Capitulo 11

- ¿Qué pasa? 
Me acerque a su lado, la puerta estaba abierta de par en par por lo que podía ver solo habían necesitado de un golpe contundente, avance en dirección a la puerta me quede en silencio pero no escuche ningún ruido saque valor de alguna parte de mi agotado cuerpo  y empuje lo que quedaba de ella. El departamento estaba totalmente destrozado los muebles de la sala y comedor estaban estrellados contra las paredes, los cojines que lo adornaban estaban cortados en pedazos por el suelo. EMMA entro detrás de mí. 
- ¿Qué rayos paso aquí? 
Fue inevitable que sus ojos se llenaran de lágrimas, avanzamos por el lugar el televisor estaba en el suelo con la pantalla destrozada. 
- No fue un asalto. 
EMMA me miro y justo en ese momento la puerta se abrió de golpe ambas pegamos un brinco acompañado de un grito, por la puerta entraron loa ARMON, comenzaron a buscar por la casa hasta asegurarse de que estábamos solas él se acercó a mí. 
- ¿Están bien?-Mire a todos lados mientras levantaba el único cojín sobreviviente. 
- ¿Pues qué cree señor ARMON?-Mi voz estaba llena de sarcasmo he ironía. 
- Fueron enviados por los HAMILTON. 
Como un recuerdo fugas me acorde del libro corrí despavorida a mi cuarto seguida de DASTAN en libro estaba en mi cajón justo donde lo había dejado. 
- ¿Por qué? 
Volví a la sala donde CORA trataba de consolar a mi compañera, por mi culpa habían convertido su departamento en un campo de guerra me sentía muy culpable y muy mal porque la había arrastrado a mis problemas, era la única víctima de todo esto.  
- ¿Cómo saben que fueron ellos?-DASTAN se mantenía a mis espaldas. 
- Sentí su aroma cuando estábamos abajo era muy débil no estaba seguro hasta que abrieron la puerta-se quedó en silencio- no se pueden quedar aquí. 
- ¿Por qué lo hacen? 
- Debe pensar que eres mi amante-Me gire rápidamente al igual que EMMA se colocaba de pie y detenía su llanto. 
- ¿Que? 
- Si, mi gente me confirmo que ella ya sabe que Salí de la fiesta para venir por ti y sabe que estuve toda la noche en el hospital contigo, lo único que ella puede pensar es eso por eso no te puedo dejar sola-Mi mirada solo reflejaba ira. 
- ¿No te ibas a encargar de ella? 
- Si pero no la he podido convencer de terminar con el compromiso su orgullo es más grande que no la deja entender razón?  
- ¿Y si lo niego? 
- Ella no se detendrá hasta llevarnos ante el consejo y exponerte.  
- ¿Qué pasa con eso?-El retrocedió y miro a su hermana.  
- Dile la verdad-El movió la cabeza de un lado a otro. 
- Tengo una semana para obtener las pruebas para  condenar a los HAMILTON y con eso el compromiso se romperá pero si lo hacen antes de que tenga las pruebas pueden iniciar una guerra interna que puede terminar con algunas muertes como la tuya o la mía.  
Quedamos con la boca abierta estaba en shock, como que con nuestras muertes, mire a EMMA no podía ponerla más en peligro. 
- ¿Qué propone?- tenía que protegerla a toda costa. 
- Las dos se quedaran en nuestra casa donde estarán bajo mi guardia personal, hasta poder solucionar esto-Respire profundo mientras lo miraba resignada a compartir algunos días bajo su techo. 
- Está bien… está bien. 
Tomamos algunas cosas entre ella el libro que sobrevivieron a la ira de una mujer que no conocía más que su ego, antes de salir EMMA le daba una última mirada a su departamento.  
- Lo siento- fue lo único que le pude decir.  
Salimos rápidamente y subimos al auto, pero esta vez yo tome el asiento del copiloto y EMMA y CORA entraron en la parte de atrás, DASTAN no pudo mostrar su sorpresa al subir y verme sentada su lado lo mire fijamente. 
- Creo que tenemos que aclarar algunas cosas. 
Movió la cabeza aceptando lo que  le acababa de decir con una pequeña sonrisita en los labios, mientras se colocaba el cinturón de seguridad me devolvió la mirada. 
- Por cierto 2 y van 0. 
Sabía a qué se refería pero tenía que concentrarme en lo que estaba pasando los HAMILTON se me habían convertido en una piedra en el zapato pero quería saber que pruebas necesitaba DASTAN para detenerlos. 
- ¿Que buscas de ellos? 
Nuestras miradas se encontraron por un momento, luego miro el camino tomo aire y comenzó a hablar. 
- ¿Leíste el libro? 
- Parte de él. 
- Bueno entonces sabrás cuales fueron nuestros orígenes. 
- Si. 
- Cuando los descendientes de BACO quisieron enmendar los daños hechos por él se comprometieron a no volver a repetir sus gustos eso sería suficiente para recibir el mayor de los castigos.  
- ¿qué tiene que ver eso con ellos? 
- Ellos cayeron en tentación y de la manera más baja que pudiéramos imaginar-DASTAN tomo aire mientras sostenía la mirada en el camino, tenía un sinsabor. 
- No te quiero involucrar en esto-Sentí que algo dentro de mí explotaba. 
- Disculpa pero ya estoy muy involucrada, estoy siendo perseguida por tu otra prometida y su familia, quienes hicieron que perdiera mi trabajo e intentaron llevar a mi mejor amiga a un trampa mortal, perdonara señor ARMON pero ya estoy demasiado involucrada. 
No me miro en ningún minuto mientras hablaba pude ver como tensaba su mandíbula estaba enojado y desconcertado por el tono de mi voz.  
- Está bien te lo diré, pero no aquí cuando estemos en mis terrenos y otra cosa más mi advertencia aún está en pie. 
Volvió su mirada así mí, logro que por mi espalda bajara un frio que termino en mis piernas tenía un brillo muy malicioso mi corazón se aceleró trague saliva y retire mi mirada, “un minuto por cada vez que me llamas por mi apellido”, lo estaba retando y en cualquier momento me cobraría la ofensa. 
Sin darme cuenta habíamos ingresado a uno de los lugares más exclusivos de la ciudad, las mansiones eran excéntricas y hermosas miraba por la ventana del auto maravillada trataba de imaginar el valor de cada uno de ellas, el auto se detuvo frente una puerta negra brindada poco a poco esta comenzó a abrirse al tiempo que dejaba ver una mansión de puertas y ventanas negras de dos plantas un jardín con pinos podados nos daban la bienvenida, las luces estaban encendidas mientras el auto se acercaba a la puerta de la mansión pude ver a MAD salir a nuestro recibimiento Salí del auto para ayudar a EMMA a bajar ella por su parte tenía una profunda tristeza reflejada en sus ojos. 
- Lo siento de verdad te voy a pagar todos los daños de verdad-Ella me miro con una pequeña sonrisa mientras sujetaba mis manos. 
- No querida, no tienes que pagarme nada solo me importa que esto se solucione y luego ya veremos- si algo le llegaba a pasar por mi culpa jamás me lo perdonaría-MAD se apresuró a llegar a nuestro lado. 
- Entren rápido. 
Estaba angustiada por lo que no dudamos en obedecer su orden, ya en el interior de la casa CORA nos llevó hasta el comedor que tenía un aire rustico de 6 puestos, EMMA y yo tomamos puestos juntas mientras LOS ARMON estaban frente a nosotras, levante la mirada con una leve sonrisa. 
- Entonces lo escucho DASTAN.  
El me miro con esos ojos negros que lograban mover mis sentidos pero por esta vez yo tenía el control, a regañadientes movió las dos sillas frente a nosotros, miro a MAD. 
- Toma asiento tú también  
Ella hizo lo que le pedía, pude notar su nerviosismo parecía que no quería decirme nada al respecto pero al parecer mi actitud firme logro hacerlo ceder. 
- Hace meses llego a mi oficina una mujer perteneciente a la manada de los HAMILTON más exactamente de BLAD, llego pidiendo protección, mi hermana  y yo aceptamos. 
Lo vi tomar aire y pasar la vista por su hermana y ama de llaves para luego volverme a vernos, apoyo sus codos sobre la mesa mientras ponía sus manos sujetando su barbilla. 
- Los HAMILTON han quebrantado una de nuestras reglas más sagradas y es no volver a repetir las bajezas que cometió BACO, hasta ese momento solo teníamos rumores sobre sus prácticas pero la llegada de esta mujer lo cambio todo aparte de su testimonio verbal me permitió ver su rastro de sangre-Mis ojos se iluminaron, existía un aprueba, DASTAN pudo ver el brillo en mis ojos-Pero esta mujer despareció, su rastro se perdió por lo que asumimos que la eliminaron.  
Mis manos fueron directamente a mi rostro, así como había llegado un rayo de luz así mismo se había esfumado retire  mis manos y las puse sobre la mesa. 
- ¿Qué clase de prácticas?-Ambos hermanos se miran pero esta vez es CORA quien toma la palabra. 
- Recuerdas a tu chica la del callejón.  
La mire fijamente con una expresión de pánico, como olvidar la razón por la que nuestros caminos se habían cruzado de nuevo, solo pude asentir mientras sostenía su mirada. 
- Pues querida ella es el reflejo de una de las practicas. 
Ella pudo ver mi mirada de confusión mire a EMMA por un segundo que hasta el momento había estado atenta a la conversación, mi compañera deslizo su mano sobre la mesa para tomar la mía y apretarla un poco, volví a escuchar la voz de CORA. 
- BLAD y su padre son adictos a la sangre y una vez que empiezan no pueden parar, por esa razón tu chica tenía ese aspecto. 
No pude evitar que mis lágrimas salieran, como era posible que una persona llegara hasta ese punto y terminar con la vida de otra de una tan indefensa alguien quien tenía personas que la esperaban en casa, mis lágrimas salían sin control, las seque con la manga de mi chaqueta mi mirada se perdió en mis manos tome aire. 
- Prácticamente la seco. 
Ambos hermanos movieron la cabeza en forma de aceptación, CORA miro a su hermano quien mantenía la cabeza metida entre sus manos y luego me volvía a ver. 
- Pero eso no es todo. 
Eso hizo que DASTAN bajara sus manos y dejara ver  su rostro tenía la mandíbula tensionada y su mirada reflejaba total desaprobación él fue quien retomo la conversación. 
- Al parecer tienen unas fabricas-Estaba confundida por sus palabras.  
- ¿eso que tiene que ver? 
- Son fábricas de sangre donde ponen a mujeres humanas a parir como conejos y traer al mundo niños que luego ellos toman como alimento y no sueltan hasta que los pequeños no pueden más y mueren. 
No pude evitar que mi estómago diera un vuelco puse una de mis manos sobre mi boca sentía que en cualquier momento iba a devolver lo poco que había comido hasta esa hora, EMMA se levantó de un solo golpe y pidió a MAD que le indicara donde quedaba el baño, tarde unos minutos en recuperarme. 
- En vista de que la única persona que sabía la verdad ya no está ¿qué va a hacer señor ARMON?-El me fulmino con la mirada y tenso nuevamente su mandíbula. 
- Tengo una semana para poder encontrar las pruebas suficientes para enfrentarlos y poder liberarnos de esta amenaza. 
Desvié la mirada al techo tratando de encontrar una idea que pudiera ayudar a DASTAN  en su búsqueda, cuando EMMA volvió del baño junto con MAD, CORA se levantó para llegar a su lado. 
- ¿Cómo te sientes? 
- Mejor-Mientras ellas tres dialogaban baje la mirada hacia él.   
- De acuerdo vamos a idear un plan para que encuentre pruebas de sobra para que esos desgraciados paguen por lo que han hecho-DASTAN me miro dudando de lo que acaba de escuchar. 
- ¿Vamos?-Al parecer eso no le era de su agrado. 
- Si, vamos. 
Lo dije de manera pausada al tiempo que utilizaba mi índice para señalarnos a ambos, pero él no parecía estar de acuerdo con mí propuesta por lo que se levantó de la silla abruptamente asiendo que esta se cayera al piso al tiempo que ponía sus puños fuerte sobre la mesa. 
- No te vas a meter en esto, seré yo quien lo haga. 
Su voz retumbo por todo el lugar mis ojos estaban abiertos como platos al escuchar su respuesta no me iba a dejar amilanar así que utilice su mismo tono de voz, me levante de golpe de mi ligar. 
- ¿quién me lo va a impedir? 
- Yo. 
- ¿Y cómo?, me va a amarrar a la pata de la cama.  
- Así tenga que encerrarte en una habitación mientras saco esto adelante, pero no te vas a meter en esto. 
- ¿Y si no lo logra qué? ¿me va a mantener toda vida encerrada?, haga lo que haga no me va a detener, llevo semanas sin poder recuperar mi tranquilidad perdí lo único que realmente me importa en la vida así que si tengo la única oportunidad de recuperar lo que perdí no me importa para nada lo que hagas para detenerme. 
Hubo un silencio absoluto, mi mirada era dura y fría mi pecho subía y bajaba debido a mi esfuerzo, sentí un frio por todo mi cuerpo acompañado de un temblor que me hizo perder el equilibrio, CORA llego de inmediato a mi lado. 
- Ven querida toma asiento. 
Me tomo de los brazos para acercarme a la silla, MAD me acerco un vaso con agua mientras le daba un sorbo pude ver la expresión de DASTAN y su hermana tomo la palabra. 
- Hermano tenemos que aceptar la ayuda de VICTORIA no tenemos tiempo.  
Él se giró para darnos la espalda se pasó ambas manos por su cabello se giró nuevamente  hacia nosotras y comenzó a rodear la mesa hasta llegar a mi lado derecho puso una mano en el espaldar de la silla y la otra sobre la mesa para luego agacharse a mi altura. 
- Está bien, pero a la primera estupidez de tu parte como ponerte en peligro te aparto de esto, ¿de acuerdo?-Lo mire fijamente y deje escapar un pequeño suspiro.  
- Está bien-Se levantó para mirar a MAD.  
- Alista la habitación de huéspedes y prepara algo de comer para ellas, por ahora vamos a tratar de descansar, CORA dale aviso a nuestra gente-Ambas se disponían a salir del lugar pero DASTAN me sorprendió con sus palabras-EMMA puedes acompañar a MAD a la cocina, tengo algo que hablar con tu amiga. 
Sentía que me iba a dar un infarto mi respiración se aceleró mientras veía a EMMA pasar por la puerta, el rodeo la silla en la que estaba sentada quedando ahora a mi lado izquierdo por mi parte evite cruzarme con su mirada, tome aire y me levante de nuevo. 
- ¿Qué quiere hablar conmigo?-Sentí su mirada recorrer mi cuerpo mientras que la mía estaba en mis manos. 
- Quiero que terminemos la charla que quedo pendiente en el hospital-trague saliva. 
- Quedamos en una tregua, ¿no?-Él se recostó en la mesa y se cruzó de brazos.  
- Si de eso justamente, pero también quiero que aprovechemos para tratar de llevarnos bien. 
Con un rápido movimiento tomo mi brazo jalándome hasta ponerme entre sus piernas y rodeándome con sus brazos de esa manera me inmovilizo trate de salir de su agarre, lo que fue imposible aunque no estaba ejerciendo fuerza sobre mí, estaba débil  lo único que pude hacer para  mantener distancia fue poner mis manos en su pecho. 
- Cálmate solo vamos a establecer unas reglas, primero está tu salud, segundo todo lo que vayas a hacer para ayudarme primero lo cometas conmigo y tercero pero no más importante nada de SEÑOR ARMON eso ya lo habíamos discutido y sabe las consecuencias que eso conlleva. 
Su cara estaba a unos pocos centímetros de la mía podía sentir su respiración dicho eso escuche a su hermana entrar. 
- Listo hermano ya di aviso al personal de seguridad-Me soltó de inmediato sin dejar de verme a los ojos ella se quedó viéndonos en silencio. 
- ¿Interrumpo algo?-Pase saliva antes de empezar a caminar en dirección a la puerta que comunicaba a la cocina, la mire mientras pasaba por su lado. 
- No interrumpes nada, con permiso. 
Fui en busca de EMMA, sentía que me desmayaría en cualquier momento su cercanía me ponía mal y lo peor era que él se había dado cuenta de ello. Al llegar a la cocina me encontré a EMMA preparando un emparedado al verme llegar me extendió uno junto a un vaso de jugo. 
- Ten come algo antes de que se vayan a descansar. 
Mire por un largo rato el plato, no tenía apetito mi cerebro estaba en el proceso de buscar el paso a seguir, empecé a repasar toda la charla  que había tenido con los ARMON y me detuve en algo que no logre entender para ello MAD estaba entrando por la puerta de la cocina había salido por un momento.  
- ¿MAD le puedo hacer una pregunta?-Ella me miro por un rato y miro el plato que tenía frente a mí. 
- Si pero debería comer -Comencé a probar bocado.  
- A que se refería DASTAN con ¿rastro de sangre? 
Ella tomo asiento junto a mí mientras EMMA llevaba su plato a la mesa para hacernos compañía. 
- Bueno se refiere a que la mujer le permitió ver sus recuerdos con una gota de su sangre-Levante la mirada para ver a mi compañera quien frunció el ceño para luego ver a MAD.  
- ¿Cómo es eso? 
- es una forma muy antigua que le permite a los familiares ver los recuerdos de su gente siempre y cuando el individuo lo permita-Logre terminar mi comida y continuar con la charla, recordé cuando XIFER paso el cuchillo con la sangre DASTAN por su lengua. 
- ¿por qué no hacen eso con los HAMILTON?-Ella sonrió un poco.  
- porque ellos no darían su permiso, pero si el señor DASTAN logra reunir las pruebas necesarias para acorralarlo el consejo lo autorizara sin importar si ellos estén de acurdo o no. 
Logre tomar un poco más de aire la clave estaba en encontrar las pruebas, estaba más comprometida con ayudar eso también serviría para recuperar mi trabajo, mi carrera y mi vida no del todo ya que aún está el tema del compromiso. Después de cenar MAD nos llevó por las escaleras que conectaban al segundo piso donde se extendía un largo pasillo ella nos llevó a la última habitación al fondo donde una cama amplia nos esperaba, junto a ella un closet de dos cuerpos del mismo estilo del comedor, EMMA se abalanzo sobre el para abrir las primeras dos puertas. 
- mira VICTORIA. 
Me acerque a él con paso lento para encontrarme con ropa de todo tipo vestidos de fiesta, jeans faldas cortas y de tubo blusas de todos los colores y formas en la parte de abajo una colección completa de zapatos bajos altos, tenis y sandalias, parecía que la habitación tenia dueña, pero lo que más llamaba mi atención era que también eran de tallas diferentes. 
- ¿quién duerme aquí?-MAD quien estaba a nuestras espaldas alistando la cama respondio.  
- las invitadas del señor. 
Sentí un nudo en mi estómago “INVITADAS DEL SEÑOR” por qué me dolía tanto escuchar eso sabia, MAD dio un salto y abrió los ojos de par en par la había traicionado su subconsciente por lo que estaba intranquila tratando de justificar a su señor. 
- aunque solo lo utilizaba INNA cuando venía de visita. 
Por DIOS esta mujer estaba empeorando las cosas, volví a ver el interior del closet trate de disimular mis lágrimas estaba en el mismo lugar donde esa mujer había estado, EMMA como mi mejor y única amiga noto mi situación. 
- ¿estás bien? 
No me salían palabras por lo que solo pude asentí tragaba saliva y respiraba profundo evitando que me derrumbara en llanto, MAD continua con sus excusas. 
- pero ahora le pertenece a ustedes pueden hacer uso de el  
Comencé a revisar la ropa y una llamo mi atención era el vestido azul que llevaba INNA el día que la conocí, recordé ese momento, EMMA tomo las puertas del closet.  
- pues nosotras no vamos a utilizar nada que las invitadas del señor y mucho de esta tal INNA-Las cerró con fuerza. 
- ¿pasa algo? 
Las tres volvimos la mirada a la puerta DASTAN estaba de pie en la puerta de la habitación, nos observaba con detenimiento no sabía cuento tiempo llevaba ahí y mucho menos que había escuchado, nos observaba a todas pero detuvo su mirada en mí. 
- ¿CORA nos puede prestar algo para dormir?-dijo EMMA, Frunció el ceño, camino hasta el closet tomo las puertas y las abrió, cerro lo ojos al ver la ropa. 
- ¿Hay algo que tus invitadas no hayan utilizado?- dije casi en voz baja. 
Abrió los ojos para fulminarme con la mirada yo simplemente desvié la mía en dirección a la cama mientras EMMA se alejaba de nosotros, DASTAN tomo la ropa y comenzó a sacarla del closet MAD sin necesidad de preguntar nada se acercó dispuesta a recibir las prendas.  
- Llévatelas de aquí-La vi dirigirse a la puerta con intenciones de salir pero la detuvo-Espera llévate estas también. 
Comenzó a caminar en mi dirección, por inercia retrocedía con cada paso suyo se detuvo en las otras dos puertas del closet las abrió con fuerza dejando ver más prendas que a diferencia de las otras tenían las marquillas aun puestas comenzó a revisarlas  y a sacar algunas de ellas.  
- ya puedes retirarte. 
Esta vez ella cruzo la puerta sin más demoras la seguí con la mirada, EMMA estaba de pie junto a la cama con los brazos cruzados y no quitaba su vista de DASTAN, volví rápidamente  la mirada cuando el cerro las puertas.  
- ya no hay nada que te incomode lo que queda es tuyo y en cuanto  a la cama si la utilizo-Mi mirada se desvió al lugar junto a EMMA-pero si tanto te incomoda puedes dormir conmigo. 
Rápidamente devolví mi mirada junto a un pequeño brinco, mientras me mirada con una de sus cejas levantadas y una sonrisa maliciosa.  
- no es necesario gracias-Retire mi mirada, camino hasta la puerta y antes de salir se giró a nosotras. 
- que descansen por cierto en los cajones de abajo hay ropa para dormir pueden usarla. 
Señalo los cajones del closet y cruzo por ella cerrándola a su paso, solté una bocarada de aire me dirigí al baño no sin antes mirar a EMMA. 
- voy  a tomar un baño estoy muy cansada.  
Entre al cuarto de baño, era de baldosas blancas tenía un espejo grande que cubría parte de la pared la ducha era en vidrio comencé a revisar las cajones, estos tenían cepillos de dientes en sus empaques, estaba buscando una toalla, cuando EMMA toco la puerta. 
- Pasa-Entro con una bolsa transparente entre sus manos. 
- mira creo que esta es de tu talla. 
Me entrego una pijama que estaba sin usar la tome al tiempos que levantaba la cabeza para encontrarme con su mirada,  me observaba en silencio con una sonrisa pícara en sus labios. 
- ¿qué me vez?-Ella soltó una carcajada. 
- nada querida solo que esta noche me di cuenta que entre tú y el anfitrión de esta casa hay mucha tensión-La mire con el ceño fruncido. 
- ¿tensión? 
- Si querida, tensión sexual. 
Tome la bolsa que me había entregado y comencé a darle pequeños golpes con ella mientras ella solo se reía sin control, más que nadie sabía que mi experiencia con los hombres era nula y que esos temas me causaban un sin sabor, aprovechaba de ello para hacerme bromas. 
-  Ya cálmate solo basta verlos para darse cuenta de que te pone mal tenerlo cerca, y el por su parte no se queda atrás-Deje de darle golpes mientras la miraba. 
- Ya basta deja que me duche. 
Salió del cuarto de baño dándome el espacio para bañarme, ponerme la pijama, cepillarme los dietes y salir, EMMA entro al baño para ducharse también, tome mi lugar al lado derecho de la cama  esperando que ella saliera, cundo lo hizo tomo lugar junto a mí y apago la luz. 
- Fue dulce de su parte sacar las cosas, me parecía que no quería que estuvieras incomoda por ese tema. 
Le di la espalda en silencio, tratando de conciliar el sueño pero mi cabeza estaba tratando de asimilar lo sucedido ese día hasta que el cansancio logro vencerme.