Capítulo 1.

¿Nunca has tenido esa sensación de que tu vida va de maravilla, y te da miedo por que algo malo se avecina? Sí claro, no en todos los casos.

Creo que la trágica historia comienza un 10 de Diciembre con una niña enamorada que no tenía ni un carajo de idea de lo que le esperaba, le tocaba enfrentar la vida sin la persona que hasta ese momento le había hecho cambiar ¿Habrá sido una apuesta? O ¿Un simple capricho? Te digo que es 26 de Enero y no lo sabe aún. Retomemos un poco el 5 de Julio, o tal vez el 25 de Junio, por aquellos días la vida de ella era de ensueño, ¿Quién diría que aquel joven de peculiar acento le atormentaría la vida sin siquiera estar presente durante un par de meses... o años? Realmente no tenía ni idea, pero, era un reto que la vida le ponía a tan delicada como feroz niña, y nada la iba a detener, y menos aquellos ojos cafés, chiquitos cuando reía, o cuando a aquella niña le tocaba verlo enojado, eran un color tan nítido que daba miedo... Transcurrían las 10:00 de la noche, cuando a su teléfono llegó un peculiar mensaje "Hola", sonrío esa chiquilla sin saber el motivo de su mensaje, nunca habían cruzado miradas, mucho menos palabras, no había un motivo para aquel mensaje, contestando un simple "Hola:)", con un examen de química por delante y a esa hora no podía mantener conversación alguna con el moreno.

Al siguiente día, este transcurría normal, sin alguna novedad, clases, charlas con poca coherencia, hasta que un nuevo mensaje apareció "Cómo estás?", lo que fue cortado con un "Harta, tuve examen de química, seguro lo repruebo, y tengo de mate al rato", clases entre medio, salidas a la tienda, o a perder el tiempo "Yo te ayudaré con el examen de matemáticas" ella solo se dedicó a echarle una mirada de confusión al móvil, acto seguido respondió un "Claro", sin verificar si le había llegado o no el mensaje, apagó el celular, evadiendo al de cabello negro, sin esperar alguna respuesta. El fin del día escolar había llegado, a las 4:00 de la tarde recibió un "Me he quedado sin pila, lamento no haber cumplido con mi palabra, te debo algo", "No es nada, no importa" recibió aquel niño, al que no sabía a que se estaba enfrentando al coquetear con aquella niña, hecha de un corazón inmenso de oro, aunque cada respiración es inevitablemente tóxica.

El fin de semana llegó, aquellos dos que sin darse cuenta se estaban enamorando, hablaron día y noche sin parar, hasta el punto donde sus llamadas eran de 4 horas o más, hasta el día 5 de Julio, exactamente el 6, donde a las 6:04 de la mañana ella decidió aceptar unir su vida con aquel niño, de alguna manera u otra, a él le había cautivado aquella pelicafé, después de sus miles intentos de coqueteos durante ese lapso de tiempo, él se había enamorado.