Duraznos ensangrentados

4 Habitación y ¿Dónde esta Amber?

Dylan 

 

-¿Por qué nos dirigimos a tu casa?- Se quejó desde atrás Kenai 

 

-¿No que eras inteligente?, si mi tío no está, podemos de asaltar su despensa de dulce, siempre deja una en la despensa por si quiero, pero me da muy pocos.

 

-Oh.-Se alegró.-Dulces gratis y sin tener que robarlos.

 

-¿Le robas a mi tío?- Suprimí mi risa.

 

-Realmente todos mis hermanos le roban dulces, creo que tu tío lo sabe pero se aprovecha cuando no está Sal.

 

-Me carcajee- De manera que van y roban solo, ¿Por qué les gustan las delicias?- Pregunte ante su cara totalmente sonrojada.

 

-Si.-Murmuro avergonzado.- Nos encantan pero no sé cuándo comenzó todo, hace poco que nos juntamos realmente como familia, hace como seis o tiene años atrás.

 

-Pensé que siempre habían sido igual de unidos.

 

-Negó.- No siempre fue así, todos tienen sus propios anhelos y aunque aún principio fue todo muy familiar, hubo un quiebre en donde todos se alejaban por periodos y volvían, como si pasar demasiado tiempo no les sentara bien, no obstante de igual manera se alejaban.

 

-¿Y tú, con quien te quedabas?, ya que solo tienes dieciocho años, no creo que hubieses podido viajar por el mundo tu solo.-Comente mientras que doblábamos en una esquina y podía de ver la casa.

 

-Con mi padre.-Miro el cielo.- El me cuido hasta que vio que podía de cuidarme solo, o por lo menos no iba hacer un estorbo para mis hermanos sino que un apoyo.

 

-Y ¿Dónde está él?

 

-No lo sé, y no digas eso si mis hermanos están cerca, ellos no tiene una buena relación con él y- apunto.- no me preguntes el porqué, ellos mantiene sus discusiones lejos de mí y de Sabi.

 

-¿Son sandwich de palta?- Lo patee al tenerlo al lado mío.

 

-No creas que soy tan fácil de sacar información- Hablo ofendido, caminando más rápido.

 

Desde detrás podía de ver el cómo se colocaba un gorro, era café, pero eso realmente no me impresiono sino que fue ver, a Zanahoria fuera de casa, jugando con una piña totalmente destruida por lo que se ejerció.

 

-Zanahoria.- La llame.- Preciosa ven conmigo.

 

Ella es el perro más hermoso que hay en este mundo, su pelaje es rojizo y puede de camuflarse muy bien con el pasto seco.

 

-Te escapaste mi niña- Pregunte, mientras que la encaminaba a la casa, no es que hayan muchos perros que la puedan de atacar, no obstante lo que si hay son ladrones que pueden ir detrás de ella, aunque no es de raza es una belleza.

 

-Ella no se escapó Dylan, ella solo salió.-Señalo la puerta.- Mira está abierta.

 

Eso es raro

 

-Él nunca se olvida de cerrar la puerta.

 

-Yo creo que se quedó dormido, el día a pesar del sol esta, tiene temperaturas bajas.

 

-El me despertó.

 

-Entonces entremos.

 

Mientras entrabamos, la puerta principal estaba cerrada pero no con llave, y la primera plana estaba normal, como cualquier día, la cocina en cambio estaba desordenada, con platos todavía con delicias a medio comer y las sillas movidas, no era un signo de que alguien se metió, sino que era un invitado.

 

Mire por un momento a Kenia y con solo un movimiento fuimos subiendo las escaleras.

 

Se escuchaban unas risas profundas además de un moviendo en la habitación de mi tío. No creo que haya traído a una persona, nunca habla con alguien de esa manera.

 

-Joshy, no joder, que harás que me meé encima.

 

Esa voz, no es de mi tío.

 

-Tío Joseph.- Chille abriendo la puerta.

 

-¿Dylan?-Se paralizo.

 

-Eh.-Titubé- Adiós.-Cerré la puerta

 

-Ese no era...

 

-Sal... 

 

-Mi tío

 

-Espera, ¿Qué?-Le tome el brazo, mientras lo llevaba a mi habitación.

 

-La voz era de Sal, y todo es muy turbio ahora que lo pienso.

 

-Eso quiere decir ¿Que mi tío y tu hermano son?

 

-No creo.-Respondió al ver mis manos moverse.

 

-No obstante, es algo muy raro, ello juntos es... Turbio es como encontrar a mis padres juntos.

 

Mis manos se mantenían inquietas al igual de que mis pies de manera que llegamos rápido a la habitación, lo cual hizo que me pusiera más nervioso, ya que este no era como el bosque o las demás islas, es un espacio totalmente privado en donde me veo realmente vulnerable, no es que tenga muchos secretos pero no quiero que vea cuan friki era hace unos años.

 

-Tu cama es suave

 

-Si.-Me senté a su lado.- ¿Tu sabias que ellos estaban juntos?

 

-No, creo que hace unos años estuvieron juntos sin embargo, se separon, o hasta talvez nunca estuvieron juntos, en aquel tiempo yo no estaba mucho por aquí.

 

-¿Con tu padre?

 

-Si

 

Nos quedamos mirando un estante en donde mantenía mi ropa, este mantenía a su derecha una gran cantidad de cajas llenas de cosas que he encontrado caminando, fácilmente tengo cinco kilos solo de basura de otros, llenas de óxido o rotas.

 

-Me gustas 

 

-La habitación.

 

-Eh, si, se siente acogedora, como los bollos de canela.

 

-Y ¿Cómo es eso? -Apoye mi cabeza en su hombro.

 

-Es el sentimiento que uno mantiene cuando esta relajado y sabe que en donde esta nadie lo molestara.

 

-Y uno se toma un café caliente.-añadí.

 

-Asintió.- Tu habitación esa sensación me da.

 

-Todavía recuerdo que cuando llegue hace unos años, odiaba esta habitación ya que estaba vacía y sin vida y ahora no me gusta porque está muy llena.



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En el texto hay: misterio, lgtb amor, almasgmelas

Editado: 24.03.2023

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