Capítulo 13

Los pesados párpados de Taehyung parecían no querer ayudar, este comenzó a moverse inquieto en su lugar hasta que logró despertar.

— ¿Taehyung? ¡Oh, mi amor! — exclamó una voz aguda dentro de la habitación.

TaeHyung volteó su cabeza lentamente viendo a la mujer que le veía con bastante preocupación.

— ¿Mamá? — su voz salió ronca, pasó su lengua por sus labios resecos frunciendo el ceño.

— Tae, mi bebé — su madre, JiWoo, comenzó a derramar lágrimas por su bebé.

— ¿Qué ha sucedido? — preguntó entre cerrando sus ojos.

— Me dijeron que entraron a tu departamento, bebé te dije que volvieras conmigo, ¿por qué no me hiciste caso? Mira lo que ha pasado — dijo acusadoramente poniendo sus manos en su cara intentando desaparecer sus sollozos.

No respondio, se limitó a cerrar sus ojos de nuevo por un par de segundos para luego abrirlos nuevamente.

— Perdóname madre, debí hacerte caso desde un inicio — habló mirando al techo — ahora me iré a Busan, no te preocupes saliendo de aquí nos vamos a casa mamá — se volvió a ella sonriendo de manera triste.

Pareció que en algún momento el corazón de JiWoo se encogió, pero era imposible, dejo pasar el malestar dándole una sonrisa reconfortante a su hijo quien yacía en la camilla mirándola, teniendo en cuenta de que estaba reteniendo sus lágrimas para no verse débil frente a su madre.

— Tengo que irme bebé, debo hacer papeleo en la empresa por lo mientras descansa, me ha dicho el doctor que en dos días podrías salir del hospital — le sonrió dándole un beso en su frete para luego retirarse de la habitación.

Ahora TaeHyung se sentía solo entre aquellas paredes blancas, parecía que en los últimos días la mala suerte se fue a vivir con él.
Soltó un suspiro, más que de tristeza, fue de angustia.

No sabía lo que pasaría después, puesto que aquello que paso en su departamento fue algo que realmente le hizo temer por su vida.

— ¿Qué se supone que haga ahora? — preguntó hacia el techo mirándolo, sin tener más que otra cosa que hacer.

Unos leves golpes en la puerta de la habitación lo sacaron de sus pensamientos, como pudo logró sentarse activando un botón a lado de la camilla, luego miró hacia la puerta viendo a un chico.

— Hola, ¿cómo te encuentras? — le preguntó, su ceño estaba levemente fruncido y sus labios formaban una línea recta en señal de preocupación.

«¿Quien se supone que es? Espera, no será...>

— ¿No me recuerdas? Soy el chico que te encontró en el parque central — le dijo son una pequeña sonrisa.

<Ahora le recuerdo>
Pensó.

— Él chico de la sonrisa gatuna.... — murmuró TaeHyung mirándolo anonado — d-disculpa, no quería ofenderte — sacudió un poco su cabeza causando un mareo en él.

— TaeHyung, ¿estas bien? — rápidamente se acercó el chico a verle tomando de los hombros al nombrado.

TaeHyung se tomó unos segundos para sentirse bien de nuevo, alzó la cara tapándose con la del chico pálido demasiado cerca, sonrojado se alejo al instante.

— S-sí, disculpa mi falta de tacto al decirte así — se disculpó apartando la mirada de él.

El chico de cabellera azul sonrió al ver como TaeHyung se sonrojaba, este ya sabía su nombre ya que conocía bien a su esposo aunque él y TaeHyung jamás interactuaron hasta aquella noche en el parque.

— No te preocupes chico lindo, se me hace tierno que me reconozcas por eso — le sonrió acariciando con su pulgar el hombro de TaeHyung.

Eso solo hizo que se sonrojara más, suspiro y volvió su mirada al chico de la sonrisa gatuna, se sentía un poco raro porque ese pequeño movimiento le causaba tranquilidad.

— ¿C-cómo te llamas? — habló TaeHyung mirándolo a la cara, observándolo.

Aquello puso un poco nervioso al chico pálido, era normal que las personas no aguantarán su mirada pero con TaeHyung era distinto, incluso podría permitiste admitir que es la primera vez que lo observaban así.

— M-mi... — carraspeo — Mi nombre es Min YoonGi, ¿el tuyo cual es, chico lindo? — tenía que fingir no conocerlo ya que se evitaría todo el asunto de la infidelidad de JeonGguk.

— Mi nombre es Kim TaeHyung, mucho gusto chico de sonrisa gatuna — le sonrió de una manera tanto rara para YoonGi pero tierna a la vez.

— Él placer es mio, chico lindo — le guiño el ojo con una sonrisa coqueta.

Por un momento un pensamiento paso por la cabeza de Min, quito su sonrisa volviendo su rostro serio, TaeHyung ladeó un poco la cabeza por el cambio que tuvo el chico, este quito su sonrisa despacio.

— ¿Cómo has acabado aquí? — le preguntó sin perder su postura.

TaeHyung se puso nervioso, incluso el recordar lo que paso hizo que se pusiera pálido.