entre un respiro—. A diferencia de ti, nunca he tenido esta cercanía con alguien.
Un silencio entre los dos.
Se detiene, haciendo que también lo hiciera.
—No has agarrado la mano a nadie.
—No.
Quisiera decir que lo entiendo al toparme con su expresión, pero, al contrario. No puedo descifrar nada y, eso me causa ansiedad. ¿Qué mismo tiene en la mente? ¿Es malo decirle que no he tenido contacto con alguien de este calibre?
¿Tan malo es?
—Significa que hace un momento, fui el primer chico que te sujetó de la mano.
Sigo sin entenderlo.
Quiero decirle que sí, pero a mi mente llega un recuerdo fatídico. Ese día que le confesé a mi primer amor, donde salí herida y con el corazón roto. Ese momento, lo sujeté de una de sus manos.
Recuerdo que pensé estar volando.
Flotando en una emoción rosa anhelante y chispeante.
Sin embargo, eso no terminó bien.
—Algo así.
—¿Qué significa eso?
No pienso contarle sobre mi rechazo romántico.
—No quiero hablar de ese tema —confieso con una pequeña sonrisa—. Mejor sigamos. Tengo algo de hambre.
Mentira. Se me ha quitado el hambre de golpe.
—Muy bien. No pienso indagar de algo incómodo.
Suelto un suspiro en mi interior.
Es un alivio que no pensara en seguir preguntándome más del tema. Recién recuerdo lo que viví hace años atrás con el chico que me gustaba. No era tan atractivo como el presidente Aiden, pero sí me llamaba mucho la atención.
¿Por qué era?
Sí. Solo por haberme ayudado en un examen.
—Nunca me gustará a alguien como tú. ¿Por qué no te miras al espejo? ¿Crees que eres apta para salir conmigo?
Malos recuerdos de mi primer amor.
No duró mucho. ¿Cambié después de ello? Sí. Me enfoqué en mis comics y cerré una fase de mi vida. Él se cambió de instituto y no nos hemos vuelto a ver desde ese momento, llenándome de alivio puro.
▬■♥■▬
Mandé un mensaje a las chicas para que me dijeran que todo se solucionó con esas fanes dementes, pero preguntaron cómo iba con mi “cita”. ¿En serio esto lo es? Solo acepté comer porque no me quedaba de otra. Es difícil decir no en una situación donde me miran con ruegos en la mirada en un chico atractivo.
—Hamburguesa, papas y cola —habla Aiden a la cajera, quien no para de mirarlo. Parece que es un poco mayor que nosotros—. ¿Quieres un pedazo de torta de vainilla?
Amo el dulce y la comida chatarra, pero dudo que sea buena idea aceptar comer todo eso con él a mi lado.
Me da vergüenza de lo que pueda pensar.
—Solo el combo sin dulce.
—Muy bien. Yo sí quiero la porción de torta —dice el presidente sonriendo y pagando—. Anda, espérame en una de las mesas.
—Bien.
No digo otra cosa más.
Solo deseo comer rápido e irme a casa para darme un buen baño. Claro, en este momento, debo fijarme en todo lo que haga el presidente porque cualquier cosa, puede ayudarme en mi investigación.
Me siento en una de las mesas y saco mi celular para ver mis redes.
Lo he estado investigando por las redes, pero no hay ninguna señal que sea gay. Es decir que le gusten los hombres. ¿Qué más puedo hacer? ¿Indagar más en sus amistades y familia?
Busco algo en mi maleta, pero me detengo.
No tengo mi cuaderno de bocetos.
—Debo encontrarlo.
Alguien lo agarró porque no estaba en el lugar que lo tuve por última vez. ¿Y si lo tiene una mal persona?
—Chica osa.
¿Qué cosa?
Elevo la mirada, encontrándome con uno de mis anteriores compañeros de aula. Su rostro está cubierto de pecas y tiene el cabello medio rubio oscuro. ¿Cómo se llamaba? Peter Veliz.
Era de unos amigos de…