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24 HORAS, 2 ASESINATOS
INTRODUCCIÓN A GABRIEL
El tintineo de los cubos de hielo dentro del vaso con whisky era el único sonido dentro de la vacía y oscura habitación, llevaba mucho tiempo dándole vueltas a la conversación. Minutos antes había estado hablando con Cáseres el director de la agencia, sobre retomar mi trabajo, no era algo que me emocionaba, la verdad es que aún no lograba encontrar las agallas para volver a trabajar en eso, bastantes problemas había traído a mi vida.
En algún momento, sin darme cuenta había perdido una parte muy importante de mi vida mientras estaba sumido en mis asuntos, para cuando volví a la realidad no tenía padre, tampoco mejor amigo. Un político, el cual había estado haciendo fraude al país durante cuatro años, estaba siendo buscado por mi equipo y para vengarse envió alguien a mi antigua casa, entró, disparó y asesinó a ambos mientras yo estaba fuera. Había una imagen que aún no podía borrar de mi memoria y que me atormentaba cada vez que cerraba los ojos al dormir.
De eso hace ocho años, ocho tortuosos años en los que había trabajado como un policía común, encerrando en cuatro paredes a borrachos molestos y personas que alteran el orden público. Pero esa tranquilidad que tengo ahora es una consecuencia a todo eso, hasta que vi mi vida caerse a pedazos tuve el valor de alejarme de ello.
Me coloqué de pie con el vaso y botella en cada mano, caminé hacia la pequeña sala de estar y me senté en el sillón frente al televisor.
Siendo sincero, una parte de mi extrañaba hacer esas investigaciones, pero la otra parte no quería volver a pasar por algo así de nuevo.
Tomé el mando a distancia y encendí el televisor, pasé de canal en canal hasta dar con las noticias nacionales. Rubén Acosta, uno de los mejores presentadores que tiene el país estaba dando aclaraciones sobre un asesinato recién descubierto. Subí un poco el volumen del televisor para escuchar mejor.
—Según las autoridades italianas, el postulante a presidente de Italia, Fabrizio Gussoli fue encontrado muerto hace dos horas en una de las oficinas de su empresa, junto con un folleto lleno de información donde se menciona que había estado estafando a otras empresas y personas. No logran dar con el asesino, puesto que las cámaras fueron desactivadas así como la electricidad y telefonía del edificio durante media hora, en la que se asume, fue originado el homicidio, la policía y la CIA trabajan en busca de pistas sobre el presunto asesino o asesinos.
Sabía sobre muchas personas que trabajan y viven de asesinar gente importante, podía mencionar cinco nombres por país de sicarios con bastante fuerza como para mover a los mismos políticos y hacerlos trabajar para ellos.
Había una razón por la cual me incorporé a esa agencia hace diez años, no es normal que a un niño de ocho años le preguntes que quiere ser cuando sea grande y que esté te responda que quiere ser un agente secreto de la CIA.
Pero para que no quede en duda, les puedo asegurar que todos los sueños se pueden hacer realidad, pero también se pueden convertir en tus peores pesadillas.
Temía volver a ser agente y que mi madre y hermanos tengan que sufrir las consecuencias.
Llené de nuevo el vaso, caminé hacia la barra y dejé la botella en su lugar, fui apagando los interruptores de luz, mientras me acercaba a la habitación, a como pude me fui aflojando el nudo de la corbata color azul marino con una mano, coloqué el vaso sobre el cajón de noche junto a la cama. El resto des la noche la pasé despierto, no lograba dormir, en algún momento de la madrugada me quedé dormido aún con la ropa que había usado durante la tarde.
Cuando me desperté por la mañana tenía varias llamadas perdidas de mi hermano Bastian y unas cuantas de Cáseres . Algo andaba mal y no tardé demasiado tiempo en darme cuenta de qué era.
Una última llamada de Cáseres que finalizó conmigo sentado en la mesa frente a la computadora esperando un mensaje con un link que aclarará todas mis dudas. Cuando este llegó y lo abrí, me envió directamente a una página web de noticias mundiales, me tomó unos segundos comprender lo que estaba sucediendo.
Habían asesinado a Hassan Al Abdul, el hijo sucesor a jeque árabe de los Emiratos. Una nota escrita en italiano fue encontrada junto al cuerpo del joven dentro del carro donde se encontraba, curiosamente él estaba en Italia en un viaje de negocios. La nota decía que su padre Khasin Al estaba envuelto en una red de sicariato que lideraba gran parte de América latina.
Algo en ambos sucesos ocurridos en las últimas veinticuatro horas me decía que no iba a ser lo último del día.
Algo más tenían en mente, algo grande, pero, ¿quién está detrás de todo esto?.
Un último mensaje de mi antiguo jefe llegó a mi computadora, quería que nos encontremos en su oficina dentro de un par de horas. Sabía de antemano lo que él quería hablar, ¿pero quería yo realmente hacer esto?